Un solo latir.

Capítulo 4 |Recuerdos que duelen

Capítulo 2/2

(POV—Sammy)

-¿Y qué te dijo? – pregunto ansiosa.

-Me ha dicho que si puedes volver a cuidar sus cachorros – hace silencio y se rasca su cabeza – este...yo

-¿Qué hiciste Manuel Álvarez? – entrecierro mis ojos en su dirección.

-Solo le he dicho que te puede contratar de forma permanente, lo hablamos con Esperanza y...- maldita sea Lolo a veces suele ser tan misterioso.

-Ya suéltalo que si no me va a dar...- me llevo una de mis manos al pecho de forma dramática – que me da Lolo... que me da.

Ambos carcajeamos mientras hago mi dramática actuación.

-Basta eres una... payasa... eres de lo que no hay – sonríe y niega con la cabeza yo simplemente sigo haciendo mi show – bueno... bueno basta si quieres que te diga deja ya de hacer eso – de sus ojos salen lágrimas de risa pero entonces me pongo seria y le presto toda mi atención - ...okey así está mejor.... el asunto es que les hable de ti y que estas próxima a terminar tus estudios en publicidad y de relacionista pública, les gusto y..

Chillo, chillo, grito salto y pataleo que es esto, ¡por Dios!, Lolo me mira algo confundido y aterrado, pero a él no deben de extrañarle mis arrebatos ya que él ha sido testigo de muchos de estos.

-Espera..- inhalo y exhalo – solo un momento – me pongo de pie y camino en dirección a la pequeña cocina, me dirijo al refrigerador y miro que hay allí, para calmar esto ¿agua?, no ¿jugo?, por Dios no, observo aun lado del jugo vino un six pack de cerveza así un brindis por Gaby –.... esto es muy fuerte – digo al acercarme con dos cervezas frías Lolo me mira y sonríe.

-Cerveza!!!..- exclama con emoción - que bebedora me salió la niña- carcajea mientras yo lo fulmino con la mirada – okey, okey no me mires así pero de verdad debes estar muy nerviosa por lo que te pueda decir, no eres de tomar licor de ninguna clase.

-Que bien me conoces Lolete – suspiro la ansiedad me carcome, joder que nervios observo aquella lata que permanece entre mis manos – vamos continua que me tienes en ascuas hijo.

-Okey, como te decía se interesaron y te quieren como asistente de Pablo, ahora que comienza con su gira de tanto por algunos países de Latinoamérica y esta...- y allí Lolo descubrió que es hacerse una mascarilla de cerveza – oh, mierda Sammy... mis ojos por Dios, he perdido la visión... ¡joder ayuda!

¡¡¡Dramático!!!

Yo simplemente estoy en shock, asistente de Pablo Alborán, mi corazón salta de felicidad, es un sueño un jodido sueño, yo aquella chica que pasa desapercibida para la mayoría de personas que no hace la diferencia entre nadie, aunque no se parezca o no siga un estilo en particular, aquella a la que su mama culpa y hace sentir culpable de la desgracia que tuvo comienzo hace más de cinco años pero que tuvo su final trágico hace casi dos, un desenlace que marco mi vida y la de mis seres queridos.... Pero la cuestión está en la noticia que me está dando Lolo joder... yo asistente de Pablo Alborán aparte que me encanta su música porque me llega al corazón es un artista con gran proyección y esto sería un gran paso para mi carrera, joder que felicidad!!!

Wow lo escucho, lo veo y no lo creo, estoy en una jodida cámara escondida o que mierdas pasa aquí.

-No me digas que tú eres una de esas chicas que están enganchadas con Pablo – Lolo rueda los ojos- porque..

-¡Cállate!, Lolo es solo que esto... mierda esto es fabuloso, joder... puedes creer que esto es una oportunidad, mi oportunidad – Lolo sonríe – no me estas jodiendo ¿verdad? – camino de un lado a otro por la pequeña estancia.