Famous Project

Capítulo 25

Hasta que terminó el programa no dije nada, sinceramente no sabía que decir. Y para agregarle a mi mala suerte, Rashell se quedó y eliminaron a George. Mi vida es una serie de eventos desafortunados.

El camino a la casa fue demasiado corto para mi, ya que no quería llegar y dar explicaciones. Ni yo misma encontraba razones lógicas para lo que había hecho. Bueno, entre en pánico, ¿a quién no le ha pasado? Si los políticos mienten, ¿por qué yo no?

Cuando bajé de la camioneta quise volver a subirme nuevamente, ya que me encontré a Max parado en la entrada de la casa esperando a alguien, y no creo que este esperando a Peter. Quisiera decir que fui valiente y lo confronte, pero yo no soy así, en vez de eso me desvié y utilice mis pobres habilidades ninja adquiridas de películas animadas para entrar por la puerta trasera. Muy maduro de mi parte. Saqué una botella personal de jugo y tome algunas galletas de la cocina para luego salir corriendo a mi habitación. ¿Qué? Tengo hambre. Ser sigilosa no es lo mío, solo agradezco al cielo no haberme caído por el camino.

Entré a mi habitación y me desplomé en el suelo cerca de mi cama, allí comencé a comer. Tenía demasiadas cosas en mi cabeza, tengo que pensar en la famosa/misteriosa empresa para la cual Cameron y el supuesto prometido de mi tía trabajan, enfocarme en la competencia ya que no tendría más descanso, y evitar a Max y a Peter mientras pueda. Es demasiado para una chica de diecisiete años, debería estar estudiando para el examen de ingreso de alguna universidad o lo que sea, pero no, ahora tengo que vivir como si fuera parte de la película de los mini espías.

Justo al segundo que termine de comer la última galleta, alguien tocó la puerta. Me levante lentamente y fui hacia ella, le rece a Dios, Buda y Ala que no fuera ninguno de los chicos, pero creo que no le puse mucha fe.

- Hola, Max.- dije lo más tranquila que pude. Obviamente no soné tranquila.

- Hola, Haylee, quería saber si podíamos, ya sabes, charlar.- dijo haciendo gestos con sus manos.

- Mira, no quise meterte en todo este enredo, en serio, eres mi amigo y todo. Dije que eras mi novio porque fue lo primero que se me vino a la mente, y no soy muy inteligente que digamos, aunque termine el colegio con un nueve punto seis, pero esa es otra historia.- tomé aire ya que juro que se escucho más como un rap que como una explicación.- Lo que quiero decir es que lo siento si te confundí o algo parecido, te juro que no era mi intención.

- Está bien, sé que lo hiciste pensado que era lo más rápido para salir de esta incómoda situación.- dijo, sorprendiéndome por su gran entendimiento. Suspiré soltando el cincuenta por ciento de mi tensión, la otra mitad seguía por Peter.

- Es genial tener un amigo como tú.

- Si, soy genial, pero ese no es el tema en estos momentos.- dijo para luego mirar a su alrededor.- ¿Qué haremos con ese tipo?

- ¿A que te refieres con "qué haremos"?.- hice comillas con mis dedos.

- Sabes que encontrará la manera de volver a acercarse, más ahora después de que se diera cuenta que..- paró de hablar como si tuviera un nudo en la garganta. Quiso desviar su mirada pero aún así noté su molestia.

- ¿Después de qué? .-insistí a que siguiera, buscando su mirada.

- Después de darse cuenta que le importas a Peter, listo, lo dije. Maldito Mendes.- me miró con exasperación, colocando sus manos en sus caderas.

Estaba abrumada ante su declaración, pero decidí dejarlo fluir, no es momento de hablar sobre pequeñeces.

- No podemos hacer nada, ¿que quieres? ¿matarlo?.- Max subió las cejas como si estuviera considerándolo.- ¡no vamos a matarlo!.- exclamé en un susurro, hay cámaras en todos lados.