EL ODIO DEL DESEO

CAPÍTULO 16 ¿Reconciliación?

8 meses después...

La película nos había gustado muchísimo a la tres, estábamos aprovechando este mes al máximo, porque luego Rachel volvería a la universidad, aunque esta vez junto a mí.

-No puedo parar de reír, soñaré con aquel mono durante mucho tiempo.-Rachel reía acompañada de nosotras al recordar al mono del que hablaba.-Me alegra verte reír.- Le sonreí y seguimos caminando para sentarnos en alguna heladería.

Al día siguiente de que Edward y yo lo dejáramos, Emily me convenció para ir a ver a un psicólogo y fue la mejor decisión que pude tomar, gracias al doctor Brown había vuelto a sonreír, a tener ganas de vivir y a seguir viviendo.

En cuanto a Edward, bueno, eso ya es pasado, le vi tres meses después, Emily me había llevado a Ambir, para ver a mis antiguos compañeros de trabajo y el mundo se me vino encima, cuando sin quererlo presencie la escena más dolorosa de toda mi vida. El hombre al que amaba, se estaba tirando a Lauren, la nueva gogo.

Solo quería recordar cómo era mi antiguo camerino y me estrellé contra la pared al verlos a los dos como animales en celo, Edward salió corriendo tras de mí, pero yo no tenía las fuerzas suficientes para enfrentarlo, me había dolido tanto que no pude ni siquiera mirarle a la cara.

Día tras día había ido a nuestro apartamento pero Emily le decía pacientemente que se marchará, hasta que pasadas dos semanas, se cansó de ir y ya no he vuelto a saber más de él. Los primeros meses, fue duró y doloroso y le echaba de menos a todas horas, añoraba poder sentirle dentro de mí, o simplemente sentir sus caricias y besos, su respiración, todo...pero conseguí salir adelante y verlo simplemente como alguien de mi pasado.

-Alison, cariño, ¿estás ahí?-Emily chasco sus dedos delante de mis narices para despertarme de mis pensamientos.

-Sí, solo pensaba en lo mucho que agradezco teneros a mi lado.

-Oh cielo, siempre estaremos juntas.- Respondió, increíblemente la más arisca de las tres, mi querida Rachel.

Mi móvil interrumpió aquel bonito momento y tuve que disculparme y retirarme al ver que quien llamaba era mi padre...

-Dime papá.-Contesté lo más serena que pude.

-Ali...Alison.-Mi padre titubeaba con voz quebrantada y todos mis sentidos se pusieron en alerta.

-¿Qué ocurre papá?- Mi voz sonó desesperada.

-Natasha se...se muere.-Y como si de un puñal se tratase, sentí como algo fuerte y doloroso se clavaba en mi corazón, como mis manos se ablandecían y dejaban caer el móvil al suelo, rompiéndose fuertemente.

-¿Alison?-Emily y Rachel vinieron a donde me encontraba, con ojos preocupados.

-¿Que ha pasado?-Rachel me zarandeaba desesperada para que reaccionara.

Después de tranquilizarme y volver a un estado más o menos normal, las chicas y yo volvimos a nuestro apartamento y me decidí a hacer las maletas para volver a mi antigua casa y saber sobre el estado de mi hermana. No había vuelto a llamar a mi padre, lo único que sabía es que Natasha, la persona que más odiaba en este mundo se moría y aunque lo quisiera negar, era mi hermana, con la que pase grandes momentos, con la que tan unida estuve antes de que todo se fuera a la mierda en nuestra familia, y no podía pensar en que ella muriera, no era lo que quería, necesitaba saber qué es lo que pasaba en realidad e intentar verla, aunque fuera lo que más me costara en este mundo.

-Estaremos esperando tú llamada.-Emily me ayudaba a cerrar la maleta, mientras yo recogía las ultimas cremas de mi baño.

-Y si lo necesitas podemos ir cuando nos digas.-Ahora era Rachel la que hablaba.