Capítulo # 11

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Flash prefirió callar lo que  Twilight le había dicho en la madrugada, las palabras de ella no lo dejaron dormir lo que quedaba de noche. Fue algo inesperado escuchar aquello, no sabía de que perspectiva tomarlo, o simplemente ignorar.

Ya era de mañana, y todo estaba como que si nada hubiese pasado. Era el último día en el que Flash pasará con su padre. Eso le aliviaba sin duda.

-Aún no puedo creer que me quedé dormido en el sillón.  -Comentó su padre, soltando una pequeña risa.

-Pues creelo, después de todo, despertaste en el sillón y rodeado de un desorden. -Le dijo su hijo después de haber cerrado la puerta del departamento. Ellos acababan de hacer algunas compras. 

A diferencia de como estaba la sala antes de que Flash y su padre hayan salido, ahora estaba completamente impecable. Y Twilight fue la responsable de eso. Ella estaba ahí, limpiando el último residuo de la alfombra mientras tarareaba la música que tenía puesta en su celular.

Ella los saludó a medida que se iba poniendo de pie. Golden se acercó a ella para darle un corto beso en los labios. Flash rodó los ojos al ver aquella acción para luego dirigirse a la cocina y dejar las bolsas.

Volvió a la sala, su padre ya no estaba. Sólo estaba la ojivioleta, inspeccionando de que no haya pasado por alto alguna suciedad.

-¿Dónde está papá?

-Salió.

-¿A dónde?

-Se fue a la ferretería. Olvidó comprar una herramienta, necesita hacer un arreglo en el baño... En menos de media hora ha de estar aquí. 

La canción que estaba sonando en el celular de Twilight terminó, la siguiente había empezado. Era una música lenta y de un sonido muy agradable, indicada para bailar en pareja. En ese mismo momento Flash suspiró, pretendía irse a su habitación y encerrarse hasta que sea hora de regresar a su casa.

-¡Oh! ¡Me gusta esa canción! -Exclamó Twilight para luego correr hacia Flash, agarrar su mano y querer llevarlo hasta la sala.

-¡¿Qué te sucede?! -Exclamó mientras veía como era alejado cada vez más de su escondite.

-Baila conmigo.

Entrelazó los dedos de la mano derecha con los de Flash, mientras que la otra mano la apoyó sobre su hombro.

-No lo haré. -Trataba de separar su mano con la de ella.

-Oh vamos, ¿Qué te cuesta bailar esta pieza conmigo? 

-¡Mucho! No me gusta bailar, tampoco sé bailar. Quiero que me sueltes.

-Entonces yo te enseñó.

-No gracias.

-Flash... Deja de resistirte. -Lo miró fijamente. -Sólo es un baile.

Twilight quitó su mano del hombro del ojiazul con la intención de agarrar su mano derecha y llevarla hasta la fina cintura que tenía la joven. Flash sintió una electricidad recorrer su cuerpo al tocarla.

-Sólo sigue el sonido y déjate llevar.

La mirada determinante de Twilight logró atrapar a Flash por completo, no podía desviar su mirada de ella. Su sonrisa cautivadora junto con sus pómulos que tornaron a un rosado perfecto lo dejaron perplejo. Por primera vez él la miraba de una manera tan cercana y distinta. ¿Qué estaba sucediendo? No reaccionaba. Y cuando lo hizo, se dio cuenta que estaba bailando de una manera tan sincronizada con ella; la tenía tan apegada a él y, sin embargo, no sentía incomodidad alguna... Twilight estaba maravillada, disfrutaba el momento, la seriedad y concentración de Flash le daba el toque atractivo. Se sentía muy satisfecha de haberlo convencido de que baile con ella. Le gustaba tenerlo tan cerca y, sobre todo, volver a sentir sus suaves manos.

-No entiendo por que dijiste que no sabes bailar. Bailas perfecto.

-Pues... -Sentía un ardor en sus mejillas a tal comentario. Ella le sonrió.

Terminó la música. Automáticamente Flash se 
separó de ella sin dejar de mirarla.

-Fue divertido bailar contigo. -Twilight le dijo. El joven no se dispuso a responder, pues no sabía que decir. Estaba confundido, no tenía palabra exacta para describir lo que había sentido cuando bailó con Twilight. 

Se rascó su nuca de lo avergonzado que estaba.

-Bien... iré a mi habitación. -Informó para luego darse la vuelta.

-Espera.

"No otra vez" pensó Flash.

-¿Sí?

-Quiero disculparme por lo de anoche. -Sonrió nerviosa mientras se rascaba con temor su cabeza. -Estaba en una condición pésima, ya sabes, sentada en el suelo del baño y con el grifo abierto. Luego... me llevaste sobre tu espalda a mi habitación, mientras te decía un montón de boberías. Prometo que no volverá a pasar.

"¿Boberías?" Se preguntó en su mente. "Entonces ¿todo lo que dijo ayer lo tendría que considerar como una mentira?".

-No te preocupes, estabas ebria después de todo.

La chica le mostró una sonrisa de agradecimiento. Él se dispuso volver a su habitación, y esta vez sin interrupción. 

Suspiró el peliazul, ¿Qué le estaba pasando? ¿Por qué se sentía así? ¿Por qué de algún modo sintió molestia cuando escucho la palabra "boberías"? Tantas preguntas invadían su mente y no tenía idea de como responder cada una de ellas. Desde que supo de la existencia de Twilight, creyó odiarla, pero ahora no estaba seguro en considerar ese odio como una verdad.

Soltó un quejido de enojo.

-Recuerda por qué la odias. -Se dijo así mismo mientras restregaba las manos sobre su rostro. No quería sentir afecto hacia ella, más aún después de lo que le acabó de decir.

¡Hola! Uwu
Creo que ha pasado meses desde la última vez que escribo una nota de autor. Xd

Se supone que publicaría este capítulo el día de ayer, pero por razones del Internet no pude. U.u

¡Feliz Navidad a todos ustedes, espero que le hayan pasado muy lindo con su familia!

Aún estoy esperando mi Flash mini de regalo, pero al parecer este año no lo tendré. ;-;

Att: danielazaca

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