Capítulo 7

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Narra _____.

-No pasa nada tranquilo.-consigo contestar entre sollozos, pero sin levantar todavía la cabeza haciéndole creer que no lo he reconocido.

-Sé que no me conoces y que igual es difícil que me cuentes lo que te pasa, pero quiero que sepas que a mí nadie me engaña diciendo “no pasa nada” porque sé que ahora sí que te pasa algo.

Me ha hecho reír no lo he podido evitar, ese tono que tiene y con lo divertido que suele ser me resulta imposible sonreír. Levanto la cabeza y añado:

-Vale, si pasa algo y me creo eso de que nadie te engaña. Ah por cierto y sí que sé quien eres. Eres Louis Tomlinson el chico más gracioso que puede existir.

Él suelta una carcajada, lo que me hace reír a mi también.

-Algo bueno de todo esto, que sepas quien soy y que me llames gracioso.-vuelve a reír.

Yo también me uno a su risa. Louis me hace sentir como una niña pequeña a la que solo le gusta jugar. 

Hemos estado bastante rato hablando y al final le ha contado lo que me pasaba. Es un chico que inspira confianza y bueno, tal vez es una de las pocas personas que en ese momento me puede ayudar.

De repente unos truenos comienzan a sonar, el cielo ya se ha puesto muy gris sin que nos diésemos cuenta. La lluvia no ha tardado en caer, encima no son pequeñas gotas que se pueden soportar, es un auténtico chaparrón. 

-¡______, corre! Te vienes conmigo a casa que está aquí cerca y ya te dejo algo para quitarte lo que esté mojado.

No me niego, cojo su mano y corro detrás de él mientras la lluvia nos moja. No nos paramos de reír en un solo momento, nos lo estamos pasando realmente bien. Rápidamente llegamos a la casa que comparten todos los chicos. Nada más entrar me fijo en que es enorme, muy espaciosa. Lo que daría yo por vivir en una casa así. Louis me lleva hasta su habitación que esta al final de un largo pasillo. Su habitación tiene una gran cama en medio que parece de lo más cómoda. Que ganas de dormir ahí me entran.

-Eh, Louis. Tampoco hace falta que me dejes ropa, la mía no está tan mojada. Puedo sobrevivir con ella.-digo riéndome al terminar la frase.

Él toca mi ropa y hace un gesto de desaprobación mientras dice:

-¿Qué no está mojada? Por favor _____ parece que te has caído a una piscina.

-Pero bueno, no hace falta que me dejes nada. Enserio voy a salir ahora otra vez a la calle y me voy a volver a empapar.

-¡OH no! Eso si que no. Tú te pones lo que te deje y te quedas aquí al menos hasta que la tormenta amaine.

-Bueno, vale.

Al final tengo que ceder, es muy difícil llevarle la contraria. Me pongo su “one piece” que tantas veces he visto en fotos. La verdad, es muy cómodo y me hace mucha gracia ya que parezco un bebe gigante.

Voy a buscar a Louis, casi me pierdo. Está en la cocina, es mediodía, así que supongo que está preparando la comida. Nada más verme se tapa la boca como signo de exclamación y dice:

-OMG! ¡Pareces un bebe gigante!-hace una pausa para reírse y añade.- Pero muy sexy.

Noto como mis mejillas comienzan a arder, que vergüenza me hace pasar y eso que solo estamos él y yo.

-Muchas gracias Boo. Aunque preferiría que me hubieses dado algo de rayas, ya sabes a ti esas cosas te sobran.

-Es verdad. Me lo apunto para la próxima.

-Me parece bien. Ahora, como me tienes encerrada en tu casa mientras llueve, si quieres te ayudo a preparar la comida.

-¡Una idea genial! La verdad, tienes una mente que piensa mucho.

-Malo sea…

Nos ponemos a hacer la comida. Me hace gracia ver como Louis cocina, ya he oído que no se le da muy bien, pero por lo menos lo intenta. Cuando solo falta poner la mesa cojo mi teléfono y llamo a casa para hablar con Lisa y contarle todo. Ella no deja de dar grititos de alegría al saber que al menos una de las dos tiene tanta suerte.

No hablamos mucho porque me dice que le están llamando al móvil, así que cuelgo y me pongo a poner la mesa para los chicos mientras Louis busca algo.

Everything is gonna be okay.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora