Ya ha pasó una semana desde que Alexis se fue. Ya debería haberlo superado considerando que nunca fuimos nada, pero no puedo dejar de pensar en el hecho de que le gustaba a alguien... alguien que casualmente era perfecto.
¿Y qué pasa? ¡Se muda a Estados Unidos!
Hemos hablado por mensaje, entonces no puedo decir que lo extrañe, lo que me duele es aceptar que nunca vamos a estar juntos. Él se quedará allá toda su vida, eso es una realidad.
Bueno, tal vez con algo de suerte no le den la residencia permanente y... Basta, se acabó, acéptalo.
--Oye Leah, ¿te conté que Alexis se fue del país? -inquirió mi hermana Lucía, mientras ponía el episodio de hoy- no puedo estar más contenta.
Yo lo opuesto.
--Sabes, no tengo ganas de ver la serie hoy –dije mientras me levantaba del sofá- iré a mi habitación.
Ella me miró raro.
--¿Qué diablos te pasa? -de repente se iluminó- espera, ¿es por lo que dije de Alexis? ¡Dime que ustedes dos no siguieron hablando y no estás llorándole! –yo solo bajé la mirada- ¡no lo puedo creer, me dijiste que no te gustaba!
--Y era cierto... -afirmé- en ese momento.
Lucía puso los ojos en blanco. --Tú no lo conoces tan bien como yo, créeme que no es tan bueno como parece. Puedo decirte un par de cosas que te ayudarán a superarlo.
--No -la interrumpí- ya se fue, no importa y no quiero que me hables mal de él.
No es que no tenga curiosidad, pero no quiero que me arruine la imagen de chico perfecto que le tengo.
.-.-.-.-.-.
Viernes.
No entiendo por qué todos aman tanto los viernes si de todos modos hay clases.
Talvez es porque está cerca del fin de semana. Justo ahora ese es mi problema, apenas acabe el fin de semana tengo examen de química.
--¿Lista para el lunes? –preguntó Austin. Esta es la segunda vez que nos reunimos por las tutorías.
--No –admití- estoy nerviosa. Puede que ahora parezca que entiendo todo pero luego en el examen me daré cuenta de que en realidad no sé nada.
Austin sacó unas hojas de su mochila y me las entregó. –Considera esto una práctica.
Al ver las hojas descubrí que era un examen viejo del profesor Lewis por la fecha, curiosamente está sin responder.
--¿Cómo rayos lo conseguiste? –Pregunté- está sin responder significa que no era de nadie.
--Es una larga historia. Respóndelo y cuando termines saca la nota -indicó- si repruebas, llámame.
--Pero no estás disponible los días que terminan en o -le recordé.
--Bueno, en este caso haré una excepción.
--Ah... g-gracias.
--No es nada –dijo. Yo me quedé pensando, Austin explica mucho mejor que el profesor Lewis y parece saberse toda la materia de memoria. ¿Cómo le hace? ¿Estudia química todos los días o qué?
--¿Austin, cómo sabes tanto de química? –pregunté con curiosidad.
--Larga historia –es la segunda vez que dice eso.
--Tengo tiempo.
--Yo no –dijo- ya me tengo que ir.
Rápidamente se levantó y comenzó a guardar todos los materiales en su mochila.
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En busca del amor
JugendliteraturHarta de ser ignorada, Leah tiene como meta encontrar el amor. Esperar a que las cosas pasen por sí solas sin arriesgarse no ha dado resultado en 17 años, ¿cambiará algo si decide empezar a tomar riesgos?