Make No Mistake • H.S {Libro 1}

"Juntos" (Último Capítulo + Epílogo)

— ¿Recuerdas cuándo fue la última vez que nos besamos? — Preguntó con picardía.

— Déjame pensar. — Hice una pequeña pausa. — ¿Dos minutos?

Y ambos reímos hasta sentir que nuestros labios otra vez estaban en contacto, hasta que nos unimos en un beso que hubiera deseado fuera eterno, sin embargo al abrir los ojos, me encontré sentado en la parte trasera del auto, junto a Niall y Zayn. Besar a Madilyn fue otro recuerdo, de esos que aparecían como flashes cada vez que pestañaba y desaparecían cuando volvía a ver la realidad: Madilyn ya no estaba ni aquí, ni en mis sueños. Ella estaba en ese frío y enorme cajón que hace sólo unas horas completó el final de su recorrido en el cementerio. Esa era mi cruda realidad, aunque todavía intentaba descubrir que dolía más, si cerrar los ojos para recordarla o abrir los ojos para darme cuenta que no estaba a mi lado. Todo era un sin fin de preguntas sin respuestas en mi mente, que no podía canalizar a causa del dolor.

— Harry. — Zayn tocó mi hombro. — Ya llegamos a tu casa.

Bajé del auto y caminé en silencio con las manos en los bolsillos. Mis pasos pesaban, levantar un pie y mover el otro era como intentar alzar bolsas de cemento con un dedo. Respirar era incluso aún más difícil que moverme, ese enorme vacío en el pecho no tenía límites, era cada vez más y más profundo. Escuché las voces de Liam y Louis junto con las de Zayn y Niall, eran murmuros indescifrables para mi en esos momentos, asi que sólo seguí caminando como el cuerpo me lo permitía, hasta llegar a la casa y sentarme en el sillón. Ellos entraron tras de mi y el silencio los acompañó durante unos minutos en donde no supe cuales fueron sus movimientos, ya que mis ojos se fijaron al suelo y en las imperceptibles sombras de sus cuerpos recorriendo la sala. 

— ¿Qué te parece si vemos alguna película? — Preguntó Liam tomando asiento a mi lado.

— Si quieren puedo cocinar unas palomitas. — Escuché la voz de Niall desde la cocina.

Negué moviendo la cabeza. No necesitaba que nadie me cuente más historias por un largo tiempo, al menos hasta poder asimilar la mía. 

— Bien. Entonces vídeo juegos. — Louis se sentó a mi derecha. — FIFA ¿Qué piensas de eso Harry? Puedes ganarme en el primer partido.

Volví a negar en un gesto. 

— ¿Tienes frío? Puedo traer una manta.

— No Liam.

— Algo de tomar. Eso necesitas. — Niall se asomó por detrás — Un chocolate caliente. Puedo prepararlo.

— No. Gracias.

— La repetición del partido del Manchester United vs. Chelsea. Podemos verla si quieres.

— Otro día Louis.

— Entonces puedes dormir un rato aquí y nosotros nos quedaremos hasta que despiertes y ...

— Liam. — Lo interrumpí — Necesito estar sólo.

— ¡Jamás! ¡Jamás te dejaremos solo! — Gritó, mientras Niall y Louis no dejaban de enumerar las razones por las cuales se quedarían conmigo haciéndome companía, porque según ellos, eso era lo que necesitaba. Pero no. Sus palabras comenzaron a ahogarme, a presionarme, a asustarme.

— ¡Basta! — Grité interrumpiendo su interminable parloteo. — ¡Déjenme solo! ¡Necesito estar solo! ¡Déjenme! — Concluí y cubrí mi rostro con las manos. 

No buscaba ser descortés, pero realmente necesitaba ese tiempo, esa soledad que no me estaban dando. 

— Chicos — Escuché la voz de zayn pero aún así seguí cubriendo mi rostro — Harry tiene que descansar. Él sabe que nosotros estaremos para él siempre, no hace falta ahogarlo ahora con afecto. Vamos.