SUGA DADDY ━ YOONSEOK

13

—hyung... —hoseok comenzó a acariciar el hombro del pelinegro mientras le hablaba suavemente para intentar levantarlo.

porque claro, si despertabas a yoongi bruscamente, él hasta verte en la hoguera no paraba.

—¿mhm? —el pelinegro de movió hasta quedar con la almohada a un costado de él.

—hyung, es hora de despertar...

la voz dulce de hoseok entró a sus oídos, y el perfume a miel que este tenía se comenzó a colar por su nariz, haciéndolo sonreír.
abrió los ojos un poco, encontrándose con el menor.

—hobi... —musitó en forma de saludo.

el contrario le dio una cálida sonrisa, estaba recostado en la cama mirándolo—. mamá ha dicho que dentro de poco estará el almuerzo.

yoongi se removió de su lugar, y ahí fue cuando sintió la sábana dar directamente con su piel, entonces, todo recuerdo de la noche anterior le pegó en la cara como un saco de boxeo.
rápidamente se exaltó quedando sentado en la cama, asustando al menor. lo miró mejor, y notó que este tenía aún sus labios hinchados, y lo peor de todo; una pequeña marca de color morado se asomaba en su cuello.

"cómo cagarla hasta el fondo" por min yoongi, pronto en todas las librerías del país.

—hoseok... nosotros... —murmuró.

—¿no-nosotros... qué?

—mierda —suspiró pesadamente.

se había dejado llevar por culpa de la lujuria y había arruinado todo, realmente lo había hecho.
y no tanto porque hoseok sea menor que él o porque era un chico, sino porque era su mejor amigo. persona a la cuál había estado intentando ver como su hermano menor.
¿qué es peor que follarte a tu mejor amigo? haberle robado su inocencia corporal.
porque claro que sabía que hoseok es —o era— virgen, ya que el menor siempre le contaba todo.

«pero vamos, que eso fue lo que más te gustó...»

no, no y no.
yoongi se sentía, de nuevo, un aprovechador y un débil.
había tenido sexo con su mejor amigo, y a parte, le había robado su primera vez.
era un completo idiota.
débil por no haber resistido y pensar con la cabeza de abajo y no la de arriba, por haberse comportado como un mocoso hormonado cuando tendría que haber aguantado.

—¿por qué te pones así, yoongi hyung? —preguntó el pelirrubio mientras se sentaba lentamente en la cama.

—lo arruiné, hoseok —dijo mientras cubría un poco su abdomen con la sábana.

—¿arruinar? —inquirió con el ceño fruncido—. ¿por qué?

—¿acaso no te das cuenta?

—y-yo... no sé cuál sea tu punto de vista, pero la pasé muy lindo contigo... realmente me hiciste sentir bien... —sus mejillas se tiñeron de rojo debido al creciente sonrojo—. es algo que, sin duda alguna me gustaría repetir.

—hoseok...

—daddy fue capaz de llevarme al tercer cielo anoche —susurró.

se comenzó a acercar al mayor, hasta el punto que debió usar sus brazos para sostenerse en el colchón, y colisionó los labios contrarios.
yoongi estaba quieto, casi petrificado mientras hoseok movía sus labios de manera lenta, provocando que unos sonidos resuenen ante el choque de los labios. hoseok realmente estaba disfrutando de los dulces labios contrarios, estuvo un par de segundos así. luego se apartó.

—tu ropa está en la silla de allí —señaló—. iré a cambiarme al baño para que vayamos a almorzar.

hoseok se levantó de su cama y tomando una ropa de su ropero, fue caminando hasta el baño.

a decir verdad, el menor estaba poniendo todo su esfuerzo en caminar normalmente. porque, antes, cuando quiso levantarse bruscamente de la cama terminó cayendo al suelo por un fuerte dolor en su espalda baja.
y le costaba caminar un poco, si daba pasos anchos le comenzaba a doler mucho.
sí, jimin no había hecho mal en desearle suerte. jimin le advirtió lo que pasaría.