Cap 23

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*Beth.

Cierro los ojos al oír las palabras de Daryl...la persona mas fuerte que jamás he conocido. Y esta allí, rebajandose para que un maldito no lo asesine.

Lo toman de los brazos y lo ponen de pie. Él no deja de mirarme en ningún momento y yo le mantengo la mirada. Para que separa que estoy para él, que no lo voy a dejar.

--llevenlo a la enfermería, se ve como la jodida mierda--pide el morocho.

Aunque sea difícil de entender, solté un suspiro. Ahora va a estar mejor,van a cuidar de él...

--y Beth...puedes ir con las demás --me dice.

Asintiendo con la cabeza y con mucho gusto salgo de su vista. Mientras más lejos esté de mi mucho mejor. No voy a tenerle tanto odio.

Camino por los pasillos, subo unas escaleras y me encuentro en la habitación donde estamos todas las esposas de Negan.

--¿estas bien?--me pregunta una.

--si,ahora si-- respondo sentándome en el sillón.

--es por ese tal Daryl, ¿no?...algo bueno pasó con él --asegura una castaña.

Yo me quedo en silencio sin observarla de ninguna manera. Ella no sabe nada de mi y de nada.

--no me mal intérpretes, me pone feliz  por ti...igual estoy yo cada noche cuando veo que Dwight no ha muerto por algún  berrinche de Negan --asegura.

La miro, ella me sonríe de manera en la que solía hacerlo Maggie...demonios, como la extraño. Necesito que este aquí junto a mi para decirme la cruda realidad y que me diga que hacer al respecto. Pero ella no está...ni siquiera se si salió con vida de la prisión.

*Daryl.

En la enfermería, ven las heridas que provocaron esos malditos bastardos con sus golpes. Me informa que estoy un poco deshidratado pero nada grave y que no se pueda solucionar. Pero eso a mi no me importa, solo quiero saber como esta Beth.

De ahí, me llevan a una habitación bien amueblada. Miro todo con desconfianza, se que hay algo atrás de todo esto, puedo sentirlo.

--veo que ya estas aquí...diablos, luces como la encarnación misma de la mierda-- comenta mirándome.

No respondo, tampoco se que decirle a no ser que sean unos muy buenos insultos que pocos saben que existen.

--creo...creo que deberías sacarte esa porquería, y ponerte algo de ropa normal...si vas a trabajar para mí, mínimos debes lucir decente.

Sigo sin responder a lo que su mirada pasa de sarcástica, a enojada a lo que asiento con la cabeza rápidamente.

--si, señor-- que raro se sienten esas palabras salir de mi boca.

--muy bien, vas aprendiendo...¿sabes?,desde que te conocí me agradas, si, con toda tu fachada de odio y sin temor. Eso me dijo que tienes agallas. Y eso me gustas...eres un León --se inclina hacia atrás.

"en fin...ponte algo que luego debo decirte un par de reglas que debe cumplir si es que quieres seguir con vida y tu amiguita la rubia también--informa.

No se de que manera moverme, el oír el nombre de Beth involucrado en esto me dice que debo ser muy cuidadoso. No planear nada estúpido.
Me empuja hacia el armario, me ordena que tome algo de ropa, lo primero que se me ocurra, y me lo ponga.

A toda costa(bethyl)(terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora