¿Amarte? Ni de broma -En edición-

Capitulo 8

Estoy cansada,¿ donde se metieron los chicos?, prácticamente ya buscamos por todo el parque y ni pío de ellos.

-no contestan, que raro-

-tal vez están en un juego-

-cierto, los llamare después-

-bien-

-¿y que vas a hacer en tu fin de semana?-

-no lo se,¿y tu?-

-creo que voy a salir al cine con mi hermana-

-¿Cómo lo sabes si apenas es lunes?-

-a mi hermana le gusta planear todo para que nada termine encimado-

-oh ya-

-cuéntame algo sobre ti-

-¿Cómo que?-

-no lo se, lo que tu me quieras contar- dice encogiéndose de hombros y con una sonrisa

-bueno pues me podría casar con un helado-

-eso ya lo se-

-bueno, como no se que contarte te diré lo único que se me ocurre, cuando las gemelas nacieron, yo les decía las pulgas, ¿Por qué?quien sabe, solo sé que saltaban mucho, tal ves sea por eso, y a la fecha les sigo diciendo así. Pero ni se te ocurra decirles que estoy muerta-

-tu secreto esta a salvo conmigo-

-gracias, cuéntame lago, casi no se nada de ti, solo haces que hable de mi y ni contestaste hace rato lo qué haces para no aburrirte-

-bueno. Pues hago dibujos de cosas que me gustaría hacer o construir y pues que te digo, mi hermana trato varias veces de que me lastimara porque no quería a ningún hermano pero después se le paso y ahora siempre que esta libre trata de pasar algún tiempo conmigo. Vamos a este juego, a menos que te marees-

-solo en las montañas rusas-

-ajá, ver para creer amiga-

-ya veras amigo-

Nos subimos al juego, este, trataba de girar mientras subía y bajaba, tomamos asiento juntos y poco después el juego comenzó.

Me reí mucho, me encantan estos juegos. El juego termino y voltee a ver a Erick.

-¿Quién dices que se marearía?- digo de manera burlona

-ya, ya, ya, vamos a las sillas voladoras-

-¿Qué?-

-a las sillas voladoras, ¿te lo explico con manzanas?-

-no, no crees que debes llamar a los chicos o buscarlos- digo tratando de evitar subir a esas cosas

-tranquila, les llamaré después de subir, ¿vienes?-

-em....-

-si no, tendrás que subir tu sola-

-de acuerdo, pero si me pasa algo te matare-

-calma, no pasara nada-

-confió en ti-

-haces bien, vamos-

Hicimos un poco de fila pero al llegar a las sillas, comencé a sentirme nerviosa, así que me senté y me puse el cinturón, Erick hizo lo mismo, cuando el juego estaba a punto de comenzar unos chicos pasaron a asegurarse de que todos estuvieran con su cinturón de la manera correcta así que me relaje un poco.

Poco después, las sillas comienzan a elevarse y yo comencé a temblar.

-no pasa nada, cierra los ojos y cuando yo te diga los abres, ¿de acuerdo?- sentí su mano en mi brazo y eso me tranquilizo un poco.