Mia Jenner II ➸ J.b

«73.

(•) Atlanta, Georgia.
(•) 10:24 am.

—Mia.

Escuché una voz entre mis sueños pero la verdad es que no quiero despertar.

—Mia...

—¡Shawty! —agregó ahora con más potencia, bufé.

—Ahora que... —bufé mientras abro mis ojos. —quiero dormir, por favor.

El chico sonrió levemente. —Mi amor, tienes que levantarte tenemos que irnos a California.

Solté un pequeño chillido e hice una mueca. Mi cabeza empezó a palpitar como si fuese un volcán apunto de explotar y sobre eso tengo que tomar un vuelo hacia California.

—Ay Drew. —suspiré mientras me incorporaba en la cama.

—Ay nada Kristel, levántate antes de que Kris Jenner termine asesinándome.

Me cruce de brazos. —No quiero.

—Vamos. —Justin tiró de mi mano con fuerza.

Su objetivo fue ponerme de pie, pero lo único que logró es que mi cuerpo cayera sobre él.

Una gran sonrisa se dibujó en el rostro del chico, tomó mi cuello para acercarnos más y unió nuestros labios en un beso.

Sus manos acariciaron mi cintura mientras yo me divierto con su cabello.

Siento que estar con el es algo único, algo que no puedo sentir cuando estoy con nadie mas. Me siento como en casa, todo desaparece y solo importamos el y yo, aquí y ahora disfrutándolo. Pero por alguna extraña razón siempre regreso a la realidad y terminó entonces despertando de este hermoso sueño.

—Mia, Mia... —Justin rompió el beso cuando este se tornó un tanto apresurado.

Fruncí mi ceño. —¿Ahora que?

—Tu mamá ha estado llamando pero ni siquiera contestas, no se si tienes tu teléfono pero Kendall me llamó para decirme que tienes que estar lista en dos horas y eso fue hace una hora.

Estallé en una pequeña carcajada logrando incorporarme a su lado.

—Bien. —suspiré arreglando mi cabello. —¿Vendrás conmigo?

Pasó sus manos por su cabeza con una pequeña mueca.

—Lo siento amor, pero tengo que quedarme a hacer unas cosas.

Sonreí mientras negaba. —Le diré a Ky que venga por mi.

—Bueno el problema es que Kylie se fue esta mañana con Travis.

Fruncí mi ceño. —¿Con Travis? —¿Hace cuanto que andan juntos?

Justin se encogió de hombros. —No lo se, supongo que son amigos.

Negué burlona mientras me coloco de pie. —Amigos tu y yo, y ya sabes como terminamos.

El rubio sonrió amplio, como si aquello fuese un premio.

—Por cierto, ¿No te molesta que lo haga sin..

Me encogí de hombros. —Tienes poco semen, además que creo que soy estéril.

Aquél ladeo su cabeza. —¿Estéril? —Pero antes que eso, ¿poco semen? ¿Quién te ha metido esas ideas a la cabeza?

Lo miré burlona. —Relájate solo es un chiste. Me tomaré las pastillas cuando llegue a California, no es nada que no hayamos hecho antes.