*CARA:
- Ella llegó para la cena, Claire llegó temprano y preparó algo rico, pero era tarde y estabamos esperando a Zen que no llegaba, mi padre recién se había sentado frente a mi y a su lado Claires.
Claires: Bueno mientras esperamos a Zen, cuentanos, ¿Que tal España?
Cara: Bien, cargado de gente, de energía, conocí a unas chicas muy majas.
Charles: ¿Te gusta?
Cara: Si.- Una sonrisa tonta salió de mi, entonces apareció la sonrisa de aquella profesora de arte, que enseguida quise borrar.
Claires: España es muy bonito, aprovechando que estarás allí todo el año podríamos ir a visitarte.- Mi padre sonrió.
Charles: Si.
Zen: Perdón por llegar tarde.- Dijo entrando en el salón algo agitada, ella tomó asiento a mi lado y sentí como los nervios me invadía.- Estaba estudiando en casa de Dinah y se me hizo tarde.
Claires: ¿Ya todo bien?.- Miró a su hija.
Zen: Si.- Me echó un vistazo rápido, yo no la mire pero sentí como me miró.
- Claires comenzó a servir la comida y comenzamos a comer.
Charles: Yo quisiera que te fueras después de la boda.- Miré a mi padre.- Me gustaría que estuvieras.- Yo deseaba irme ya.- Se que cuando aquí acabes tu curso allí tienen un mes de descanso antes de empezar.
Cara: Si.- Notaba la mirada de Zen, yo le dije que cancelaria lo de España, quiero que ella piense eso, que lo he cancelado, pero no quiero que mi padre vea duda en mi.- Seguro que estaré para la boda.- Le sonreí, miré a Zen y le sonreí, ella sonrió algo tranquila.
Charles: Para mi es muy importante.
Cara: Lo se.- Mi móvil que estaba entre Zen y yo comenzó a sonar, vi que era Alicia, pues ponía su nombre, Zen miraba mi pantalla.- Tengo que cogerlo, es de España.
Claires: No te preocupes.
- Agarré el móvil y salí de la cocina.
Cara: Hola.- Una sonrisa salió de mi.
Alicia: Hola, no quise llamarte antes, bueno la diferencia horaria ya sabes, también esperaba que descansaras un poco del viaje, quería saber como llegastes...si llegastes bien.
Cara: Bueno, si, llegué bien, muerta, ya sabes, muy cansada, pero ya estoy algo recuperada y dando el último salto a los exámenes.
Alicia: Eso es muy bueno, quiero verte aquí en España, grabé mi número en tu móvil, espero que no te importe.
Cara: No, no me importa.- Ambas reímos.- Pero dime, si aquí es temprano, allí debe ser tarde.- Ella volvió a reir.
Alicia: Si, se me hizo tan tarde con los exámenes, aun estoy en mi despacho corrigiendo, son las siete de la mañana y vivo de cafés, por suerte mañana no hay exámenes y no tendré que corregir, podré descansar, bueno, que no es mañana, es en unas horas.
Cara: Deberías descansar, no es bueno estar tantas horas sin dormir.
Alicia: Ahora es cuando estaba tomándome un descanso de una hora para comer algo y ya aproveché para llamarte.
Cara: Muchas gracias por preocuparte.
Alicia: Eso es parte de mi.
Cara: Verás cuando menos lo esperes aparezco y te alegro los días.- Noté su sonrisa por su respiración.
Alicia: Me caiste muy bien.
Cara: Tu a mi también
Alicia: Ya, no te quiero molestar, nos vemos pronto.
Cara: Claro que si, Adiós.
Alicia: Hasta luego.- Reí, hasta la forma de despedirse era especial.
- Miré mi móvil y sonreí, di la vuelta y volví a la cocina, vi a Zen y mi sonrisa desapareció.
Charles: ¿Quién era?
Cara: Una de las chicas que conocí en España, estaba preocupada, no sabía si llegué bien.
Zen: Vaya...como son las españolas, le das un hola y no te sueltan.- Dice algo burlona, la miré seria, mi padre sonrió ante eso.
Cara: No es eso, es que son buena gente y se preocupan de corazón.
Zen: Has dicho que era una de las chicas, osea que no son las otras que conociste, solo se preocupa una, que casualidad...¿no?.- Me mira algo desafiante.
Cara: ¿Algún problema?
Charles: Venga, parad chicas...no pasa nada.
Claires: Es normal que si ha echo una amiga se preocupe.
Zen: Claro...
- Si no la conociera pensaría que está celosa, pero es imposible que esté celosa si no me quiere, por que si me quisiera no jugaría conmigo.
Cara: ¿Que más da?, cada uno es como es, no podemos dejar de ser imbéciles.
Zen: ¿Y eso a que viene?.- Vuelve a mirarme.- ¿Me tienes que decir algo?
Cara: No, lo decía por mi.
Claires: Oye...¿Es que nunca habrá paz entre vosotras?
Cara: Con tu hija es imposible.- Me levanté, Zen también lo hizo.
Zen: ¿Conmigo?.- Me miró con rabia.
Cara: Si...
Zen: ¿Y no has pensando a lo mejor que el problema de esto...eres tu?.- Noté sus palabras tan directas que hasta sentí dolor.
Cara: Si, si lo he pensando, yo soy el problema, el problema de ser tan imbécil, para creer tus sucias mentiras.- Dije entredientes.
Charles: Nunca se puede comer en paz en esta casa.- Se puso en pie tras dar un golpe en la mesa, Claires se levantó después.
Claires: ¿Se puede saber que os pasa?
Cara: Que se queda pequeña la casa.- Miré a Claires, después a Zen y fui a mi habitación.
- Me encerre, cerré la puerta y comencé a golpear cosas, odio todo esto, odiaba todo lo que sentía, odiaba no podes arrancarme esto del pecho, de no escupir lo que siento, odiaba que ella me tratara así, de que jugara conmigo como lo hacía, de que sabía que me iba hacer daño y aún asi me dejo llevar.
- No merece que la ame, pero no puedo hacer nada para evitar esto, ella hace que me odie, que sea imbécil, idiota, que diga locuras y que no ame a nadie más...ella me hace daño, me hace daño si la amo o si la dejo de amar...ella es mi punto débil y odio sentirlo solo con ella.
- Escuché golpear mi puerta, me detuve, paré de romper cosas, noté mi cara entera empapada en lágrimas, tenía tanta rabia encima.
Zen: Soy yo, abreme.- tomé asiento en mi cama, no quería que ella me viera llorar, que me viera destrozada, es una mentirosa y no me ama, si dejo que hable volverá a engañarme otra vez.- Lo siento Cara...- Su voz sonó arrepentida, diferente a como había escuchado alguna vez.- Me he pasado y es que a veces no controlo, no estoy pasando un buen momento, por favor perdóname.
- Miré frente a mi, vi mi maleta, estaba medio abierta, no había sacado todo aún.
- Escuché los pasos de Zen alejarse, ahora pude llorar con más ganas.
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Mi Adorable Hermanastra (EN PROCESO)
Fanfic- Zendaya una chica un poco tímida pero estrobertida a la vez‚ capaz de encariñarse demasiado con la gente‚ su vida el baile y odia que le interrumpa mientras lo practica. - Cara una chica muy llamativa por su belleza y su altura‚ una mirada tentado...