Capítulo Treinta y dos

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Víspera de año nuevo, el viento soplaba, la nieve caía y Ashton estaba es su sofá viendo algún programa en televisión mientras estaba cubierto con su ropa de invierno y una manta junto a la calefacción. Todo era paz y tranquilidad mientras disfrutaba de una bebida caliente junto a algún postre mientras observaba alguna película del cliché de año nuevo. Todo era armonía.

—¡Ya es año nuevo idiota!

Hasta que Louis entró a su casa.

—¡Maldición!

Ashton sorprendido por tal acto, derramo su bebida y tiró su postre al suelo y encima de él.

—¡Louis idiota!

Louis comenzó a reír a carcajadas. Ashton se levantó y recogió el desastre que hizo gracias a su amigo.

—Eres un completo idiota -gruñó Ashton mientras caminaba a la cocina.

—Esa película ya la vi, ¿no hay otra?

—No, yo la estoy viendo y punto -contestó mientras lavaba los trastes.

—Ay, pero quiero ver otra, yo ya me se el final, se quedan juntos.

—¡Louis! -gritó Ashton.

Louis comenzó a reír de nuevo. Ashton salió de la cocina, podría decirse que salía humo de sus orejas.

—Okay, okay, lo siento, ese no es el final -dijo mientras se calmaba.

—Ya no quiero ver la película, Louis, puedes poner tu maldita película -murmuró.

—¡Si! -exclamó y fue a buscar algún disco.

Ashton gruñó y comenzó a lavar los trastes y tiró el plato roto a la basura.

—Maldito Louis -murmuró.

—Yo también te amo Irwin -contesto Louis desde la sala.

Ashton rodó los ojos. Terminó de lavar y se dirigió a la sala con Louis, quien se encontraba viendo cualquier película que a Ashton no le interesaba.

—¿No querías poner una mas ruidosa?

—No tenías una mas ruidosa.

—Eres un idiota.

—Ya lo se -rió Louis.

—Bueno, me prepararé.

—¿De qué hablas?

—La fiesta de año nuevo.

—¡Claro! Por eso llegué a esta hora -dijo Louis levantándose y saliendo de la casa.

Ashton, con el ceño fruncido, ignoró al castaño y subió a su habitación para cambiarse de su pijama a cualquier cosa pues aun eran las dos de la tarde. Al bajar, vio como Louis dejaba adornos y platos y varias cosas.

—Louis, ¿qué demonios haces?

—Ayudandote idiota -contestó dejando una caja en el suelo.

Ashton suspiró y se encogió de hombros.

—Si no puedes contra ello, unete -dijo mientras salía a ayudar a Louis.

A eso de las siete con treinta, Louis terminaba de colocar la mesa y adornos de ésta.

—Ashton algo se quema...

—¡Mierda!

Ashton llegó corriendo y revolvió la pasta mientras apagaba la estufa.

THE GUY OF THE ROSES 🌹 afi ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora