Se que no es el capitulo que te merecías porque te gusta lo cursi y todo eso. Pero trate mucho en que quedara bien y sea especial para ti. Te quiero un montón y sea como sea que termine esto, es casi gracias a vos por la inspiración. - - Gira a la derecha en la próxima - dijo Lauren con una voz que irradiaba dolor, mientras sostenía su pierna herida. Camila miró extrañada la dirección y se dio cuenta que no iban a un hospital. - Estamos yendo a casa de... - Si - logró contestar la mayor cuando una punzada en su pierna le corto la respiración. - Lauren estas perdiendo mucha sangre, tendríamos que estar en camino a salas de emergen... - Solo has lo que malditamente digo, Camila - la de ojos marrones la miro con el ceño fruncido, aguantándose las palabras de reproche por el tono seco de su novia. Pero entendía que el dolor podía ser insoportable y eso podría irritarla. - Y si no estas de acuerdo puedes dejarme aquí y seguir con tu vida perfecta. - el corazón de Camila dolió, no esperaba que fuera tan terca y que no creyera que ella ya no podía dejarla. - No voy a dejarte. No hay ni puta manera que lo haga. El pie de Camila se perdió en el acelerador, no podía perder tiempo. Como ya sabia a donde se dirigían no hizo falta mas indicaciones. Luego de unos minutos estaciono frente al gran bloque de departamentos ya conocido por ambas. Camila corrió a ayudar a Lauren. La detuvo por un instante y la miró fijo. - Mi vida ya no es perfecta - su mirada se perdió en la herida de su chica. Y sin mas la ayudo a bajar. Lauren no dijo nada. Ella conocía a lo que se refería Camila, estaban juntas en esto desde que todo se salio de control. Se arrepintió por como sonaban sus palabras, le dolió ver los ojos de Camila tristes. Le dolió todo. Ninguna dijo nada hasta llegar a la puerta correcta. - ¿Estás segura de esto? - preguntó la menor - Lauren - la voz de Normani sonaba preocupada - Pasen, rápido. Normani se movía hábilmente por el lugar mientras buscaba las cosas que necesitaba. Camila observo todo con cuidado y solo pudo llegar a una conclusión; no era la primera vez. La de ojos verdes tomo con desespero la botella de vodka que Normani puso en la mesita de café. Bebió directamente del pico de la botella transparente y tosió después de cada trago largo. Lauren estaba bastante mareada. - ¿Está bien que beba tanto? - Camila interrumpió a Normani - No tenemos anestesia y lo que sigue es bastante doloroso. Así que es mejor que este entumecida con tanto alcohol - Normani ayudo a una borracha Lauren a acomodarse en su sofá - Un torniquete perfecto - sonrió - Aprendí de la mejor - Puedo apostar que si - ambas se sonrieron y Normani lo corto con un gran suspiro - Ya sabes lo que sigue. Respira profundo - en una bandeja puso todo lo que necesitaba y lo apoyo en el sofá - voy a limpiar y desinfectar la herida. Todavía no sueltes el torniquete. Normani corto sin piedad el pantalón de Lauren y liberó la herida. - No esta tan mal como pensaba. Va a ser rápido - Mierda, eran mi jean favorito - se quejó la ojiverde - Todos son iguales, es obvio que los amas - se burlo la morocha de piel - No - sonrió tímida - estos eran los que llevaba el día en que conocí a Camila - cerró los ojos por causa del alcohol - el mejor día de todos - No puedo decidir si es lindo o raro - Normani hizo una mueca. Camila solo sonrió al comentario. Su corazón aleteo en su pecho como un colibrí sobre su flor favorita. Todavía se le hacia difícil imaginar todo lo que Lauren pasó por ella, desde que se conocieron la conexión fue inmediata. Su amistad crecía en pasos agigantados. Lauren sabia todo sobre Camila y ella solo lo necesario. Lauren quiso ser sincera con su mejor amiga pero era difícil, no podía saber algunas cosas porque pondría en riesgo su vida y la de su entorno. Por mucho que los celos la consumieran no debía comentar sobre la unión que tenia con Keegan y su relación con Gigi. Además seria dejar en claro sus sentimientos, y de porque nunca fue una amiga para ella. Normani continuó con el procedimiento que ya se sabia de memoria. - ¿No es la primera vez que lo haces no? - pregunto con cuidado la menor. - No - se alejó cuando termino de esterilizar todo - Con Lauren nos somos amigas hace mucho tiempo y cure cada herida que tuvo - su sonrisa fue triste - solo fueron algunas las cuales no he podido curar, como la vez que le dispararon - tomo los utensilios para comenzar a coser pero antes soltó el torniquete. - ¿Estas segura que no toco ningún vaso o algo? - detuvo Camila. - Estudié enfermería - sonrió con suficiencia - un curso avanzado y ya examine la herida, es un poco profunda - señalo y la de ojos marrones observo curiosa - pero esta bien. Solo tengo que cerrarla, hay que evitar que pierda mas sangre. La aguja atravesó la piel y la carne expuesta, la tranquila ojiverde lanzó un grito que fue ahogado por los labios de Camila. - Vas a estar bien - dijo al ver los verdes ojos aparecer - ¡Normani! - gritó entre dientes -Lo siento pero no puedo parar - respondió sin quitar la vista de lo que hacia - Respira profundo cada vez que vaya a atravesarte con la aguja. - Es la cuarta vez - gruñó Lauren - pero nunca deja de doler como la primera - ¿Cuarta? - Camila miro incrédula a Normani quien asintió - Soy muy buena para no dejar marca - Tu y las cremas - bromeó Lauren - Eso también - rió y contagio a todas. Lauren dormía en el sofá luego de la estresante curación. Camila y Normani compartían un café en la cocina. La menor no quitaba la vista de su novia. - Va a estar bien, te lo aseguro - ambas se miraron - el alcohol la tendrá dormida por otro rato mas y cuando despierte con resaca y todo vas a darle estas pastillas - le acerco una caja de color celeste - son calmantes. - ¿Nada mas? - Y supongo que va a tener hambre también - camila arrastro su mano por el cabello, cansada y asustada - Hey ella va a estar bien. Es fuerte. Aunque tu deberías serlo mas - dijo Normani - ¿ Por que lo dices? - Su mundo es complicado, su vida es peor. Pero ella no. Solo tienes que aceptar en el ambiente en el que vive y tratar de llevar las cosas como mejor puedas. Como en estos casos. - Es difícil no preocuparse - Lo sé. Y te entiendo pero no va a cambiar hasta que pueda deshacerse de Jones. Y eso ya esta en proceso. Camila quería creer en Normani pero se le hacia muy difícil que Lauren saliera en una pieza. La morocha de piel tiro y guardo todo lo que uso para curar a Lauren y se cambio de ropa en medio segundo. - ¿Vas a salir? - preguntó asustada Camila - Tengo que trabajar - buscó su llaves y antes de salir dijo - ya sabes lo que tienes que hacer, las pastillas están en el baño, hay comida suficiente para alimentar a un ejercito y si no hay nada de lo que te guste o solo quieres pizza. Hay un numero de delivery pegado en la heladera y un restaurante chino en la esquina - sin decir mas nada salio con un portazo de su departamento. Camila solo se dirigió al sofá y acomodo la cabeza de su novia en su regazo. Acaricio el cabello ondulado en cada movimiento su perfume le llenaba los pulmones. Estaba apunto de llorar, no podía perderla. El solo hecho de saber que estaba mal o en peligro le ponía los pelos de punta, el miedo era intenso. Lauren se despertó con el aroma a comida. Por un momento no supo donde estaba pero el movimiento brusco le produjo un dolor agudo en la pierna. - ¡Mierda! - gritó. - ¿Qué paso? - pregunto una preocupada Camila al aparecer deprisa. - ¿Estas bien? ¿Necesitas algo? - las palabras salían a chorros - Camz... Estoy bien - la tranquilizo - solo moví la pierna, olvide que la tenia lastimada. - Normani dijo que debía darte unos calmantes. Espera un momento - salio corriendo al baño. - No deberías preocuparte tanto - gritó desde el living - - No puedo estar bien con que estés así de lastimada - dijo Camila en un tono bajo cuando volvió del baño - Es difícil para mi esta situación - Lo siento. Yo debí advertirte que Jones trabaja así. Y que esto podría pasar - Tuve mucho miedo, Lauren - se recostó con cuidado a su par y enterró su cara en su cuello - Lo siento, mi amor - besó justo en la linea de cabello de su frente Camila dejó a Lauren en la casa de Normani, no quería irse, le dolía dejarla sola, pero su padre