"Malditas Drogas"

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HARRY'S POV

Sabía que me encontraba despierto, pero aun así preferí no abrir los ojos y seguir evitando la realidad unos minutos más. Daba por hecho que a esta altura del juego, intentar evitar lo que me dolía era casi imposible, porque no existía espacio a mi alrededor que no me recordara a lo pésimo y fatal que era tener que convivir día a día, no sólo con la fama, si no con un amor desmesurado hacia una persona que lo único que buscaba era auto destruirse. Existían momentos en los que deseaba que Madilyn entendiera lo que sufría por esta situación, pero luego comprendía que de todos modos, de nada serviría que así lo fuera: Ella no podía tener un poco de amor propio ¿Cómo pretendía yo que lo tuviera conmigo y dejara de hundirse sólo por verme feliz? Era tan triste como eso. Llegar al punto final en el que al fin comprendía que nada en Mady estaba relacionado al amor, ni por mi, ni por nadie. Y Jamás hubiera deseado llegar a momento en donde al fin me daba cuenta que estar enamorado de ella no era la mejor opción, por el contrario, era mi gran error, porque haber caído en sus encantos ya no tenía escapatoria, porque tuve que esperar a atar todos mis sentimientos a ella para entender que lo único que estaba logrando era lastimarme a mi mismo. Pero ahora el problema ya no era el haberme enamorado, si no ¿Cómo dejar de amarla?

El ruido de tazas en la cocina puso punto final a mis pensamientos y por inercia abrí los ojos. Ella estaba sentada en una de las bancas del comedor, con una gran taza de café en la mano.  Miré un poco a mi alrededor. Me encontré tumbado en el sillón y rodeado de las consecuencias de una reunión asquerosa: Ropa por doquier, los muebles desacomodados, un horrendo olor a marihuana y los mínimos rastros de cocaína sobre la mesa pequeña. Me senté. Toqué la herida de mi labio que aun dolía. Increíble decir que ese golpe era el sello de un puño de Madilyn sobre mi. Dudé unos segundos en levantarme y acercarme a ella, no sabía bien que era lo que debía hacer en momentos como este o como reaccionar ante su misma reacción. Pero aún así tomé un respiro y caminé hacia su lugar, mientras intentaba acomodar mi cabello. Levantó la vista un poco mientras tomaba un sorbo de su taza de café. La apartó de sus labios.

— ¿Quieres café? — Preguntó con tranquilidad.

No pude evitar reír con ironía.

— ¿Me hablas en serio? — La observé fijamente sin poder creerlo. No dijo palabra alguna. — ¿Piensas actuar como si nada hubiera ocurrido?

— No se de que hablas ¿Quieres café o no? — Retrucó golpeando la taza sobre la mesa.

— Solo quiero que veas mi boca y recuerdes quien me golpeó así.

Me miró por unos segundos. Negó moviendo la cabeza. Volvió a tomar su taza de café y a darle un sorbo.

— Fuiste tú.

— Imposible.

— ¿No lo recuerdas?

— No. No. Y no, Harry. Basta. No lo recuerdo y si fue así, bien, lo siento. ¿Cuanto tiempo más seguirás con esto?

— ¿Seguir con qué? Dime. Te escucho. — Me crucé de brazos esperando escuchar su excusa de turno, que estaba seguro sería lo más absurdo jamás oído.

— Seguir con la historia en donde nunca comprendes que esta es mi vida y no voy a cambiar por ti.

Sentí el frío recorrer mi cuerpo. No era una excusa, era una verdad. Era todo lo que pensaba, resumido en una simple oración que me hería en lo más profundo, por más que lo supiera de ante mano. 

— No quiero que cambies por mi, Madilyn. Quiero que cambies por ti. No puedes actuar como si tu propia vida no te importara...

— ¡Deja de hablar de mi vida como si en verdad supieras lo que es! — Me interrumpió gritando — ¡Tu no sabes lo que es vivir cargando tanto pasado que no deja de perturbarme ni por un maldito segundo! ¡No sabes lo que es ser un bastardo, no sabes lo que es ver morir a tu madre, no sabes lo que es ver a tu padre llegando ebrio a casa, no sabes lo que es sentir el miedo de ser golpeada, no sabes lo que es ser anoréxica, no sabes lo que es sentir lo que yo siento! ¡Tengo muchos problemas Harry, y si no los entiendes, y si no piensas aceptarme con ellos, entonces deja de actuar como si lo supieras todo! 

Make No Mistake • H.S {Libro 1}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora