Un solo latir.

Capítulo 14 |Dolor

Dedicado a: maferalboranista

«No existe amor perfecto, empiezo a pensar que esto del amor es una fantasía aun no me lo creo... »

(POV — Sammy) Miami

-¿Sabes que le pasa a Pablo? – La pregunta de Adrián me hacen girar en dirección a él – cuando llegamos todo iba bien... pero desde hace dos días simplemente... parece que está en otro lado – asiento sin decir nada, porque no sabría que decir cuando todo está demasiado confuso para mí.

-Solo sé que recibió una llamada desde Madrid y desde entonces esta así – dice Esperanza realmente su actitud es bastante extraña, él nunca se aleja de esa manera.

-Tal vez es por mí – los tres pares de ojos se posan en mí.

-¿Por qué?, ¿ha pasado algo entre ustedes dos? – niego enérgicamente.

-No, no, no es eso – tomo aire – la llamada tiene que ver con Rebecca.

-Lo sabía – masculla Esperanza entre dientes – esa mujer es una desgraciada, lo siento por ti Sammy ya que es tú familia pero es una zorra – no me pronuncio frente a lo que acaba de decirme, ya que desde siempre he sabido que ella está lejos de considerarme parte de su familia.

Decido emprender el camino para embarcar, no quiero quedarme en esta sala y ver como él evita mi cercanía, ¿Cómo puedo ser tan tonta?, al tomar mi equipaje veo como me mira de soslayo y la sensación que me produce su mirada no me gusta para nada, es como si me reprochara algo sin siquiera decirme...y se maldita sea, sé que algo está mal entre nosotros.

Me siento en mi lugar esperando y deseando que esto se acabe pronto, la indiferencia de Pablo me lastima, y no quiero que me siga ignorando o solo me dirija la palabra por obligación, ¿Cómo es posible que todo se acabe sin siquiera un porque?, se que solo era su amiga y aunque mi corazón quiere algo mas que solo su amistad, siento que ya ni eso nos une... observo por la pequeña ventada y dejo que mi mente me transporte a lugares insospechados, cómo quisiera vivir en mi imaginación, allí todo es tan cálido, fresco, limpio y armónico que la realidad resulta ser... tan vacía y tonta.

-Oh, tú – al escuchar su voz giro mi cabeza en su dirección – buscare otro lugar.

Eso de verdad dolió ¡joder! Intento no darle importancia al hecho que le moleste mi presencia, lo veo irse en dirección a Lolo quien intercambia palabras con él, veo como Lolo se levanta de su silla y Pablo toma su lugar en ella...¡Joder duele, duele maldita sea!, Lolo se dirige dónde estoy yo, no creo poder aguantar mucho esta situación... soy fuerte, soy fuerte repito en mi mente, me hago bolita en mi sitio y siento como mis ojos pican...¡Dios esto no puede estar pasando!

-¿Sammy? – Lolo acaricia mi cabello, lo miro por encima de mi hombro - ¿estás bien? – afirmo con mi cabeza, pues sé que no puedo hablar el nudo en mi garganta es demasiado denso, cierro los ojos con fuerza queriendo que este sentimiento de desasosiego se valla de una vez, pero es inútil, como inútil es no pensar y recrear las veces que me ha evitado durante los últimos dos días, y no sé qué hice mal, porque motivo esta así conmigo.

Los recuerdos invaden mi mente, la playa en Puerto rico, las salidas nocturnas en México, de hecho solo fue una salida nocturna luego todo se fue a la mierda... quiero llorar y encerrarme por un mes quizás, miro a Lolo y está dormido, lo busco a él y cuando nuestros ojos hacen contacto desvía la mirada... ¡Dios!, sé que no podre aguantar esto mucho tiempo más, cierro mis ojos con fuerza... ¿Cómo enfrentar de nuevo la desilusión?

Esta vez el viaje en avión se me hizo eterno y no por el hecho de sentir turbulencias, o esa cosas que pasan en el jodido aire ya que mi mente estaba en una maldita batalla, queriendo recordar ¿qué fue lo que paso?, ¿Qué hice mal?, pero simplemente no halle nada... absolutamente nada.