había insistido en que vaya. Como era de esperarse su padre estaba sentado en el sofá frente al televisor. Camila entró en su casa y sintió ese aroma a comida casera. Su padre estaba distraído en algunas publicidades hasta que escuchó la puerta. Alejandro solo miró a Camila y espero paciente a que ella se acercara por su cuenta. La de ojos marrones dudo por un segundo hacia donde ir, suspiro mientras caminaba dudosa hacia su padre. - ¿Donde has estado? - Con Lauren - respondió con el mismo tono de indiferencia - mamá sabía que iba a estar con ella. ¿Algo mas? - Tengo que hablar contigo de esto. No tienes idea en lo que esa chica esta metida. Hoy recibí una llamada sobre un ajuste de cuentas - Solo atacaron a Lauren - su piel se erizo al recordar - ella no dejo que me hicieran nada por si te preocupa - Camila... - suspiro derrotado - pueden matarte solo para vengarse de ella. No entiendes el peligro que corres. - Estoy consiente de ello - lo miro fijo - ambas sabemos - La comida esta lista - gritó Sinu desde la cocina - Lauren estaba repasando mentalmente todo los datos falsos que había puesto en el pendrive que le dio a Thomas. Ella sabia que debía manejar una buena información para que creyeran que era real. Escaneo el plano original de la casa de Jones y armo una red falsa de seguridad con la intensión que cuando el policía le mostrara la información a su "jefe de contrabando" él cambiara toda su configuración y guardias de seguridad. Entonces ella podía usar su computadora con el programa de hackers que le recomendó uno de sus vecinos. Sonrió por el pequeño paso adelante que estaba teniendo en ventaja. Al reconocer a Thomas esa noche todo cambio en su cabeza. Confío en alguien que se suponía que no podía traicionarla. Pero a quien engañaba, era estúpido confiar así en una persona. Pero sin embargo puso en sus manos su seguridad y la de Camila. Tenia en sus manos una copia de la información. No necesitaba volver a revisarla porque la conocía pero sin embargo sentía un pequeño cosquilleo, como si algo estuviera por salir mal. Dejo todo sobre la mesita de café e intento levantarse. Odiaba estar tanto tiempo sentada y el dolor de la pierna se volvía peor, el efecto del calmante que le dio Camila ya había pasado su efecto. Caminó con dificultad hasta la cocina donde distraídamente su novia dejó la tableta de cápsulas. Tomó una con un gran sorbo de agua y volvió a su lugar. No había mas nada que hacer hasta que su celular sonó. Sonrió apenas reconoció de quien era la llamada. - ¿Puedo saber por que te desapareces tanto tiempo? - dijo una voz con un marcado acento latino - Porque no has estado en un mismo lugar por mas de dos días y mayormente tu celular no tiene señal a donde vas - rió - Puede ser cierto - la voz femenina sobrio detrás del aparato. Amaba la voz de Lauren, le encantaba saber de ella. Fueron inseparables cuando ella estaba alrededor y aun así cuando se fue a explorar el mundo. Pero su lugar era ella. - ¿Lucy? - preguntó preocupada por la falta de comunicación. - ¿Esta todo bien? - Acabo de llegar a un lugar increíble y... Pensé en ti - ¿Donde estas? - Lauren no tenia mas nada que hacer con su tiempo y no podía pedir mas que las aventuras de su amiga. - En una pequeña isla de Nueva Zelanda. Lucy no veía mas que matices negros y verdes. Era casi estúpidos pero Lauren estaba ahí, en todo. - ¿Cuando vuelves? - preguntó Lauren luego de escuchar la descripción del lugar - No lo sé, para ser sincera - rió - estoy enamorada de donde estoy y quiero estar lo mas posible antes de elegir otro destino. - Quisiera estar ahí, las cosas por aquí se están poniendo un poco locas. - Lo suponía - ¿Por que? - Intuición - Has hablado con Normani ¿No es así? - Por supuesto que si - Lauren carcajeó y se escucho por todo el departamento. Detrás de la puerta de la casa de Normani estaba una morena agitada por el esfuerzo de las escaleras. Cuando su corazón se normalizó escucho la melodiosa risa de su novia. - Te extraño - escuchó No supo como reaccionar pero que le dolió escuchar eso, era seguro. Pasó a paso lento y llego hacia la morena que