Caminaba solo por las calles, se dirigía a aquel lugar donde se encontraría con Harry y Louis, pero al no poder aguantar más, sacó su celular y llamó a la primera persona que tenía como contacto, únicamente porque él lo quería así.
El teléfono sonó un par de veces y un segundo después escuchó la maravillosa voz de Liam responderle, soltó un largo suspiro. ¿Por qué demonios tenía que ser tan perfecto?
-¿Zayn?
-¿Soy el único que te llama a esta hora?
-No. Eres el único que esperaba que me llamara. –Escuchó una risa del otro lado del teléfono y siguió hablando. -¿Me cuentas que pasó hoy?
-¿Por qué pasó algo? –Preguntó el Malik.
-Porque te conozco, eres mío ¿Recuerdas? Sé cuando algo anda mal.
-Oh, lo siento señor, no recordaba que era de su propiedad.
Ambos rieron a través de aquel teléfono, les gustaba jugarse de esa manera, era la única vez que Zayn sentía paz, además de que cuando Liam le decía que era suyo, lograba hacer que las piernas le temblaran como un idiota enamorado, aunque lo era, pero jamás lo admitiría.
-Malik. –Escuchó. –Me preocupas, ¿Qué pasa?
-Nada, calma. Niall y yo no hablamos de nada importante, solo de cómo se convirtió en el cantante raro que ahora es y jamás me dijiste que cantabas, me enojé un poco.
-Oh, eso. La verdad no es importante, ya no lo hago.
-¿Por qué?
-No sé.
-Quiero escucharte cantar. –Dijo, firmé. -¿Cantarías una canción para mí?
-Encantado. –Escuchó por el auricular. –Cuando quieras te cantaré una canción, solo dame hasta navidad para practicar. –Rió, dando a notar que era una broma.
-¿Lo prometes? –Habló Zayn, serio, logrando que Liam dejara de reír.
-Lo prometo.
Seguía caminando, no supo porqué, pero sus ojos se humedecieron cuando escuchó esas palabras por parte de su Liam. Levantó la mirada, observando el cielo, intentando disipar su mente.
-¿Ya vas a dormir? –Cambió de tema el Payne.
-Sí. –Dijo, cortante. –Liam, tengo una duda.
-Dime.
-¿Cómo haces para estar tanto en mi mente?
Se detuvo, observando que ya había llegado al lugar, una pequeña lágrima cayó por su mejilla cuando escuchó que Liam soltaba un suspiro.
-Estaba pensando en hacerte la misma pregunta.
-Es un misterio. –Dijo Zayn. –Bueno, mi mamá cree que ya me dormí, debo cortar.
-Bien, hablamos mañana.
-Claro, duerme bien.
-Tú también, Zayn.
Liam tardó un poco en cortar, quién sabe y solo era porque estaba esperanzado en escuchar al menos un “Te quiero” por parte del Malik. Pero lo que continuó, fueron solo múltiples sonidos repetitivos ya que Zayn, acaba de finalizar la llamada.
*
Liam se sentó en su cama, mirando aún el teléfono. Siempre, más o menos a esa hora, escribía un mensaje que decía “Te quiero” o hasta a veces “Te amo. Xx” dirigido a Zayn, pero llegado el momento, solo lo borraba y lanzaba el celular hacía su mesa de noche, soltando un largo suspiro.
Quería que el momento en que se lo dijera fuera especial, no solo por teléfono o por un mensaje de texto. Tampoco era que debiera apurarse, Zayn no se alejaría de su lado jamás. Pero mientras más pronto mejor, ¿Eso dicen, no?
Pero algo estaba pasando, no sabía porque, pero lo sentía, sentía que Zayn lo necesitaba. ¿Cómo ayudarlo si según él todo estaba bien? Seguro eran solo tonterías suyas y el Malik no tenía nada malo. Sí, quiso creer eso.
*
-Y siempre tarde, ya íbamos a ir a buscarte. –Sonrió Harry cuando vio al Malik entrar al local.
-Bueno, me conoces, lo mejor siempre se hace esperar. –Intentó seguirles el juego, aunque estaba seguro de que Louis y Harry ya habían notado sus ojos algo rojos por la mirada que le lanzaron.
-Bien. Vamos al grano que Harry suele dormirse a las 8. –Bromeó Louis.
-¡Oye! Mi mamá me dio permiso de dormirme a las 9 ahora. –
-Chicos, va en serio. –Habló Zayn. –Confió en ustedes, por eso se los diré, no tienen que apoyarme en esto, ya saben, si quieren…
-Zayn, dije grano, no ramas. –Lo miró Louis.
-Bueno, quiero ponerle fin a esto. –Dijo, cortante.
-¿Cómo?
