Desperté y estaba tumbada en la bañera de cuarto de baño de Abby.
Estaba confusa y me dolía la cabeza. Instintivamente miré a mi alrededor, pero no había nadie. Intenté recordar qué pasó anoche y por qué estaba así.
Cerré los ojos intentando concentrarme, pero en lugar de eso, un cepillo de dientes voló por los aires y se posó en mi pie.
Una vez supe que no iba a encontrar ninguna pista, salí del cuarto de baño.
La habitación estaba bastante desordenada, las sábanas estaban tiradas por los suelos y la puerta tenía unos arañazos. Intenté mantener la calma, y justo en el momento en el que vi una mancha de sangre en una de las paredes, la puerta del exterior crujía, indicándome que alguien iba a entrar.
Corrí detrás de un armario, escondida bajo unas sábanas.
Entonces un hombre con uniforme entró en la habitación.
Instantáneamente reconocí ese uniforme.
Son de esa organización.
El hombre paseó por toda la habitación, y supe que tenía que escapar.
Analicé mis opciones, podría enfrentarme a él, pero había muy pocas posibilidades de salir bien de esa situación.
Decidí despistarle usando mis poderes.
Moví unas sábanas del fondo de la habitación y él rápidamente fue hacia donde lo había apuntado.
Ahora solo tenía que golpearle con algo, aporvechando que estaba despistado.
Salí sigilosamente de mi escondite, cogí un palo selfie que había cerca de mi escondite y le golpeé en la espalda. Eso me dio tiempo suficiente para coger la pistola que tenía en el cinturón. Me acerqué lentamente a la puerta y salí justo antes de que él pudiera levantarse.
Cerré la puerta con mis poderes, para que no pudiera salir de ninguna forma y me aseguré de que no había nadie en el pasillo.
Entonces escuché un ruido proveniente del final del pasillo. Otro hombre con el mismo traje que el anterior apareció de repente.
Nada más verme, me apuntó con su pistola y yo con la mía. Pero era lo suficientemente inteligente para saber que tenía un chaleco anti-balas y que yo no tenía la suficiente puntería como para alcanzarle.
Sin darme más tiempo para reaccionar, él disparó una bala hacia mi.
Pude pararla con mis poderes antes de que esta me diera, lo que hizo que unos recuerdos asaltaran mi mente.
Él volvió a dispararme, pero yo seguía parando las balas.
Corrió hacia mi, pero yo no podía correr, porque entonces me despistaría y no podría parar balas.
Decidí arriesgarme y probar una técnica que nunca había probado con personas, pero podía funcionar.
Cogí aire y justo cuando él estaba a apenas unos metros de mi, usé la técnica de impulsar, como hacía con Ambar, pero esta vez, no era sobre un cuchillo, sino en una persona.
Después de recibir mi impulso cargado de energía, cayó al suelo a unos diez metros de distancia.
Con mis poderes, atraje su pistola, y con un palo selfie y dos pistolas, salí corriendo de allí.
(...)
No sé cuánto tiempo estuve corriendo por los pasillos, pero sé que en todo ese tiempo, no encontré a nadie.
(...)
Tras mucha indecisión por mi parte, decidí ir al gimnasio del colegio, probablemente allí encontrase a alguien.

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Mentes Poderosas
Science FictionEsta es la historia de una chica normal llamada Amanda. Excepto por el hecho de que Amanda no es una chica normal. Amanda ya estaba acostumbrada a su vida en la cárcel separada de su familia y su hermano gemelo, Ian. Pero... una vez fuera, cuando t...