estaba entretenida en una conversación por teléfono. - Hola - dijo en voz baja mientras dejaba las bolsas con comida - ¿Puedo llamarte luego? - le dijo a la persona de la otra linea quien Camila desconocía. Después de la afirmación cortó. Lauren sonrió de oreja a oreja cuando vio a su novia desconcertada por la llamada. - No tenias que cortar. Solo vine a traerte comida y ver si necesitabas algo mas. - No te preocupes. En algún momento volveremos hablar - sobrio porque sabia que su novia estaba celosa y lo que hacia era ponerla aun mas. - ¿Quien era? - pregunto nerviosa mientras ponía la comida cerca de la de ojos verdes - digo, si es que puedo saber. No es que necesariamente tengas que decirme. Solo que tengo curiosidad pero estoy bien con que no me lo digas... - Eres aun mas hermosa cuando te pones celosa pero mas aun cuando estas divagando - rió - es impresionante como pueden salir tan rápido las palabras de tu linda boca - Eres una idiota. Pero igual quiero saber quien es - Lucy - ¿Vives? - pregunto preocupada Camila. Si había una persona que le tenia tanto respeto era a Lucy. Según Lauren, las historia que contaba sobre ella, la hacia ver como una leyenda. Si en algún momento dudaba de Keana, Lucy la hacia ver como una hormiga en comparación. No era muy difícil de describir a Lucy. Pero lo difícil para Camila era ver como los ojos de Lauren brillaban cada vez que contaba algo. Como su aura cambiaba cuando hablaban cinco minutos por videollamadas o una simple llamada. Y ahora podía ver que su chica olvido por completo que tenia una herida curada de cinco puntos. - Ella - y ahí estaba de nuevo esa emoción en la voz de la ojiverde - Después de meses de no saber nada, esta en una isla en Nueva Zelanda. - Todavía sigue lejos - Lo se - estiro su brazo para que su novia se acomodara entre ellos - Ella es especial sabes? - la de ojos marrones suspiró - Ella podría cambiar el mundo. - Al igual que tu Ambas quedaron en silencio. Lauren recordaba momentos en su niñez con Lucy, cuando eran súper heroínas y defendían a los mas pequeños en la escuela. Las dos, luego llego Keana y eran inseparables. Y Camila por otro pensaba que jamas seria como ellas, pero ella tenia a Lauren el resto no importaba si la tenia entre sus brazos y la miraba fijo antes de decirle que la quería. - Los días comenzaron a pasar y con ellos la herida de la de ojos verdes dejó de doler. En los días que pasaba a solas en su casa comenzó a estudiar cada movimiento en su computadora. Tenia acceso a las cámaras de seguridad y podía verlas tranquila en su casa. En un cuaderno anotaba cada cambio de turno, la cantidad de agentes que cambiaban y cuales hacían los turnos mas largos los fin de semana. Los manos derecha, los insignificantes, etc. Tenia todo estudiado. Había hecho un plano de los túneles de ventilación a los cuales podía pasara sin tocar ninguna red de seguridad con láser. Ella pensó que seria estúpido ya que hasta una simple cucaracha podría activarlo, pero era de Jones quien hablábamos. Por suerte Lucy tenía mas contacto con ella. Hablaban por horas y era la única a quien tenia informada de cada paso que daba. Camila estaba tranquila por una parte. Su padre no tocó mas el tema pero casi no paraba en su casa. Dinah y Ally se reunieron con Camila una de las noches que Lauren ocupaba todo su tiempo. Camila estaba preocupada por la obsesión de que todo saliera perfecto. La extrañaba mas que a nada. - No es divertido si no estas aquí - dijo Ally interrumpiendo los pensamientos de la morocha. - Lo siento - respondió apenada - pero no puedo dejar de pensar en Lauren - Eso no seria nuevo - rió Dinah - pero hoy estas muy distante. ¿Esta todo bien entre ustedes? - Claro, solo hay otros problemas de por medio que nos tienen separadas - ¿Quieres hablar de ello? - Ally acaricio la mano de Camila - - Es complicado, demasiado. Me gustaría poder hablar con ustedes sobre esto pero no puedo - se movió incomoda en el sofá - ¿Tan malo es? - presionó Dinah - Muy malo Dinah y Ally solo miraron a una perdida Camila. Ambas sabían que algo andaba mal pero no tratarían sacarle nada, por lo menos no ahora. - Lauren tecleaba unas coordenadas. Ella misma en estos momentos pensaba que estaba haciendo un trabajo exagerado pero no era para menos, aquí se estaba jugando la vida de las dos y de su familia. No tenia ni idea de cuanto iba a tardar Thomas en darse cuenta de los datos falso o cuando Jones reconozca que nada de lo que hay ahí es tan cercano a sus planos. Pero tenia la esperanza de que por lo menos no lo revisara con su seguridad. Por lo que debía actuar rápido. Estaba tan concentrada en escribir un documento donde explicaba perfectamente los movimientos de Jones, otra forma para que su abogado tuviera mas pruebas para cuando la denuncia fuera efectuada a su tiempo. Y podría tener aun más pruebas para respaldar su declaración. Y tenia un pies adelante cuando Thomas empezó la investigación poniendo el nombre de Lauren como encubierta. Su celular sonó sobresaltando a una enfocada Lauren. Puso una mano en su pecho y respiro hondo antes de mirar el mensaje. "¿Tengo que preocuparme de porque no has pasado por mi?" Decía el mensaje de su novia. Lauren fijo la vista en el reloj e iba atrasada media hora. Habían hablado toda la semana de que hoy se verían porque ya tenia casi todo listo. " Lo siento, lo siento mucho. Ya estoy saliendo para tu casa." Lauren preparó las cosas que iba a necesitar y salio como un rayo hasta su camioneta y de ahí hasta la casa de Camila. - Camila no tenia ni idea de lo que tenia planeado su novia. Pero cuando aparcó en la arena de la playa y abrió la puerta, no pensó en lo hermosa que se veía. Había colgado unas luces para ambientar la camioneta y estiro la cama para que pudieran ver la noche, las estrellas desde ahí.
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- Esta es mi forma de disculparme contigo - Lauren... - No tengo escusas por no vernos pero tengo algo que estado trabajando aparte de lo de Jones Lauren caminó hasta dentro de la furgoneta e insistió que Camila entrara. La recostó en la cama y le señaló el techo. - Hice unos cambios con el techo - sonrió - no pensé que podría ser tan fácil hacerlo. Me costo un par de billetes mas pero definitivamente vale la pena - miró a una Camila embobada - Es demasiado. No pensé que le harías mas cosas. - No lo tenia pero vi unas fotos en Internet y contrate a unos amigos y aquí está. - Es hermoso - No tanto como tú y quiero que lo sepas. Quiero que sepas que te adoro desde el primer momento en que te vi. Siempre has sido tú. No hay nadie como tú. - suspiró - no quiero sonar cursi pero no puedo evitarlo con la cantidad de cosas que están pasando y van a pasar. Yo solo quiero que sepas y entiendas lo mucho que te quiero - No hagas esto como si todo va a salir mal - No, no lo hago pero es una posibilidad. Es un 50/50 de probabilidades de que suceda algo malo - No quiero que te suceda nada malo - la abrazó con fuerza, como si fuera el último - va a salir todo perfecto. Ya vas a ver - Por supuesto que lo hará - besó su frente insegura de eso, pero debía transmitirle seguridad - ¿Cuando va a comenzar todo? - Camila hay algo muy importante que debes saber y que tienes que prestar mucha atención. - miró fijo a los ojos marrones - Esto es muy difícil y complicado. Tengo todo bajo control y hable con un par de amigos que van a ayudarme. Según mis planes todo tiene que salir a la perfección. Tengo todo en mi cabeza estudiado, cada movimiento hasta cada nombre. Tu papá va a estar implicado en muchos cargos si mi denuncia es hecha. Perdóname si esto va a cambiar tu familia, pero no vas a quedar desamparada. Vamos a salir de esta. Lo prometo. Pero tienes que saber que pueden ir por ti también. Tienes que cuidarte. Ve a una casa de tus amigas o un familiar por unos días. Hasta que yo pueda decidir si es seguro o no - la menor trató de protestar - Solo hazlo por favor. Por mi - asintió - No respondiste a mi pregunta - Mañana, Camila.
- Lo que me costó este capítulo. Ojala sea de su agrado y espero no tardar tanto la próxima. Si hay errores disculpen, lo escribí con mi celular. Y va dedicado a la única persona que me hace sonreír. Mi Dulcinea... 😍
