Zorras Malditas I & II

Capítulo XIII

~Adela POV~

Una sencilla mañana del lunes de la tercera semana de septiembre, el cielo estaba nublado y hace frío.

Me senté en una banca de una especie de parque que hay cerca de la escuela son las 7:30 AM así que esta muy temprano.

Saque un cigarrillo y lo encendí inhale sintiendo la nicotina llenar mis pulmones y exhale dejando escapar todo el humo contenido dentro de mi delgado cuerpo.

Saque los audífonos de mi mochila los conecte a mi teléfono y seleccione algo al azar. Eminem invadió mis oídos con kill you me abrazé a mis piernas e inhale del cigarrillo logrando calentarme.

Austin se sentó junto a mí bebiendo café alzó las cejas al ver que era yo y me dio su sexy sonrisa, yo conserve mi rostro totalmente serio y baje la cabeza.

Poso su vista al frente permitiéndome verlo de perfil; sus cejas delineadas, su nariz fina, sus carnosos labios....

Note que de reojo me estaba mirando y enseguida baje mi cabeza y empezé a buscar en mi lista de reproducción algo para escuchar pulse Firestone.

Él tomo mi auricular izquierdo y lo puso en su oreja derecha, suspire pesadamente. Apreté mis puños irritandome.

Lo miré, lucía relajado tomando su café, me devolvió la mirada con humor en su rostro, lo fulminé con la mirada y Apreté mis labios.

Tomé mi mochila y detuve la musica me levante y comenze a caminar pero una tibia mano tomo mi muñeca tensándome.

Miré su mano para luego mirarlo a él como si mi vista fuera láser.

—Suéltame —le gruñí entre dientes controlando mi rabia  —okay. Perdón —levantó sus manos en señal de inocencia —solo quería decir que el director nos levantó el castigo. Pero todo por nuestra presentación de invierno —añadió.

Una gota cayó en mi brazo seguida de otras mas —mierda —murmuro y comenzé a correr, él venía corriendo también.

Me metí a la calle y una bocina me desconcertó un camión venía hacia mí, no dejaba de sonar la bocina y no bajaba la velocidad yo simplemente no podía moverme.

Un tirón me sacó del medio y choque frente a frente con Austin, clavo esos penetrantes ojos marrones en mi. Bueno no chocamos frente a frente por la gran diferencia de tamaño.

Tardía mis piernas reaccionaron dándole unas ultimas miradas alejándome de él —¡de nada! —me gritó pero no mire hacia atras solo camine a la escuela.

—¡Adela! —mire al frente y vi a Kate junto a Thaly con sus impecables sonrisas y vestidos cortos, me acerque a ellas a ver que querían —¿como estas? Querida —me dijo Thaly, sus ojos grises lucían más oscuros.

—De las mil maravillas no ves que irradio felicidad —espeté con sarcasmo, le hablé de mala manera. Thaly parpadeo y puso una mano en su pecho, Kate intercedió.

—Niña, debes respirar y liberar toda esa tensión —dijo tomándome  por los hombros e inhalando y exhalando, yo fruncí el ceño y Thaly se unió a su terapia de relajamiento.

—Ya... Basta. Estoy bien —les dije deteniendo todo su drama —estas muy mojada querida. Toma —Thaly me pasa un pañuelo, lo tomo y la miro. ¿En serio?

—Thaly, ¿que pasará con el análisis? —le pregunté al recordar que ninguna de las dos lo hizo, —ah, no te preocupes Brandon lo hizo —me dijo sonriendo, acariciando su cabello.

Suspire sin rastro de alivio en mi cara solo estoy seria con los labios rectos —bien.

Camine al aula de matemáticas hacia mi asiento, sola, al fondo y aislada donde nadie pueda exasperarme. Me acomode y seque mi cara y brazos con el pañuelo de Thaly, olía a perfume caro y lavanda.

—¿Puedo sentarme? —levante mi vista para ver a una chica de pelo corto y un vestido, no como los de Thaly y Kate mas sencillo. Asentí y me dio una sonrisa mostrándome sus frenillos rosa.

