20: El Amor Florece

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**Y por fin había llegado ese beso tan esperado , tal vez el que no debía ser, pero que ya no se podía postergar más...sus corazones lo pedían, sus ojos se buscaban y sus labios se llamaban, era un momento de los dos, equivocados o no, así lo decidieron y ambos los estaban disfrutando, era un beso interminable, una combinación perfecta de dulzura, ternura, timidez, amor, deseo y pasión...ninguno quería ceder....hasta que poco a poco se fueron deteniendo para tomar aire, sus corazones latían a mil, y sus pulsos se aceleraban a más no poder....se quedaron abrazados, frente a frente, cabeza con cabeza...mirándose, ella avergonzada...él anonadado...**

-¡Camila!      -decía Emiliano en un suspiro sintiendo su respiración agitada....mirándola... -ella trataba de soltarse...

-Perdón Daniel, no debí hacer esto, fue un impulso, una locura     -decía la chica apenada    -él la apretaba con más fuerza poniendo su frente a la de ella...

-Shhhh    -cerraban los ojos      -pues sigue cometiendo impulsos y locuras así conmigo... -decía el chico y ambos se rieron    -Camila lo miró...

-Estás loco    -dijo burlándose      -él la miraba con ternura...

-Totalmente...estoy loco por vos desde el primer día en que te vi    -dijo suspirando y ella se estremecía....-y con esto me demostraste que vos también sentís lo mismo por mí.... –dijo mirándola fijamente      -ella tragó grueso....

-No te lo puedo negar Daniel    –él sonrió     -pero te juro que me estoy muriendo de miedo     -dijo sollozando....

-No bonita    -él la abrazaba con fuerza, no tengas miedo...esto es algo hermoso      -decía el chico acariciándole la cara....

-Yo juré que jamás volvería a confiar en nadie, y viviría solo para mi hija, pero llegaste vos y me hiciste mandar todo al diablo     -decía ella con risa nerviosa    -él la miraba conmovido...

-Y vos me cambiaste la vida cuando me miraste    –ella bajaba la cabeza de los nervios y la vergüenza    -él le levantó la barbilla... -mírame...-ella lo miraba      -más allá de las formas, de los nombres, de los estatus social, y todo lo que existe    -Camila se extrañaba al oírlo mencionar eso, no entendía mucho       -quiero que sepas que nunca antes había sentido lo que siento por vos, me encantas, y te puedo jurar que me estoy enamorando profundamente de vos, no me importa el tiempo, porque vos te metiste aquí -tomó su mano y la puso en su pecho      -en mi corazón desde la primera vez que te ví....y no puedo imaginarme la vida sin vos, y sin Renata...las quiero conmigo siempre      -Emiliano desnudaba su alma.... ¿Me crees?    -decía preocupado –Camila asintió, se emocionó y lo abrazó....

-Si te creo, en tu mirada puedo reconocer lo que me dices, y lo puedo sentir aquí    -tomaba la mano de él y la ponía en su pecho      -porque me pasa exactamente lo mismo....yo también me estoy enamorando de vos, y te quiero tener a mi lado siempre      -Camila sollozaba      -Emiliano se emocionaba también.... –pero no puedo dejar mi miedo así de pronto, por favor vamos paso a paso, despacio, sin prisa...conociéndonos más... -él asentía sonriendo...

-No te preocupes Cami, que vamos a ir a tu tiempo, a tu espacio, como vos querrás    -la acariciaba mientras ella cerraba sus ojos estremeciéndose con sus caricias      -y si alguna vez sientes dudas, solo mírame a los ojos, y ve cuanto te quiero... -decía el chico con dulzura      -ella sonreía, asentía mientras lo acariciaba también....

Gracias    -dijo Camila totalmente conmovida....y ambos juntaron sus cabezas de nuevo, abrazados con los ojos cerrados, respirándose.... –creo que ya debería irme a dormir, porque sino mañana no me voy a poder levantar y es pesadito... -él asentía haciendo pucheros...

Como Odio AmarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora