Jared y Jensen son amigos desde la infancia, para proteger a Jensen al saberse Omega y librarlo de los peligros que los exponen a estos, se hicieron una promesa, la cual consistía en que Jared sería el Alfa de Jensen hasta que alguien fuera mereced...
Jensen se encontraba en casa de Paul, los oficiales lo habían dejado mientras el Alfa hablaba con ellos sobre quien sabe que asuntos legales, intentaba controlar sus nervios y temor, lo único que podía hacer es confían en Jared, sabía que este no lo abandonaría, pero le preocupaba cuanto tiempo podría pasar, nunca imaginó que algo como esto pudiera pasarle y mucho menos, que el hombre al que alguna vez llamó amigo e incluso pensó en que pasara algo con él, lo haya traicionado de esta forma.
Escuchó la puerta cerrarse, intentó aparentar, tenía que fingir que no estaba aterrado, suspiró profundo y al escuchar los pasos del Alfa acercarse a él, dijo su mirada hacía la del castaño.
- Supongo que esto debió sorprenderte
- No sé qué es lo que pretendes con esto, sabes muy bien que Jared no lo dejara así
Paul sonrió con prepotencia - ¿Crees que me importa o me intimida? Lo que haga me tiene sin cuidado, si te recupera me da igual, simplemente voy a aprovechar cada minuto que tenga contigo, el te tuvo por años y no supo aprovecharlo – Jensen no pudo evitar estremecerse por la manera en que o dijo y la forma en que lo miro.
Vio a Paul caminar hacía él y su lobo interno instintivamente retrocedió, no quería al Alfa cerca de él por ningun motivo, pero a los pocos pasos la pared le impidió alejarse más, hasta que Paul quedó a tan solo centímetros de él.
- Un Omega como tu corre mucho peligro sin estar marcado... creo que se los dije a ambos varias veces...
- Confié en ti, realmente confié en ti
- Grave error.... - Paul paseó sus manos por los brazos del omega, este solo se asqueo al sentir la caricia, Paul se acercó al cuello del rubio, este contuvo la respiración, sabía que cualquier cosa que tratara era imposible, jamás podría ganarle a un alfa.
Pero haría el intento.
En el momento en que Paul quiso besarlo, lo pateo en el estomago, sin duda agradecía ser alto y robusto, y corrió a la puerta, pero estaba trabada, la pateo y cuando escuchó romperse, el Alfa se había recuperada, yendo hasta él y empujándolo hacía la puerta, haciéndole daño al golpearse con la madera.
- Me gusta que te hagas el difícil Jensen, esto será divertido – le susurró en el oído.
"No... por favor, ¡JARED AYUDAME!"
Pensaba mientras sentía las caricias del Alfa.
**
Jared estaba desesperado, su padre se encontraba viendo las hojas de los tramites para encontrar una laguna o algo que ayudara, o en todo caso, utilizar alguno de sus multiples contactos para recuperar a Jensen.
- Hijo debes calmarte
- ¿Cómo me pides eso? Jensen es mi Omega, mío y me lo han arrebatado, todo por idiota, debí marcarlo, debí hacerlo en lugar de estar pensando cursilerías – se recriminaba con rencor hacía si mismo.
El sr. Padalecki comprendía a su hijo, e intentaba agilizar todo, peor era claro que incluso por mas rápido... esa noche Jensen la pasaría bajo custodia de Paul, no sabía como hacérselo entender a su hijo, mucho menos que lo aceptara.
Jared estaba apunto de volver a hablar cuando sintió un estremecimiento por todo su cuerpo, uno doloroso, uno lleno de desesperación y como si de su imaginación se tratara juraría que escuchó la voz de Jensen.
"Jared, ayúdame"
Algo dentro de sí se descontrolo y sin pensarlo dos veces salió del despacho de su padre, este solo se quedó gritando su nombre, sin entender nada.
Jared lo sabía, algo lo alertaba... y ese maldito presentimiento lo estaba ahogando.
**
Nada pertenecía a Jared No el peso brusco que sentía en su espalda. No las manos que lo desvestían con agresividad.
No las caricias que, en lugar de provocarle placer y amor, en este momento solo le provocaban asco. No la forma en que, en lugar de sentirse protegido, ahora se siente más como siendo atacado.
Nada de eso le pertenecía a Jared. Pues no era Jared.
Dolor. Su vida en este momento solo era dolor. Dolor mental. emocional. físico. Lo único que podía hacer era gritar. Pedir por su alfa. Por Jared. Pero él no lo escuchaba.
Jared podía sentir la angustia, ansiedad, enojo, vergüenza, dolor, tristeza, cólera, odio dentro de sí, sentimientos, emociones y sensaciones que no le pertenecían, cada vez conducía mas rápido, lo mas probable es que haya roto al menos 5 leyes de transito, pero lo sentía en su ser, Jensen lo necesitaba, no sabía como explicarlo, pero lo hacía... solo esperaba no fuera tarde, aunque siendo sincero... todo indicaba que sí.
Triste. Sin esperanza. Sentía asco. Desprecio. Estaba roto. Estaba sucio. Oficialmente podía ser despreciado y nadie se molestaría por ello.
¿Qué clase de omega era alguien que permite acercamientos a cualquier otro alfa que no era el suyo? No, no fue con su consentimiento... Pero aun siente que todo su mundo como lo ha conocido hasta ahora se a derrumbado.
Todo ha cambiado. Y solo podía culparse.
**
Jared estacionó el coche y se dirigió a la casa del hombre que mas detestaba, jamás había llegado a sentir odio hacía ninguna persona, pero ahora no podía mas que aborrecer al Alfa dueño de ese lugar, iba a patear la puerta cuando se dio cuenta que esta parecía un poco rota, lo cual lo confundió un poco, la empujo y logró abrirla, en cuanto entró pudo olerlo, pudo verlo...
La ira inundó todo su ser, y por primera vez en mucho tiempo, casi toda su vida.
Su lobo interno perdió el control. Queriendo matar al hombre frente a él.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Si, si ya se... me desaparezco mucho tiempo :v pero es que tengo mucho trabajo u.u no estan ustedes para saberlo ni yo para contarlo, pero actualmente trabajo en un despacho y ando con muchos asuntos encima, por eso tardo, pero no se preocupen seguiré actualizando :D
(Aunque presiento que hubieran preferido que no actualizara) Pobre Jen, que puedo decir... Ahora ¿que pasará?
