Prometemos según nuestras esperanzas y cumplimos según nuestros temores."
La noche se cerraba daba paso a la oscuridad, la luna parecía sublime por encima de todos los mortales.
Su luz, caprichosa iluminaba dudosamente a los dos curas caminando cabizbajos alejándose de nuevo de Alaric.
Iban caminando y hablando en voz muy baja sobre todas las posibilidades, entre otras la de fracasar en el intentó. No les importaba tanto morir en el.
Sus pasos sin destino alguno, encontaron su fin frente a una taberna cochambrosa y de poca luz. En ese momento tampoco le echaron en demasiada cuenta, el aire silvaba fuerte y hacia frío.
Estaban aturdidos, no habían tenido tiempo de descansar ni de comer desde que llegaron a la ciudad, estaban debilitados....Pero eso, era secundario.
Tenian que llenar el estómago con algo caliente, aunque fuera mínimo, porque debían de continuar.
Aún estaban a un par de horas para poder volver, y no encontrar a ningún agente policial.
Aunque siempre les quedaría una duda. "La poli Española"
Duda que aún ayudándoles provocó cierta desconfianza.Pensaron en volver a La Catedral de las Dunes despues de alimentarse. Aprovecharian para cambiarse de ropas, y ponerse los hábitos. rezarian encomendandose a lo más sagrado, al origen de las cosas. con un "As", en la manga, "el nene" y ahí estaba " Berta" que rápido les acercaría a su meta.
Entraron!!
Todo era muy rustico en donde practicamente nos dimos cuenta Que la comida consistía en tablas de pates, embutidos y quesos, o eso parecía.
- Nos acercamos a la barra de la taberna.Enseguida se les acercó un hombre ataviado con una bata verde con vestigios de aceite, por encima de una camisa a cuadros roja. Tendría unos 60 años bastante abandonado, mostraba un gran bigote rizado en sus puntas.
En ese momento fue cuando nos dimos cuenta de la impresión de suburbio. Las personas que estaban consumiendo, eran en su mayoría extranjeros de mas al norte de Europa, no eran personas buscando refugio del carnaval, ¡ no! y algunos, daban la impresión de que se iban a levantar para robarnos el mismo alma.
Eso me dio escalofríos.
- ¿ Que desean los señores?
Dijo el camarero pasando un trapo más que sucio, limpiando la parte de la barra en donde estábamos.Me llamo la atención la dicción era extremadamente limpia aunque sus modos no le acompañaban.
- Buenas noches. Le dije. - Un caldo de verduras y algún queso azul, para acompañarlo.
- Por supuesto ¿y el caballero, si es tan amable que desearía?.Fabrice miró al camarero y medio vizqueando, por hacerse a la tenue luz de la cantina, le dijo, por favor lo mismo que mi amigo, le rogaría que fuese rápido.
- la cara del camarero le sonreia, yo diría que casi con sorna, le sonreia y al segundo no, y así en varias ocasiones.
Me perturbaba.
- ¿Y Como de rapido lo quiere........?
El camarero, mostraba en su rostro desafío.
- No me sea presuntuoso caballero, contesto Gabriel. Tan solo deseamos calentar nuestros estómagos.El rústico camarero enojado, blasfemó iracundo y continuación dijo.
- Ah ya sé!!! ustedes los señores lo quieren así de rapidito, tan rapidito como aquel arapiento que hizo el mundo en 6 dias y al séptimo descanso. Paparruchas!!Continuo diciendo:
Hay que ser muy ignorante, o cura simplón para creerse esa patraña de Dios "Todo misericordioso"
TOP ONE ¡ jajajaja!!