SUGA DADDY ━ YOONSEOK

18

yoongi estaba escribiéndole a hoseok desde hace, literalmente, una hora y media. mensaje tras mensaje, llamada tras llamada. y no habían señales de hoseok.
era un comportamiento que no se adhería a la personalidad del menor, al menos no con él. no con yoongi.
el pelirrubio siempre solía responderles los mensajes rápidamente, mayormente entre un lapso de cinco minutos. por eso era tan extraño que no responda por nada, a parte, ¿qué cosa podría estar haciendo él a las seis de la tarde? ¿otra cosa que sea estudiar? no había nada.

de todas formas, si hubiera salido con uno de sus amigos, hoseok le hubiera mandado un mensaje. él era de los chicos que salían de su casa con la batería del teléfono llena, así que no podría haber escusa tal como "salí y no tenía batería".

¿y si llamaba a alguno de los señores jung para preguntarles qué sucedía con su hijo?
porque claro, yoongi podría ir hasta la casa de hoseok y asegurarse de que el menor esté bien, pero no quería ponerse paranoico.
tal vez era mejor preguntarle a sus padres que ir hasta su casa, ¿o no?

aunque, tal vez preguntarle a algunos de los señores jung, podría preguntarle a jiwoo. no sonaría tan extraño, incluso podría disfrazar su verdadera intención en una simple pregunta que funcione como distracción.

sin duda alguna buscó rápidamente entre los contactos a jiwoo, y no tardó mucho en atender.

—¿hola? —la voz de la mayor se oyó desde el otro lado.

—jiwoo, soy yoongi —respondió en un cálido tono, intentando sacar sus preocupaciones.

—¡yoonginnie! ¿qué sucede?

—quería saber si se encontraba hoseok, estoy llamándolo hace más de una hora y no responde —prefirió ser directo.

—uhm... hoseokie está algo raro —se oyó un suspiro del otro lado de la línea—. no sé qué le pasó, desde que aquél chico vino estuvo extraño.

—¿aquél chico? —citó—, ¿qué chico?

—un chico que vino a verlo, estaba todo bien, y justo cuando quería salir, al abrir la puerta encontré a ese chico besándolo... desde ese momento comenzó a llorar y no sé porqué.

las palabras “ese chico besándolo” retumbaban en la cabeza del pelinegro como dagas clavándose en un cuerpo.

—¿dónde está hoseok?

—se encerró en su cuarto, intenté hablar con él pero me está evitando... no quiere abrirme la puerta, y al parecer papá y mamá no se han dado cuenta de lo que pasó porque no intentan hacer nada.

—oh, entiendo... por curiosidad, ¿cómo era ese chico? tal vez era un amigo suyo que yo conozca.

la pierna de yoongi comenzó a moverse con nerviosismo debido al ataque de nervios que en cualquier momento tendría.

—no lo creo, yoongi. parecía ser más de mi edad o la tuya —jiwoo hizo un sonido pensativo—. recuerdo esto: es rubio, y creo que tenía una camisa color crema, o blanca... ¡oh! y una campera roja.

yoongi apretó su mano libre en un puño, mientras intentaba modular el enojo en su voz—. no sé quién es.

—oh... entonces no sé...

—yo ahora haré algunas cosas y luego intentaré a ver a hoseok, ¿sí?

—¡sí! estoy segura que le hará muy bien verte.

yoongi rió falsamente, incluso sabiendo que la mayor no se percataría de ello—. bueno, adiós.

—¡adiós! —dijo y colgó.

el pelinegro suspiró mientras pensaba qué hacer, porque claramente no se quedaría de brazos cruzados.