Mi Ginecólogo «Hot»

Capítulo 116

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Sin previó avisó, entro de golpe en mi. Grité y estoy segura de que Justin lo hizo de igual forma pero no podía oírlo. Lo único que podía oír era la sensual música que emanaba de los audífonos y mi agitada respiración. También podía sentir esas dos bolas que estaban en mi ano moviéndose cuando Justin me penetraba.

Las caderas de Justin empezaron a moverse, penetrando me con dureza. Yo por mi parte movía mis caderas para ayudar a Justin a que tuviera mejor acceso. Sus movientos se hicieron cada vez mas rápidos, me sentía en el paraíso.

De vez en cuando metía todo su miembro de una sola embestida, otras veces se metía hasta la mitad. Mis manos estaban siempre estaban en las sabanas, apretándolas, cada vez que se movía con mas intensidad.

Mi cuerpo estaba mas que excitado. Estaba segura de que me correría de lo lindo que se estaba moviendo esta noche. Solo faltaba poco para que eso ocurriera y al parecer Justin estaba igual que yo, apunto de venirse. Por que, no se de donde saco fuerzas, sus movimientos se hicieron aun mas rápidos y mientras que me embestía con fuerza, sus manos al fin se quitaron de mis caderas para pasarse a mis pechos, que ya los tenia abandonados.

Los estrujaba y pellizcaba mis pezones. Solo eso vasto para que me corriera por fin. Grite fuerte, pero no supe que tan fuerte lo hice por que aun traía los audífonos. Justin todavía siguió moviéndose por unos segundos mas hasta que se corrió y volví a sentir esa hermosa sensación de sentirme llena de él.

Mis manos me dolían, jamás las despegue de la cama. Algunas gotas de agua cayeron a mi abdomen, deduje que era el sudor de Justin. Me quitó los audífonos y ahora si ya podía escuchar el sonido de nuestras respiraciones demasiado agitadas. Esta vez si me había follado muy duro y me encanto.

Justin por fin me dijo que ya podía quitar las manos de la cama. Lo primero que hice fue dirigir mis manos hacia su bien formado abdomen y a partir de ahí las deslice hasta que llegaron a su nuca y a su pelo, que estaba húmedo por el sudor. De inmediato lo atraje hacia mi para poder besarlo con mucha intensidad y amor. Sobretodo amor.

Después de que nos separamos de una pequeña ronda de besos, me volteo para quedar boca abajo. Volvió a levantar mi culo al aire, lentamente empezó a sacar las bolas una por una. Suspire de alivio cuando las bolas estuvieron fuera de mi.

Pero sentí como me volvía a aplicar lubricante. Esto se pondría mejor, pensé. Me puse en cuatro esperando a que entrara en mi de un solo golpe como lo hizo hace un rato. Pero no lo hizo, mas bien su pene entro lo mas despacio que pudo.

Hace años que no teníamos sexo anal. Todavía me acordaba cuando fue mi primera vez, cuando Justin llevo a su amigo Niall para hacer un trio.

Su miembro entro y creí que ya era todo, pero no todavía le faltaba un poquito mas para estar completamente dentro de mi. Los dos no nos movimos para nada hasta que me acostumbre de nuevo a su tamaño.

El inicio moviendo sus caderas lentamente de adelante hacia atrás. Había olvidado esa sensación por completo, parecía como si fuera de nuevo virgen. Después de unos minutos sus embestidas se hicieron mas potentes y rápidas. Contaba sus embestidas... una... dos... tres... veinte... mil...

Mis caderas por instinto empezaron a moverse contra Justin. El recargo su pecho, sin dejar de penetrarme, contra mi espalda y podía sentir su sudor juntarse con el mío. Beso mi hombro, deje caer mi cabeza hacia atrás y la moví hacia un lado para poder besarlo.

Su lengua invadió mi cavidad bucal y se peleaba con mi lengua. Era uno de los besos mas excitantes que me gustaban que Justin me diera. De pronto se quito de encima de mi y sus caderas empezaron a moverse en círculos.

Ahora si podía escuchar nuestros gemidos, que no eran para nada silenciosos, pero eso no nos importaba. Solo queríamos seguir follando hasta el cansancio. Una feroz embestida me saco de mis pensamientos y juro que creí por un segundo que me partería en dos en cualquier momento.

-Dime ... _____ a quien le perteneces??- me dijo entre jadeos y gemidos sin dejar de embestir me con fuerza.

-Aaahhh ttiiiiii- le conteste- solooo aaa ttiiii.

Lo único que escuche fue un gruñido de aprobación. En cualquier momento se correría en mi y yo no me quedaba atrás. El me siguió penetrando y varias corrientes eléctricas empezaban a recorrer todo mi cuerpo.

Mordí fuertemente mi labio cuando sentí que se corrió en mi ano y yo me corrí al fin. Nos quedamos unos minutos mas en la misma posición, para recuperar el aliento. Cuando mis pulmones volvieron a tener oxígeno, me deje caer en la cama boca abajo.

Justin también se dejo caer y callo encima de mi pero no me hizo daño. Me quite el antifaz, como pude me voltee para ver a Justin. Quien me miraba con una enorme sonrisa, mostrándome su perfecta dentadura. Le correspondí la sonrisa y me acerque para darle un cálido beso.

-Te amo lo sabes??- me dijo después de romper el beso.

-Si- le di un pico- y yo también te amo como no imaginas.

Me respondió con otro beso pero esta vez era mas apasionado. Los dos nos arropamos y nos abrazamos hasta quedar totalmente pegados bajo las sabanas. Estaba apunto de caer dormida cuando, la puerta de la habitación sonó.

Enojado Justin se separó de mi, se puso los boxers y fue a abrir la puerta. Espere hasta que el regresara y cuando lo hizo venia con una sonrisa estaba apunto de reírse.

-Quien era?

-Era el señor de recepción - se río.

-De que te ríes?

-De que dijo que no deberías hacer mucho escandalo por que los huéspedes se quejaron del ruido - dijo y los dos nos reímos.

Y ahora, los dos ya podíamos dormir tranquilos y juntos.