Capítulo 22. Día de amigas.

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PUNTO DE VISTA DE CAITLIN

—Ten un buen día Caitlin —Mi padre me dedica una sonrisa. Yo se la devuelvo y luego cierro la puerta del coche con cuidado.

Camino por los aparcamientos de la escuela con desgana. Anoche no dormí nada, lo que me está pasando factura en estos momentos.

No sé si es por el cansancio o si será porque me voy a poner enferma pero siento que con cada paso que doy mi cuerpo se hace más pesado. A pesar de ello sigo caminando hasta que los veo.

Sí, veo a Jessica junto a Nathan besándose.

Cierro los ojos y aprieto mis puños con fuerza conteniéndome las ganas de llorar. Estoy harta de ser siempre tan sensible, yo sé que es obvio que Nathan no siente por mí lo que yo siento por él pero hay algo en mi que me obliga a no darme por vencida.

Supongo que así es el amor, a veces correspondido y otras...bueno otras veces ocurre lo que pasa con Nathan y conmigo.

Cuando abro los ojos sigo viéndoles acaramelados. Lo peor de todo es que aunque me duele admitirlo parecen pasar un buen rato.

Dejando de ser tan masoquista, me doy la vuelta.

¿Por qué yo nunca soy la elegida?

Me esfuerzo montón para que Nathan se de cuenta de que existo y de que siempre voy a estar ahí para él cuando me necesite. Sin embargo, Jessica ni lo intenta y él se queda con ella.

¿Por qué yo me esfuerzo todo lo que puedo y nunca obtengo nada?

Sin mirar mucho hacia delante sigo caminando sumergida en mis pensamientos hasta que me choco con alguien, es Brian, quien viene junto al lado de Cole.

—Caitlin, ¿estás bien? —me pregunta Brian preocupado.

Como puedo, intento fingir que todo está bien y aunque me cueste horrores, intento sonreír.

—Claro.

Cole me examina con la mirada y eso me pone más nerviosa aún. Él seguro que sabe que acabo de mentir. Es obvio puesto que soy pésima mintiendo, ni para eso sirvo.

—¿Puedo hablar contigo a solas? —me pregunta Cole, quien está echando indirectamente a Brian.

—Acabo de ver a mi amiga y ya me echan —comenta con burla Brian y bufándose—. Después nos vemos anda —termina despidiéndose de ambos con un saludo de manos.

Cuando Brian se aleja lo suficiente de nosotros Cole me mira con seriedad. Su mirada me resulta tan profundo que hace que me sienta intimidada.

—¿Qué?¿Por qué me miras así? —le pregunto ladeando mi mirada.

—Porque algo me dice que no estás bien —Cole va directo al grano.

Trago saliva y respiro con calma.

—Cole, te preocupas demasiado, en serio, estoy bien —digo mostrando una sonrisa de oreja a oreja. Él se limita a rodar los ojos. Parece que mi respuesta no le ha convencido.

—Se te da mal mentir.

—Gracias —ironizo.

—De nada, para eso estamos los amigos, para decirnos la verdad cuando haga falta, ¿no? —cuestiona él.

Sé que sus palabras van con segundas y que de verdad quiere saber porque hace un par de segundos estaba así de desanimada pero realmente no creo que sea el momento ni el lugar para mostrarle lo mal que me tiene el hecho de que el chico que me gusta este con otra chica que encima parece ser buena persona.

El club de las C Donde viven las historias. Descúbrelo ahora