Jared y Jensen son amigos desde la infancia, para proteger a Jensen al saberse Omega y librarlo de los peligros que los exponen a estos, se hicieron una promesa, la cual consistía en que Jared sería el Alfa de Jensen hasta que alguien fuera mereced...
Jensen tenÃa una pierna a cada lado del cuerpo de Jared, el alfa besaba su cuello mientras acariciaba su cintura y abdomen por debajo de la camisa, lo que provocaba leves gemidos por parte del rubio.
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- Dios Jensen... Te he extrañado tanto
Y es que era verdad, tanto Jared como Jensen se han extrañado como locos, tanto tiempo sin poder tocarse, su relación no se basa solo en el contacto fÃsico, pero aun asà se necesitaban.
Jared regresó a los labios de Jensen mientras ambos se ayudaban el uno al otro a deshacerse de las prendas superiores.
Una vez desnudos de la cintura para arriba Jensen no pudo evitar gemir y apretar la espalda de su alfa al sentir como el castaño pasaba su lengua por sus pezones.
- Jay... Vamos a la habitación...
Jared ni necesitó decir nada, en un movimiento rápido se levantó con Jensen aun en sus brazos, el rubio lo rodeaba con sus piernas y gemÃa entre besos al sentir las manos de Jared apretando su trasero.
Al llegar a la habitación se deshicieron del resto de sus prendas y subieron a la cama, Jared arriba de Jensen.
Cuando el más alto descubrió que Jensen habÃa empezado a lubricar, este no pudo evitar avergonzarse, pero el castaño estaba aliviado ya que de esta forma podÃa saber que su omega estaba disfrutando tanto como el mismo.
Entre besos y caricias Jensen fue preparado por su alfa y lentamente fue llenado por el mismo, los movimientos que al principio fueron lentos poco a poco fueron aumentando.
- Jay... No sabes cuánto te habÃa extrañado.
Jensen era oficialmente un desastre de gemidos, jadeos y sudor.
- no sabes cuánto te he necesitado Jen... Maldición te amo tanto...
Jensen no pudo contesto en el momento ya que la respiración se le corto al sentir a Jared crecer en su interior, las embestidas eran rápidas y profundas, tanto placer que enloquecÃa al omega y lo hacÃa perderse.
Ambos aun unidos y totalmente cansados se dejaron llevar por el sueño, y por primera vez, desde hace ya un tiempo, pudieron sentirse plenamente felices.
Chad lo miró con una sonrisa – definitivamente eres un caso único, de todos los que conozco, eres el único alfa que se preocupa tanto por un omega, eres digno de admiración Jared, ojala todos pensaran y actuaran como tú – Jared lo miró interrogante.
- ¿Te sucede algo?
- Me interesa una omega, la conocà hace poco... es solo que mi familia no es como la tuya, no les agradará nada la idea de mi con una omega
- A mà un niño, pero del mismo modo, como tú dices, lo amaremos sea nena o nene
Jensen se dejó seguir acariciando por el más alto, Jared estaba más que feliz acariciando con la yema de sus dedos el vientre.
- Gracias por quedarte a mi lado Jay... ya sabes, a pesar de todo – el omega intentaba contener las lágrimas que amenazaban con salir, malditas hormonas, pensaba.
