El cuento del destino

¿Y el secreto?

Helena reconoce de lejos a la figura que les saludaba.
-¡Ay no!- ella esconde la cara en el pecho de Ernandez.
-¿Qué pasa?
Ernandez la mira sin entender.
-Es Tonks, y nos vio...- dijo Helena mientras Tonks que se acercaba a la pareja saludaba frenéticamente.
-¿Tonks?- exclama Ernandez volteando.
-Ernan....¿HELENA?- él habla impresionado al notar que la mujer que abrazaba a su amigo era nada más que Helena.
-¿Que haces aquí?- ella pregunta avergonzada.
-El mismo que ustedes dos, celebrando la vida...-ríe Tonks- Yo vi...
-¿Que viste?- Helena camina apresurada a la mesa.
-Los dos juntos...¡Que Feo!
Tonks da un paso adelante de ellos y voltea señalando.
-¿Qué feo qué? Nosotros estábamos bailando...que hay de feo en eso...
-¡Nada! Pero feo es que no cuenten a sus mejores amigos que son novios.
-No es eso Tonks...
Ernesto lo invita a sentarse.
-No es necesario que me expliques, es una broma, la verdad es que me tomo por sorpreso... nunca pensé...pero estoy feliz por ustedes dos.
-¿Carmela está aquí?- Helena pregunta preocupada mirando por arriba de las cabezas a su frente.
-¡No está! No quiso venir...
-Oye hermano, mejor no lo digas a nadie, es que yo y Helena no...
Tonks lo interrumpe y lo tranquiliza.
-Está todo bien hermano...olviden que estoy aquí y sigan con su baile...¿Ya dije que forman una bonita pareja?
Helena y Ernesto sonríen y se abrazan.
Tonks se aleja de los dos y saluda con la copa de vino.
-¡Viva el amor hermano!

Los dos siguen bailando entre besos y abrazos.
Ya era exactamente media noche cuando todos ya cansados se sentaban a sus mesas para la buena platica nocturna, otros para una buena borrachera.
-¡Ya es tarde! Mejor nos vamos...-dijo Helena mirando al teléfono.
-¿Vente conmigo...?
-¡No puedo! Además es muy temprano para invitarme a estos tipos de planes ¿no crees?
Helena recoge su teléfono.
-Antes temprano qué. ..
-Oh Dios mio ¿ya viste las horas? Necesito regresar a la casa, mañana tenemos que estar temprano en la oficina...
-¿Ya tienes que regresar Cenicienta?
-Ya mi amor...- dijo Helena abrazada a la cintura de Ernandez.
-Me encanta que me llames amor, el vino y sus poderes.
Los dos ríen y Helena lanza los brazos al cuello de Ernandez y lo besa con pasión.
Del baile sólo se escuchaba el sonido lejos, el coche desaparecía por entre la oscuridad de la carretera vacía.
No había nadie que los pudiera interrumpir pero solamente dos manos estaban juntas; ya estaban frente a la casa de Helena, ella no había logrado convencerlo de que la dejará recoger a su coche en el estacionamiento del periódico.
La excusa fue el vino...
-¡Gracias por traerme!- dijo Helena preparándose para salir en camino de su departamento.
-No merezco mi un besito más?
Ella regresa y lo besa con fuerza voltea y se marcha rápidamente.
-No debería haber tomado tanto...estoy como una chica desvergonzada.
Helena ríe mientras la puerta de ascensor se abre a su frente.
Creo que debería contarlo todo a Carmela, al final es mi amiga y ya antes que sepa por Tonks. Los pensamientos gritaban por su cabeza, el día había sido demasiado largo, había pasado mucha cosa.
"Le dije mi amor..."
-¡Buenas noches Helena!- Carmela interrumpe abriendo la puerta- Últimamente siempre tengo que encontrarte acá buscando sus llaves...
-Yo creo que olvidé en mi coche...en la oficina.- Helena contesta sin darle atención al reclamo de la amiga
-¡Lo sé!- dijo Carmela con una voz nada agradable.
-¿Lo sabes?
Helena la mira con suavidad mientras trata de ocultar el nerviosismo que sentía. Carmela ni siquiera había reído de verla otra vez de rodillas frente al departamento.

Fin del capítulo.