Mentes Poderosas

26.

Nota: Este capítulo a penas está corregido. Notaréis la diferencia en comparación con los demás.

Ayer fue un día agotador, después del recreo fuimos a clase, no hicimos nada importante, solo una clase de biología a la cual no presté demasiada atención.

Estamos en literas durmiendo, no son incómodas, bueno, depende de si lo comparas con dormir en el suelo de una prisión.

(...)

Tras una aburrida tarde en la que no hice absolutamente nada, decidí dormir un poco.

(...)

Una almohada choca contra mi cabeza haciendo que despierte.

—Mierda, Nataly... ¿Por qué me despiertas? —farfullé.

—¿Quién es Nataly? —pregunta Madison.

Improvisaré algo.

—Ahh, lo siento... emm... Sarah... es que Nataly es el nombre de mi prima y pues... no se... ha pasado por mi cabeza. Echo de menos a mi familia en Alemania...

—¿No eras de Noruega? —pregunta Abby.

¿Y ahora qué?

Pues...

—Yo sí, pero tengo familia en Alemania —respondo.

—Dí algo en Alemán —dice Abby.

—Pues... —Mi mente intentaba recordar alguna palabra en alemán que Sabrina o Susan me hubieran dicho —. Arbeitsgemeinschaften.

—¿De verdad? —pregunta Madison.

—No, me lo estoy inventando todo —pensé en mi mente.

—Bueno, lo más importante —dije—. ¿Qué hacéis aquí?

—Vamos a reunirnos en mi habitación, que es la más grande, dentro de un rato ¿Vienes? —pregunta Madison.

—Ahh, sí, bueno...

Abro la puerta y salgo al pasillo.

(...)

Ambar llama a la puerta de Abby y ella asoma la cabeza por la puerta.

—Pasad.

La habitación de Abby es más grande que las demás.

El centro de la habitación está repleto de cojines para que nos sentemos en ellos. Tomo asiento.

Estamos: Abby, Ambar, Nicole, Madison y otras dos chicas que no logro reconocer.

—¿Dónde están las demás? —preguntó Ambar.

—No lo sé, tan solo dijeron que no podían venir —responde una de las chicas.

—¿Y Sarah? —dudo que ella haya ido con las demás.

—Aquí estoy —dijo ella entrando por la puerta.

Me muevo un poco para que Nad pueda sentarse en los cojines.

—¿Qué hora es? —pregunté.

La respuesta de Abby se ve interrumpida por unos golpes en la puerta.

Estos parecen insistir, como si fuera algo urgente.

Abby abre la puerta de su habitación y en un abrir y cerrar de ojos (en este caso de puertas), entran rápidamente muchos chicos.

—¿Dónde nos escondemos? —pregunta uno.

—¿Qué mierda hacéis aquí? —pregunta Madison.

—EN EL BAÑO —grita otro.

En ese instante, todos corren hacia el cuarto de baño de la habitación y cierran la puerta de golpe.

—¡EH! ¡NO PODÉIS ENTRAR AHÍ! —grita Abby.

Intenta abrir la puerta, pero esta está cerrada con pestillo.

—SALID TODOS DE AHÍ.

Paul asoma la cabeza.

—Shh, por favor. Callaros un momento. Si entra una profesora decidle que no estamos aquí —Dicho eso vuelve a cerrar la puerta antes de que Abby pueda hacer nada.

Otros golpes en la puerta.

—¿QUÉ MIERDA QUERÉIS? —grita Abby enfadada.

—¿Abby Clyde? —pregunta desde el otro lado de la puerta la voz de una señora mayor.

—¿Qué necesita, señorita Cooper? —pregunta, esta vez con un tono angelical, Abby.

—¿Puedo entrar?

—Claro —responde Abby con voz amable.

Hace un gesto a Nicole para que abra la puerta.

—Hola, chicas —la mujer debe tener unos 50 años, aproximadamente.

—Hola señorita Cooper —dicen a coro las demás.

—¿Por casualidad... no habréis visto a un grupo de chicos por aquí, no?

Unas risas se escuchan desde el cuarto de baño.

Abby da un manotazo "disimulado" a la puerta y las risas cesan.

Sonríe e inclina la cabeza como si fuera una niñita buena.

—No, no hemos visto a nadie —responde Madison.

—¿Ninguna de vosotras tampoco ha visto nada? —pregunta la profesora.

Todas negamos con la cabeza.

—Bien, no importa. Si los veis, avisadme.

Permanecemos en silencio hasta saber que la profesora Cooper se ha ido y Abby abre la puerta del baño.

Todos salen rápidamente del baño y de repente, parece que la habitación es mucho más pequeña. Suerte que todos empiezan a salir.

Cuando cierran la puerta, Abby me pregunta:

—Avery ¿Estás bien?

—Sí, sí, solo tengo un poco de claustrofobia —respondí dejando escapar un suspiro.

Gracias por los 45k de leídos y los 3k de votos, la historia empezó hace cinco meses y no esperé llegar nunca a tanto teniendo en cuenta que soy novata en Wattpad y esta es mi primera historia.

Pd: Feliz Navidad (hoy es 25 de Diciembre)