En el reflejo de mis ojos

Capítulo 25.

~"A Veces Los Héroes No Llevan Capa y Antifaz."~

Pov. Noah

Una semana después

Después del encuentro que tuve con Scott, no lo he vuelto a ver, he preguntado a los chicos si sabían de su repentina huída. A lo que solo me dijeron que se ha marchado por un corto período de tiempo por asuntos familiares, solo espero que no haya sido nada grave.

Por otra parte esta semana ha sido de los más tranquila, no ha habido ninguna interrupción por parte ni de Peter ni de Amanda, cosa que agradezco. He ido alternando los estudios, con el rancho y el gimnasio. Ni siquiera sé que como lo he conseguido, y dormir a la vez mis horas necesarias.

Hoy, he quedado con Sam y los chicos para tomar algo después del trabajo, cada vez me gusta más este sitio, aunque creo que ya lo he dicho antes. Además vendrá Raúl, el amigo de Sam, porque quiere que tengamos una "cita".

Pov. Scott

Llevo una semana en el hospital donde ingresaron a mi hermana. No fue una fractura, una enfermedad o cualquier otro motivo, sino una razón que realmente hace que me hierve la sangre. Está en coma inducido, a causa de una paliza que le propinaron entre cinco personas.
Tiene una ceja y el labio partido, unas contusiones en la cabeza y una costilla fracturada, además claro de que le han puesto collarín por el golpe contra el suelo que propinaron, le han torcido un tobillo y además tiene el cuerpo lleno de moratones.
Le han dejado hecha mierda y todo, por no seguir los ideales de los demás, por ser diferente. Realmente aún me cuesta creer que haya personas que sean capaces de hacer estas barbaridades.
Llevaría sin dormir una semana, sino le hubieran administrado los sedantes correspondientes, cuando se retrasan aunque sea media hora con la siguiente inyección, se despierta gritando y llorando.

¿Lo peor? Debido a sus lesiones, mis queridos padres no pueden pagar el tratamiento correspondiente para su rehabilitación completa, ya que por lo visto cuesta un riñon, supongo que estoy solo.

Me dirijo a la entrada del hospital con el móvil en la mano. Sé que me voy a arrepentir en un futuro, pero esto es por mi hermana.

(Llamada telefónica)

—¿Sí?

—Soy Scott, quiero entrar en el trato.

—Vaya vaya, pero si es el imbécil del Scott. ¿Necesitas dinero para drogas?¿O para pagarle a esa putita tuya?

—Vete a la mierda Peter, ¿Estoy dentro?

—Bienvenido a la familia.