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Zephyra.

La historia no se queda con la escena del beso entre Jimin y Hye Lee, habían otros dos que dieron un mini espectáculo frente a nosotros.

¡Jungkook y Solange!

Mi amiga tomó la cara de Junkook y comenzó a acercarse, él la tomó por la cintura y se besaron. Tenía tantas preguntas por hacerle a esa idiota que violaba a mi cuñado bebé sexy el mismo día que lo conocía. ¿Será que ambos tenían tanto tiempo sin dar un beso?

Y aún así, divirtiéndome con la forma en la que los chicos humillaban a Jungkook y a Solange, no me podría distraer. Solo miraba a Jinyoung sonreír, buscando la manera de que entendiera que me quería ir pero no logré nada. ¿Por qué no me puede gustar Jinyoung? Dejaré de hacerme la misma pregunta.

–Creo que tenemos que irnos ¿verdad? – miré dramáticamente la hora de mi celular. –Ya son las 4:15. ¿Qué dicen? ¿Solange?

Esta mujer estaba en el aire y más cachonda de lo que pensé.

–¡Oh! Perdón. ¿Qué decías? 

–Dije que tenemos que irnos porque ya es muy tarde... ¿Qué hora es?

–Yo creo que sí tenemos que irnos, es muy tarde para andar por estos lados –incluso cuando Jimin hablaba yo aún sentía punzadas. Quería estar lejos de él.

–O muy temprano –es la primera vez que Hoseok dice algo fuera de contexto y no me hace reír.

Nos despedimos de Taehyung y volvimos a casa, Jimin y Hye Lee fueron con nosotros, conduciendo el auto de Jungkook mientras éste y Solange no dejaban de hablar. Jinyoung y yo fuimos al lado de ellos, en completo silencio mientras que las parejas no dejaban de interactuar. Cuando el auto se detuvo frente al hotel, me bajé inmediatamente, quería llegar antes que Solange, subir sola en el ascensor sin Jimin, su bruja y Jinyoung, y no sé... estar un instante a solas lejos de todo eso que me hacía tanto mal.

–Te espero dentro Solange... – Adiós Jungkook. 

–Adiós Zeph. Que duermas bien.

Caminé lo más rápido que pude buscando un ascensor. Entré a la habitación, cerré la puerta y me tiré en mi cama con mi rostro sobre la almohada. No quiero terminar de admitirlo, pero no tengo de otra. Estoy enamorada, locamente enamorada de Jimin y en estos momentos destrozada era poco para describir cómo me sentía, parecía como que mi cuerpo se hubiera dormido y mis sentimientos eran los únicos vivos. Buscaba el lado positivo de la situación,  pero ¿a quién quiero engañar? No lo encuentro. Quería gritar, quería lamentarme... pero no podía. No aún, no hasta que averigüe qué demonios sucede con Jimin y por qué está haciendo esto.

No es suficiente que aún quiera a Hye Lee, él la había estado ignorando. Entonces, ¿por qué de repente me deja de la forma más estúpida e infantil?

Busqué mi pijama y me fui a bañar antes de que Solange llegara a la habitación y me encontrara así. Seguro iba a querer hablar de esas cosas y no quiero. No puedo.
Me quedé en la bañera media hora más o menos, lloraba despacio porque era más rabia que tristeza, no sabía como deshacer esa impotencia así que dejaba que las lágrimas desataran ese nudo para sentirme mejor, fue entonces en ese momento en el que aprendí a llorar para ahogar la impotencia, para calmar todas esas ganas de destruir el mundo y tener que esperar porque aún no estaba totalmente armada para hacerlo.

Cuando volví a la habitación ya Solange estaba acostada en la cama extra que habíamos solicitado, estaba dormida. Yo me cambié y me acosté, me costó conciliar el sueño, mi cuerpo estaba exhausto pero mi alma no estaba tranquila y mi corazón mucho menos, no sé en qué momento de la noche, mejor dicho del amanecer me quedé dormida, pero por suerte pude hacerlo.








perfume || park jimin [editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora