Love Only; Camren.

Capitulo 41.

MONTERREY, MEXICO.

2 DÍAS DESPUÉS...

– Lolo despierta. – La ojiverde se removió en la cama al escuchar la voz de la latina llamándola y cuando Camila pensó que por fin se levantaría ésta sólo tomó la almohada de la castaña y la puso sobre su cabeza para seguir durmiendo.

Camila resopló indignada. Ya no sabía qué hacer para que Lauren se levantara. Ni siquiera recordaba que ésta durmiera tanto pero al parecer aún no se acostumbraba al cambio de horario ya que no se dormía hasta la madrugada y se levantaba cerca del mediodía. La latina recorrió la habitación con la mirada buscando algo que sirviera para despertar a su novia hasta que una idea cruzó su cabeza haciéndola sonreír maliciosamente.

– Bueno, sólo quería que supieras que Kaya vino y saldré a comer con ella, nos vemos. – Gritó cerca de la puerta y escondiéndose detrás de ésta para ver la reacción de la ojiverde que rápidamente se sentó en la cama moviendo la cabeza de un lado a otro buscándola.

– ¡Tu no saldrás con esa imitación barata de Lily Collins! ¡¡Camila!! – Gritó poniéndose de pie y saliendo de la habitación para encontrarse con la susodicha riéndose a carcajadas recargada contra la pared.

– Lo siento amor, ya no sabía cómo despertarte. – Dijo Camila riendo haciendo que la ojiverde frunciera el ceño.

– Muy graciosa Cabello. – La castaña tomó su cara entre sus manos y le dejó varios besos por la cara haciendo que ésta riera por las cosquillas.

– Ve a cepillarte, el desayuno está listo. – Dijo besando su nariz con una sonrisa. La ojiverde asintió medio dormida aún y se dirigió al baño mientras que Camila bajaba a la cocina para servirle sus pancakes y café.

Mientras Lauren hacía sus rituales de higiene aprovechó de revisar sus mensajes dándose cuenta que tenía varios de sus padres que decían que debía ir a visitarlos y que no aceptarían un no por respuesta. La castaña resopló escuchando el grifo del lavamanos del baño donde Lauren estaba sin saber qué hacer. Sus padres no sabían nada de que había terminado con Kaya y mucho menos que había vuelto con Lauren. Ya podía escuchar a Sinu gritándole en español por toda esa falta de información pero por otro lado no podía evitarlo para siempre. La ojiverde estaba viviendo con ella y era cuestión de tiempo para que sus padres y ella se conocieran, así que sin darle más largas tomó su celular y le avisó a su madre que iría a almorzar a casa y que pusiera un plato más en la mesa, sin especificar por qué. Escuchó los pasos de la ojiverde acercándose a la cocina y rápidamente guardó su celular en el bolsillo al tiempo que Lauren entraba luciendo sonriente y despierta.

– ¡Pancakes! – Chilló la ojiverde lanzándose a los brazos de su novia para besarle toda la cara.

– Con Nutella. – Agregó Camila una vez su novia la soltó para agarrar el pote de chocolate y ponerle encima a los pancakes junto con algunas fresas haciendo que la ojiverde saltara de emoción como una niña en el taburete de la barra.

– Dios, no recuerdo cuando fue la última vez que tuve un desayuno decente. – Dijo Lauren con la boca llena de comida haciendo que Camila la golpeara en el brazo.

– ¿Por qué? ¿Con Alexa no desayunaban bien? – Preguntó la latina viendo a su novia comer alegremente.

– No, siempre me sacaba a patadas de la cama y apenas me daba tiempo de comer porque sino se nos haría tarde para ir al estudio. – Relató la ojiverde recordando todas esas veces en las que salió del departamento de su amiga con sólo una taza de café en el estómago.

– Es que duermes mucho cielo. – La latina rió al ver a su novia rodar los ojos con fastidio. Detestaba que le dijeran que dormía mucho pero así era. Su risa menguó al darse cuenta de que hoy la llevaría donde sus padres y que no sabía cómo resultaría eso. La ojiverde por su parte seguía comiendo ajena a la batalla campal que se estaba formando en la cabeza de su novia al no saber qué esperar de esa visita.