Capítulo 11

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-Lo siento chicos, me ha salido un imprevisto y tengo que marcharme- mis compañeros casi se pusieron a bailar cuando la maestra dijo eso, ella sonrió torcidamente al ver su reacción.- Pero no les dejaré la clase libre- todos abuchearon.- Lean los capítulos 11 y 12 y luego hagan un resumen de cada uno. Lo revisaré la siguiente clase.

La maestra tomó sus cosas y se fue, tal y como lo imaginé nadie le hizo caso, nadie se puso a leer los capítulos que había dicho. Por el contrario guardaron sus cosas y algunos se fueron, otros se quedaron en sus lugares para platicar. En caso de Louis sacó más papeles para hacer la tarea de otra materia.

-¿Qué tienes que hacer?- le pregunté al observar los feos dibujos que hacía. Eso se suponía que era un muñeco pero la verdad no parecía.

-Dibujarme y poner alrededor mis virtudes y mis defectos. Arriba las virtudes y abajo los defectos- contestó sin verme ya que estaba realmente concentrado en su trabajo.

Decidí no molestarlo y ponerme a ver videos en mi celular, sin embargo no me fue posible hacerlo.

-Hola, niña- sonreí gigantemente cuando volteé a ver a Jaziel que se sentó a mi lado.

-Hola.

-¿Qué haces?

-Iba a ver videos.

Jaziel y yo comenzamos a platicar en lugar de ver los dichosos videos y creo que fue mejor platicar con él que hacer cualquier otra cosa. Llegó con nosotros el chico pesado del salón y pensé que ahí se había terminado nuestra platica al ver que Jaziel se había levantado de la silla, ahora odiaría más a ese chico. Pero en su lugar, Jaziel fue bastante tosco con él como para hacer que se alejara de nosotros, se estaba pasando el tipo.

-Veamos que tienes en tu celular- dice Jaziel quitándomelo. Puse los ojos en blanco cuando él abrió la cámara y empezó a hacer caras.- Vamos a tomarnos una foto niña. Acércate.

Así lo hice y luego presioné el botón para que la foto se capturara, mi sonrisa era muy grande y la razón se debía al chico que estaba a mi izquierda.

-Nos vemos negros, Jaziel, estamos negros- bromeo al ver las fotos.

-La luz hace que nos veamos negros, ven para acá- jala de mi brazo para que me levante y nos pone contra la luz del sol.- Ahora si nos vemos todos unos rubios, tómala.

Cojo con ambas manos el celular y sonrío de nuevo, mi corazón comienza a hincharse cada vez más en mi pecho conforme voy sintiendo unas manos rodear mi cintura, su cabeza la coloca a un lado de la mía, miro su sonrisa y sus ojos a través de la cámara y las mariposas enfurecidas en mi estómago empiezan a revolotear por todos lados.

¿Él podrá sentir toda la revolución que causa en mí con un solo toque, con una mirada o con una sonrisa? Sí, estoy loca, pero él es la razón de mi locura.

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Aquí tienen otro pedazo, no olviden votar y/o comentar si les ha gustado el capítulo, espero que haya sido así. En fin, nos seguimos leyendo <3

Cosas que nunca le dijeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora