Mia Jenner II ➸ J.b

«04»

El momento se torno tenso cuando no supe qué responder, sencillamente volví a mi móvil y me hundí en el. No se que hacer o que responder, aun tiene esa habilidad sobre mi la cual me deja sin habla cada vez que el dice algo en mi contra, o a favor.

—Justin, amor. Ya lo encontré. —aquella voz tan fina y femenina, parecida a la de una pequeña niña llamó mi atención.

—Estaba sobre la barra de bebidas, ya podemos irnos.

¿Ya se va? No debería sentirme así de desilusionada.

Pero esa voz pertenece a alguien y ese alguien es nada más y nada menos que la hermosa y tierna Ariana Grande. Gire la vista hacia Justin, las pocas luces iluminan su rostro, aquel tiene su mano en su hombro y se nota un tanto nervioso, los cuatro años de mejores amigos y los tres meses de novios que estuvimos juntos me enseñó muchas cosas de aquel chico, entre ellas a darme cuenta cuando está molesto, nervioso, fingiendo una sonrisa o evitando un momento incomodo, como lo está haciendo ahora.

Pero a pesar de saber todas esas cosas, no pude saber cuando está fingiendo una relación o mintiendo y ese fue mi gran error.

—Babe, ahora no podemos irnos..

Mi corazón dio un vuelco para luego latir tan rápido como un atleta luego de correr un maratón. Joder que mierdas te sucede

—Tengo una presentación en pocos minutos, no le puedo quedar mal a Draking.

Pobre ilusa, pensabas que se quedaba por ti. Ya superalo, habíamos quedado que él es el pasado y nosotras vivimos el futuro, no miramos hacia atrás y que nuestro orgullo está por delante de cualquier cosa en este mundo.

Y que el es cualquier cosa ahora.

La chica delante de mí frunció su ceño y se cruzó de brazos, su estatura no la ayuda del todo. —Entonces, Drake es más importante que yo... ¿Verdad?

Es que joder, mide como cincuenta centímetros y se cree maldad pura. Escuche a Justin bufar, esto ya se tornaba incómodo.

La ex en una discusión de la pareja actual es algo muy incómodo y gracioso a la vez, pero creo que no es el momento de reír.

Mia no lo hagas, Mia no te rías... Tarde.

Joder estalle en una carcajada, ni siquiera cubrí mis labios para evitar reír más fuerte, no hice nada para detener mi risa cuando noté sus miradas sobre mi.

La chica soltó un sonido extraño el cual no pude identificar. —¿Qué mierda es tan gracioso?

Pare mi risa, voltee a mirar a la chica quien me lanzaba una mirada asesina, como si con eso lograra acabar conmigo.

—Oh perdón, te he ofendido. ¿Que ahora está prohibido reír de algo que ves en tu teléfono?

—¡Ay por Dios, llévenme a la cárcel! —agregué antes de volver a reír aun mas fuerte.

Siempre, siempre tengo que terminar topándome con una de las zorras de Justin, nunca puedo llevarme bien con ellas y no se porque, Joder, soy una buena chica.

—Lo que sea —tomó la mano de Justin y ambos caminaron hacia no se donde.

Justin volteo a verme y aun no logro entender si fue una alucinación o los efectos del alcohol ya jugaban en mi cuerpo, pero aquel me guiñó el ojo.

Sacudí mi cabeza cuando este desapareció por el pabellón, solo fue un efecto de mi cabeza. No es que el no es capaz de hacerlo, sencillamente creo que estoy jugando con mi cabeza y no tengo porque ahogarme en un vaso con agua. Si lo hizo bien, y si no también.