«Qué aunque sea difícil olvidarte, porque creó que nunca te podré tener»
(POV — Pablo)
-Buenos días – la chica de recepción me mira sin dar crédito a lo que ve.
-Buenos... días... Pablo... oh Dios mío – la veo darse aire con la mano, me causa gracia la reacción de la chica, se tira a mis brazos y yo recibo ese cariño con mucho gusto - perdón señor Moreno – trata de recomponerse después de su ataque de ansiedad.
-No se preocupe Pablo está bien – ella sonríe mostrando todos sus dientes – ¿podría hablar con el gerente de este hotel?
-Oh, disculpe si algo le ha molestado – dice un poco asustada.
-No, no es nada de eso es solo para pedir un cambio – ella suspira aliviada mientras observa algo en su computador.
-¿Desea cambiar de habitación? – no, es algo mejor pero obvio no puedo decirlo.
-Algo parecido por ese motivo debo hablar con el gerente – ella asiente y llama por su teléfono, espero que me ayuden porque desde hoy empezara mi plan.
-Pablo, el señor Gonzales lo atenderá en la gerencia – veo que le hace un gesto a una chica la cual toma su lugar – sígame lo guiare.
Y así lo hago la sigo, en completo silencio mientras mi cabeza empieza a maquinar un sinfín de cosas para llevar acabo mi plan... respiro ansioso espero que esto dé como resultado el que Sammy me haga caso, porque es tan diferente a las demás chicas, es hermosa aunque ella perece no verlo, cuando estoy junto a ella soy yo sin filtros es como un espejo donde no quedo más que yo, mi verdadero yo... puede sonar loco todo esto porque llevamos muy poco de conocernos pero a quien le importa el tiempo... pues siendo sincero a mí me valen tres mierdas como dice Sammy, en mi caso lo único importante es ella, mi tormento, desde que salimos de ese aeropuerto en Madrid mi mente me ha recriminando una cosa, ¿estuve celoso de Alex?, y la respuesta es sí, si y si porque él tenía la posibilidad de estrecharla en sus brazos, de aspirar su aroma y yo solo podía conformarme con mirarla de lejos y aunque no lo reconociera anhelaba eso que tenían o tienen, pero ahora en mi caso el problema no es el tiempo, el problema es si ella siente lo mismo o por lo menos si me daría una oportunidad de conocernos un poco más, mi miedo que todo se valla a la mierda y ni su amistad pueda tener, después de cinco minutos nos encontramos frente a una puerta color gris y con una placa distintiva con la palabra gerente, la puerta se abre dando me paso a un pequeño pero acogedor despacho, él gerente un hombre no mayor de 50 años sonríe de forma amable en mi dirección.
-Gracias, Clara puedes retirarte – veo a la chica marcharse – Señor Moreno tome asiento.
-Gracias señor Gonzales y llámeme Pablo – tomo asiento frente a su escritorio.
-Bien, Pablo usted dirá en que le podemos ayudarle – aquí vamos.
<***>
Empiezo a entonar algunas notas en mi guitarra para calmar mis nervios, he esperado alrededor de veinte minutos y aun no hay señales de vida, paciencia me digo a mí mismo.
-Pablo – y aquí vamos, escucho como golpea la puerta yo sonrió por lo ridículo y tonto que me siento en este momento, al abrir la puerta la veo sonriendo mientras a cómoda su cabello que ahora luce un poco ondulado por la humedad del lugar, se ve realmente hermosa – no podré ir contigo al centro de la ciudad.
La miro extrañado - ¿y eso porque? – ella pasa sus manos por su cabello, como quisiera hacerlo yo.
-Me han invitado a cenar en la playa, y quiero hacerlo hace ya bastante tiempo no hago algo así – mi cara debe mostrar decepción – pero... si no es problema después de la cena vendré por ti y salimos un rato – asiento no muy convencido – ¿estás bien con ello?
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Un solo latir.
FanfictionÉl busca un amor se aferra a aquella "Anonima S.G" quien se muestra como la persona que ha estado esperando todo este tiempo, pero al intentar conocerla alguien se hace pasar por esa chica. Ella la chica Anonima quien solo deseaba conocer a el chico...