—Vi que ya eres amiga de Gina, Thaly y Kate —la mire y fruncí el ceño —te dije que les caíste en gracia —alce mis cejas cuando recordé que esa era la chica que me tope fuera del baño la vez pasada, con tantas cosas que han pasado después de eso mi cabeza ha estado muy ocupada últimamente.

—No son buenas como parecen —me dijo —¿quién eres tú? ¿y que es lo que quieres lograr con esto? —le pregunté para que vaya al punto no estoy de humor esta mañana.

—Soy Suzanne Morris, pero me puedes llamarme Susie —me dijo dándome una mirada cálida con sus ojos azules —y solo quiero hacerte caer en cuenta quienes son verdaderamente esas zorras —añadió.

No entiendo por qué las ataca con sus comentarios, —Gina le quitó el novio a mi hermana, solo porque sí. Porque ella nunca quiso a Kyle solo se interpuso entre él y mi hermana para separarlos.

Me miró, me imagino que para asegurarse de que le estaba poniendo atención, pero solo estoy garabateando mi cuaderno.

—Una vez se comenzaron a rumorar muchas cosas de ellas decían que Thaly tiene una misteriosa adicción pero no se sabe si es drogadicta, que Kate es lesviana pero que es ninfómana por eso se acuesta con los hombres y que Gina se prostituye para mantener a su familia ¿sabias que es latina, verdad? —.

Abrí la boca para responder pero alguien se aclaró la garganta captando nuestra atención.

Ambas levantamos la cabeza y nos encontramos a Gina con una sonrisa falsa, una cola que caía sobre su hombro, una camisilla verde y unos jeans claros y su bolso colgando de su brazo.

Ella y Suzanne se dieron unas miradas y esta última tomó su bolso.

—Hablamos después, Adela —me dio una falsa sonrisa, radiando rabia en sus ojos.

Gina se sentó junto a mi —¿de que hablaban ustedes dos? —me preguntó fingiendo alegría y curiosidad —nada, no le puse atención —le respondí cortante.

—Apuesto que te dijo que le robe el novio a su hermana ¿no? —la mire pero no le dije nada —sea lo que sea que te dijo no le creas, aquí siempre inventan rumores de todo el mundo —me encojí de hombros restandole importancia.

Mi vista divago por todo el salón de clase y mis ojos se toparon con él, estaba sentado solo mirandome mas bien fulminandome ¿que quiere? Una canasta de muffin de agradecimiento, no retire mi vista de él, expulsabamos lava de nuestros ojos, quien se atreviese puede salir quemado.

Emily Harrison apareció a su lado capturando su atención y yo bufé.

Gina me miro y alzo una ceja —¿el te gusta? —me preguntó señalandolo, me irrite de inmediato, en que cabeza cabe que ese idiota puede gustarme.

—No —espeté molesta —y ¿por que se miran tanto? —maldición no me había dado cuenta de que nos mirabamos de nuevo.

—Tuvimos un roce esta mañana —Emily le tomó la cara para que le preste atención. No que no era su novia, ¿y a mi que me importa?

—¿Ah si?

—No voy a hablar de eso —apreté los labios Gina se contuvo una sonrisa y me miró con humor en su rostro.

Al final de la clase Salí a mi casillero, estaba cargando con todo en mi mochila esta mañana, tuve la sensación de que me miraban; gire mi cabeza para encontrarme con esa penetrante mirada otra vez.

Debería de darle las gracias, si no fuera por él estaría en un hospital o peor en la morgue. Dar las gracias solo demostraría que debajo de esta chica dura hay buenos modales. Creo.

Camine cerca de él, y al notar que iba en su dirección me sonrió, a menos de un metro de él Emily se interpuso.

—Austin te estaba buscando —él no le hizo caso y siguió mirandome. Ella giro su cabeza para verme a mi allí parada mirandolos.

Continúe mi camino él abrió la boca pero no dijo nada y la cerró siguió mirándome, suplicándome con los ojos.

————————————————————
Espero que les haya gustado el capítulo. Gracias por su apoyo.
Bitter_Sweet26