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Jimin.

—Jiminie —susurró desconcertada. Ella no despegaba sus ojos de mi.

—¿Jiminie? ¿Ese es tu nombre? Menudo nombre de nena para el "bate récords" —Dijo mi contrincante alzando sus dedos para entre-comillar lo de bate récords. Me limité a reír, todos a la expectativa. –Dime, ¿tú que derecho tienes en decirme lo que mi novia puede hacer por mí y lo que no? ¿Jiminie?

¿Novia? Tiene que haber un malentendido, ella me dijo que tenía ex, no un novio.

No le haré caso, lo molestaré. Si ve que me irrita entonces se aprovechará. Le dediqué una sonrisa llena de malicia y caminé hasta él.

–Mi nombre es Jimin, pero Jiminie me dice tu novia cuando la vuelvo loca.

No puedo describir la cara de humillación que tenía aquel estúpido cuando dije esas palabras. Si todos se rieron con el comentario de "Jiminie" entonces ahora lloraban de la risa.
También temía por la reacción de Zephyra, esperé una cachetada de su parte pero no lo hizo. Fui un poco explícito, más sin embargo ella lo que hizo fue echarle más leña al fuego.
Caminó a mi lado y puso su brazo alrededor del mío quedando frente a él.

–Rae –rió antes de terminar siquiera –no quieras poner en tu boca mi nombre junto al tuyo una vez más en tu vida, yo no soy tu novia y creí que ya lo habías dado por hecho. Si te arrepientes, no son mis problemas, no te mandé a que te comportaras como un estúpido. Por favor, no cuentes ni en sueños conmigo.

Y quise joder más, porque sí.

–Bebé, ahora sí. ¿Corres conmigo? –Pregunté, mirándola con puchero. Ella no balbuceó su respuesta.

–Claro que sí –respondió, dimos media vuelta pero ella se volvió para decir: –Buena suerte, que gane el mejor.

Nos fuimos agarrados del brazo hasta donde se encontraban mis amigos y mi moto, una vez que vio que estábamos muy cerca del círculo aquel, me detuvo para hacerme un interrogatorio. Antes de empezar, hablé primero.

–Ya sé que me vas a hacer como 10 peguntas. ¿Más o menos de 10? –Se puso frente a mí con los brazos cruzados.

–Vamos a ver. Número 1: ¿De verdad corres éstas motos?

–Sí.

–Número dos: ¿Por qué no me lo dijiste?

–Porque pensé que era un dato innecesario.

–No seas tonto, Jiminie –dijo y luego recordó –Número tres: ¿Te digo Jiminie cuando me vuelves loca? ¿Tan rápido lo confirmas?

–Solo quería molestar. Y tú me seguiste el juego.

–Quería molestar también, lo admito. Pero de todas formas, yo creo que tienes razón, aunque te digo así de todas formas.

–No me des esa clase de información porque luego quiero probar otra vez.

–Mmm. Sigo, número cuatro: Si no ibas a correr conmigo, ¿con quién lo ibas a hacer?

–Correción, VOY a correr con alguien más. Con una de esas chicas, no sé. –No, no lo iba a hacer.

–¡SERÁS IDIOTA, JIMIN! –me gritó, mierda. –¡NO!

perfume || park jimin [editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora