Strangers in the night. (CAMREN)

Capítulo 4.

Aquella mañana se había despertado agotada y frustrada luego de que el día anterior Evan Kirgyakos hubiera pasado la mayoría del tiempo juzgando y dudando de sus habilidades profesionales en medio de una cirugía de doble amputación traumática en un hombre de mediana edad que había sufrido un violento accidente automovilístico a la salida de la ciudad.

Sin embargo, no era aquello lo que más le inquietaba.

Se había tragado su orgullo al identificar cómo los ojos de Kirgyakos denotaban lo dañado que estaba el cirujano. Podía ver la desesperación, las esperanzas perdidas y el dolor en aquellos ojos azules oscuros... Expresiones que alguna vez también estuvieron en sus propios ojos esmeralda.

- Dra. Jauregui... - Murmuró Megan sin lograr llamar su atención.

Luego de todas las emociones recordadas al estar junto a Evan, ella había prolongado su propio cansancio intentando no dormirse por miedo a toparse con todos aquellos sueños donde volvía a su vida de hacía unos meses atrás... Enterrar sus propios fantasmas estaba siendo más difícil de lo que se imaginó al venir a un lugar tan lejano a todo como Alepo.

- Dra. Jauregui... - Repitió la técnico en anestesia.

- ¿Sí? – Dijo confundida pasándose una mano por el rostro.

- Han llamado a la Unidad 00 para el rescate de múltiple víctimas en un edificio bombardeado en la zona norte. – Le dijo con tono firme.

- ¿Están listos los bolsos?

- Sí...

- No olvides tu casco.

- Tengo listo el suyo y el mío.

...

Camila observó cómo Lauren junto a Megan seguían reanimando a una mujer de casi 40 años que se encontraba en un shock hemorrágico. El ruido de los otros rescatistas y los White helmets en el lugar no perturbaron su mirada fijada en el cuerpo de la ojiverde quien se removía en el lugar sin mucha dificultad pese a los escombros y el humo.

Sus ojos se quedaron hipnotizados detallando cómo las fibras de los músculos de los brazos de la rescatista se marcaban, aquel cabello oscuro que estaba oculto bajo el casco de seguridad color blanco, y la única expresión que existía en los ojos esmeralda, determinación.

- Tony. – Llamó al enfermero de urgencias.

- ¿Sí?

- Ve donde la Dra. Jauregui y ayuda a Megan. – Apuntó.

El enfermero afirmó en silencio y se fue hasta donde se encontraban ambas chicas. A la distancia Camila notó cómo Lauren miraba en su dirección luego de que Tony comenzara a ayudarle a Megan. Una pequeña sonrisa se dibujó en su rostro luego de que la anestesista rompiera el contacto visual.

No podía negárselo, no podía dejar de pensar en aquel beso que había imaginado tener con Lauren. Lo deseaba tanto que tenía miedo de que sus propios impulsos le jugaran una mala pasada la próxima vez en que ella y la ojiverde estuvieran a solas.

- Dra. Cabello hemos encontrado dos pacientes más, graves. – Le informó un asustado White helmet que había llegado al lugar corriendo.

Colgándose el bolso de rescate en su hombro y siguiendo al civil sirio Camila se internó en una zona con más escombros y humo que entorpecía la visual del lugar.