Admitiendo Mis Sentimientos

Capitulo 4

- Entonces te espero en la fiesta - dijo Ben mientras me daba un beso fuga en los labios.
Ben era mi novio, llevaba con el desde a principios de curso. No me gusta, solamente me da pena dejarlo.
Cerró la puerta y cuando me dí la vuelta ahí estaba esa preciosa chica mirándome con la ceja arqueada.

- ¿Sigues con él Em? - me preguntó Alison desde las escaleras.

- Eh.. si - dije cortante. No les conté a ninguna chica que ya no me gustaba Ben, no sé a que venía esa pregunta.

- Te mereces algo mejor Emily -me dijo mientras giraba la cabeza y pestañeaba seguidamente.
Se encontraba preciosa. Incluso cuando no estaba arreglada se veía hermosa. Le había dejado una sudadera grande de mi padre y se había quitado el maquillaje un rato hasta que llegasen las chicas.

Es  verdad, merecía algo mejor. Es decir, Ben siempre me ha tratado genial y es muy bueno. Pero no me gusta. Me encantaría ir a donde esa rubia y decirle que no me gusta él, que me gusta ella. Que llevo casi dos años enamorada de ella. Que Ben era una tapadera sobre lo que realmente me gusta, que son las chicas.
Pasó diez minutos y tocaron la puerta. Observé el reloj de la cocina, eran las 8pm.
Al abrir la puerta ahí estaban Spencer, Aria y Hanna con sus bolsas imaginándome que dentro estuviesen sus vestidos.

- Hola chicas - les saludé - pasad, Alison ya está.

Asistieron y entraron. Aria había tenido la brillante idea de pedir comida China.
Una vez comidas fuimos a mi cuarto y dejamos todos los vestidos sobre la cama.
Alison empezó a repartir los vestidos y nos fuimos cambiando.
Estamos todas vestidas menos Ali.

- ¡Dadme un minuto! -gritó desde el baño. Llevaba literalmente una hora arreglandose. Sabía que era muy coqueta pero no tanto...

- Ali... estas... preciosa - dijo Aria mientras la rubia entraba en la habitación.

Me quedé durante largos segundos mirándole. Le había confundido con un ángel. Vestía un vestido blanco como la nieve con pequeños detalles en azul donde resaltaban en especial sus preciosos ojos. Se veía preciosa.

Me miró - ¿te gusta Em?

- Estas... muy guapa - solamente me salió decir eso.
¿En serio Emily? ¿Guapa? Ese es un adjetivo de niños de diez años. ¿Por que se refería a mí? Me ponía nerviosa esas preguntas.

Una vez estar listas salimos del cuarto y nos dirigimos a la fiesta de Noel Khan, dónde se encontraba a casi una hora de distancia.
De pronto vino un descapotable rojo pasión con un chico algo mayor que nosotras dentro. Entonces Ali fue corriendo y gritó:

-¡Ryan! Has venido en el mejor momento.

- Lo sé rubia, me imaginaba que aún no podías conducir. No iba a dejar a mi pareja de baile plantada ¿no? - entonces se rió. Tenía unos dientes preciosos. - ¡Entrad chicas! - dijó mientras tocaba el cláxon.

En el trayecto, Alison estaba constantemente hablando con él y riéndose a saber de qué. No paraba de mirarles.

- No puedo creer que su pareja de baile sea Ryan Costinn - comentó Hanna.

- Créetelo. ¿Te sorprende? Alison es guapa y Ryan también. - le respondió Spencer.

Debía reconocer que hacían buena pareja. ¿Se gustaba Ali de ese tio? No podría soportarlo.
¿Pero que te crees Emily? ¿Acaso se va a gustar de ti? - dijo mi conciencia.

En cuanto salimos del coche, en lo único que podía fijarme era en la enorme casa que tenía en frente.
Sus luces iluminando la oscura noche era fascinante.
Entramos en la casa y era un auténtico palacio. Fuentes enormes, techos giganges, ponches, mucha gente y música lo más alto posible.