-Así que, prácticamente me estás diciendo que tenía razón y que dejarás a Liam ¿No?
-No.
Llevaban un rato platicando, ya Zayn le había explicado gran parte de las cosas que estaban sucediendo y lo suficiente como para que Niall entienda su situación. Pero al parecer no había comprendido el punto principal de todo.
-Lo que te dije. –Replicó el Malik. –Es que si todo sale bien, Liam será quién me deje a mí, así de simple.
-¿Y si no lo hace?
-Lo hará, más si tiene tu ayuda para hablar mal de mí. –Rió Zayn.
-Uhm. –El rubio suspiró, sonriendo. –Bien. ¿Y solo por eso me cuentas todo esto?
-No, es que también necesito de tu ayuda.
-¿Qué ganaré yo?
El pelinegro soltó tomo aire, votándolo lentamente, tenía tantas ganas de fumar en ese momento. Pero no lo haría, esto lo estaba haciendo por Liam, tenía que pensar en Liam y a Liam no le gustaría que lo hiciera.
-Me alejaré de tu mejor amigo, ¿Eso ya no es suficiente para ti?
*
Después de hablar con Niall, regresó a su casa, se metió a su cuarto y esperó las horas necesarias para salir y encontrarse con Louis y Harry, ya sabían esa estúpida rutina y era inexplicable como se adaptaban tan rápido.
-¿Estás seguro de lo que haremos mañana, Zayn? –Le preguntó Harry, por milésima vez.
-¿No pasaste un buen día con Louis? –Cambió de tema, logrando ruborizar al ojiverde.
-¡Claro que sí! Salimos, me compró un helado y por primera vez fue él quien vomito luego de bajarnos de la montaña rusa en los juegos. –Rió.
-¡Ey! Hiciste trampa, Styles, me dijiste que me invitabas algo, solo para después pedir ese juego.
-No hice trampa, yo le llamo Karma. –Le sacó la lengua Harry, de modo infantil.
Zayn comprendía que los tres estaban muy nerviosos por el día siguiente y que únicamente intentaban hablar de temas libres. Pero también sabía que pase lo que pase, se liberaría de toda esa mierda de una buena vez.
Aunque él se consideraba ya lo suficientemente poco, así que, solo por eso, renunciaría a lo que más le importaba.
*
A la mañana siguiente, ya Zayn se estaba preparando para ir a clases, su madre entró a su cuarto, mirándolo directamente, sonriendo.
-Estudias mucho estos días.
De nuevo ese remordimiento, últimamente se la pasaba mintiéndole demasiado a Trisha, eso ya era suficiente como para que no pudiera ni mirarla a los ojos. Decirle que estudiaba cuando en realidad salía por la ventana, no era bueno, buscara la escusa que buscara.
-Sí. –Murmuró, acomodando sus cuadernos en su mochila.
-Pero creo que estudias ya demasiado. –Rió ella, entrando para abrazar a su hijo por la espalda, colocando su cabeza en el hombro del pelinegro. –Sé que Liam es una buena influencia para ti, pero no estás acostumbrado a pasar todas las noches en vela. No quiero que adelgaces o te salgan ojeras.
-Estoy bien, no te preocupes. –Murmuró Zayn, quedándose quieto, bajando la mirada.
Sentía ganas de llorar, eso no le gustaba, más porque sabía cuánto se decepcionaría su madre esa noche, o quizás a la mañana siguiente. Levantó la mirada, volteando para darle un cariñoso beso en la frente.
-Te amo mamá. –Dijo.
-Yo también, cariño.
La abrazó, y antes de irse, solo le dijo que pasaría todo el día con Liam, llegando más tarde que de costumbre.
