Así era Calvin, un día parecía odiarme y al otro ya no.
¿Bipolar? Posiblemente ¿Idiota? Efectivamente ¿leíste esto cómo publicitario? Eres un idiota..
Volviendo al tema, Calvin hoy había amanecido "de buenas" incluso se acercó a mi cuando Chad estaba presente, y le había pedido disculpas. Fíjate, fíjate.
Chad había arreglado las cosas con esta niñita de Ambar, ya los había visto por algún lado del pasillo, Lana estaba dándose besos con Jim, y yo.. Bueno yo, estoy bastante acompañada
—¿Que piensas tanto? —Pregunto con la cabeza apoyada en la pared
—En ti, en mi —Soltó una pequeña risa y se acomodó
—Pues no pienses tanto, y actua más —Me guiño un ojo y luego me besó —¿Vamos a bailar?
—¿Enserio? —El sonrío achinando sus ojos
—No, si quisiera hacerlo actuaría— Rodé los ojos, ¿cómo me puede gustar este idiota?
...................
"Arreglate que estoy en tu casa en diez, ponete hermosa, pasó algo realmente bueno para ti"
Ese era el mensaje que había recibido de parte de Lana, "arreglarme" era una palabra pequeña para lo que hice conmigo, me tomé el pelo en un tomate, dejando algunos cabellos colgando cerca de mi rostro, amaba mi pelo, el blanco me favorecía en cierta parte.
Me coloqué un enterito que estaba a la moda, era un pantalón azul (bombacha[1]) junto con una polera que tenía un escote en el pecho pequeño. El pantalón era ancho por lo tanto cubría mis tacos negros. Eran más cómodos que mis zapatillas para ser sincera.
Después de unos minutos, algo tocaba la bocina en mi puerta, miré por la ventana y era Calvin. Mierda, justo ahora.
Pensé seriamente en quitarme todo lo que tenía puesto. Bajé procurando no caerme, abrí la puerta y quede en estado de shock. Llevaba una blusa azul, desabotonada en los últimos tres botones, dejando ver su pecho, un jeans y unas converse negras. Sentado ahí, se veía cómo de paquete.
—Los dos de azul —Dijo riendo —Casualidad, no lo creo
—Ho-hola.. Calvin, no sabía que venías. Yo.. Yo y Lana.. Lana y yo ibamos a salir, debe estar.. Por llegar —El levantó el celular en su mano, era el de Lana
—Sube y.. Te ves hermosa, Lana me dijo que usará una blusa azul, ahora entiendo porque —Completamente roja y sorprendida me senté junto a Calvin, quién sonrío y me dio un pequeño beso en la mejilla.
No era muy alejado el lugar, era una especie de mirador (que no conocía) tenía una vista a un hermoso prado, me tomó de la mano y me llevo dentro de unas enredaderas y otras plantas, cuándo yo ya estaba a punto de mandarlo al carajo, porque podrían haber insecto, no sabía que intenciones tenía al traerme aquí y andaba con tacos, me quedé errática a su lado.
Había una mesa, con dos sillas completamente bien decoradas, una vela roja en el centro y dos platos cubiertos con una tapa. Al lado una champagne reposando en el hielo junto a dos copas.
—Tenemos los mejores amigos, créeme —Me abrazó por los hombros y me hizo sentarme
—Lana tiene mucho que ver en todo esto —Era un cita de la pelicula que habíamos visto, esa donde las niñas eran cupido o algo así. Reí en voz baja.
—La verdad, yo les pedí ayuda, quería hacerte una carta o algo, pero nada suficiente cómo para pedirte perdón. —Sonreí con tristeza
—¿Me estas pidiendo perdón?
—Así es, perdóname por ser un jodido idiota —Destapó los platos, había sushi, wuau, amo el sushi. Lana hizo de su parte muy bien.
—En fin, así me gustas —Me encogi de hombros y comenzamos hablar de ambos.
Calvin, amaba hablar de autos, pero no hablaba mucho de su pasado, incluso si le insistía demasiado se enojaba. Yo era un libro abierto. Y no perdía oportunidad para decirle lo lindo que se veía, ni el para besarme.
—¿Entonces no me odias? —Me atreví a preguntar
—Creo que no, es más.. Tu.. Me, tu me gustas, y mucho —Oírlo decir esas palabras eran suficientes cómo para entender que toda la espera valió la pena.
[1] bombacha; Pantalón de material ligero y delgado.
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Seduciendo al Enemigo.
Random¿Enemigos? "Nicole Stephen y Calvin Harrison" Si bien no a todo mundo se le puede caer bien, menos podrás gustarle a tu enemigo, pero sí lo intentas un poco más, quizá el patee tu cabeza, algo es algo ¿no? Nicol Stephen, una chica de dieciséis años...