Harley (#4)

9. Polvos pipa pica.

Ese yo no dolió más que un puñetazo en la cara. Desde el otro lado del claro Harley miraba a la razón de todo sus desvelos.
Habían venido todos a la boda, Jerichó insistió en ello. Quería que además de la familia y los amigos también asistían a ella, todos los que habían intervenido en el cuidado, rescate y bienestar de sus hembras.

La boda se llevó a cabo dentro de la zona salvaje, mucha gente asistió. Incluyendo los humanos del equipo de rescate y también la doctora Gregor.
De hecho la doctora Gregor llegó acompañada de Marc, y Harley no pudo evitar sentir celos.

El humano le había rechazado, con razón, claro. Aún así el rechazo dolía. Y verle asistir a la boda con una hermosa mujer colgada en su brazo...
No se supone que es gay? Que carajo hacia entonces con esa hembra?

Estaba tan furioso que debió transmitirle alguna vibración al bebé, porque ella se removió un poco inquieta en sus brazos. El la acunó más dulcemente y le hizo soniditos suaves en el oido. La niña se calmó.

Al parecer él no era el único que observaba a alguien desde la distancia. Over también estaba allí y a Harley no le pasó desapercibido el ceño fruncido con el que miraba a la doctora, parecía enfadado con ella, como el se sentí a con Marc.
Traicionado incluso.
Pero por mucho que quisiera culpar a Marc la verdad la culpa era sólo suya. Por ser un cobarde.

Debia encontrar la manera de darle a Marc todo lo que quería.
Porque aunque él lo había rechazado en primer momento y se mantuvo a distancia. Estaba arrepentido y al igual que todos los otros especies emparejados antes que él, estaba haciendo las mismas tonterías, espiar, vigilar desde la distancia. Robarle prendas de ropas para tener su olor cerca... vamos comportarse como un tarrumba.
Pues ya estaba bien. Ya era hora de tomar al toro por los cuernos y reclamar a su hombre.

.............................

Una semana después.

Su plan de acercarse a Marc y tomarle como su compañero no iba nada bien.
El maldito humano no se lo estaba poniendo nada fácil.
Harley estaba muy ilusionado por empezar su cortejo y que hacía el humano? Desaparecer.

Se había tomando unos días de descanso. Se marchó y Harley no sabía dónde estaba. O si estaba a salvo.
Si ya sabía que no estaba actuando de forma racional, el humano era una auténtica máquina de matar y no necesitaba la protección de Harley, ni la de nadie. Aún así no podía evitar estar preocupado. Y encima cuando le preguntó al puñetero Trey, este se había encogido de hombros y dijo que ya volvería cuando volviese . Y tuvo el descaro de decirlo con una sonrisita.

Por ahora lo único que había sacado en claro es que cuando volviese empezaría a entrenar a un grupo de hombres de la zona salvaje. Al parecer Over les había dicho en la boda que sería entrenado para otros tipos de combate que no fuera sólo cuerpo a cuerpo, y pronto más de los machos se ofrecieron voluntarios para ser entrenados.
Así que pronto iniciaría su entrenamiento con ellos. Por lo tanto volvería. Era cuestión de tiempo. Y el aprovecharía ese tiempo para prepararse, cuando el humano volviera se encontraría con una buena sorpresa.

Descolgó el teléfono y puso en marcha el primer paso de su plan.

.................................

Café...
Calentito...
Rico...
Para la doctora Amanda Gregor el café era la base de su pirámide alimenticia, lo fue en el instituto, y más en la universidad, en la especialización se comía los granos de café como si fueran caramelos.

Hizo falta una úlcera y ser ingresada en el hospital por deshidratación despues de cuatro días sin beber otra cosa que café y sin comer otra cosa que granos café, para darse cuenta que no podía seguir con esta vida.

Así que cuando su amiga con la que fue a la Universidad y luego compartió la residencia la llamó para ofrecer un puesto de ginecóloga para la ONE, no lo dudó.

Tampoco es como si dejará algo atrás. No tenía familia ni hijos de los que preocuparse por el desarraigo y la única persona que dejaba realmente atrás... bueno a su marido no le importaba si trabajaba en California o en Japón.

Así que después de reducir el café a dos diarios había cogido todos sus trastos y mudado al Homeland.
Aunque en este momento estaba instalada en la reserva. Prefería estar cerca de Mary y del bebé al menos durante los próximos dos meses, y así también aprovecharía para revisar a todas las mujeres de la reserva. Nunca venía mal una revisión de rutina.

Dio el primer sorbo de su café cuando en la salita apareció una alteradisima triccia.

- Mandy. Menos mal que te encuentro. Necesito que me hagas un favor.

- Tu dirás.

- Acaban de llamarme, mi hijo Forest se ha metido en un lío, le han pillado poniendo polvos pica pica en la ropa de Patito, la hermana de Lucy. Tammy me ha llamado, dice que el chico ahora mismo está de pies aguantando estoico la mirada asesina tanto de Valient como de Leo. Casi me dan ganas de dejarle allí y que se ocupe esos dos de solucionar el problema. - triccia se rio- menudo gamberro.

- No le envidio nada. Esos dos machos son aterrorisantes.

- Eso me dijo Slade. Pasará a por mi en unos minutos. Slade quiere unir su mirada a la de esos dos. Ese es el motivo por el cual necesito que me hagas un favor.

- Tu dirás.

- Acabo de recibir una llamada. Veras , tenemos un especie que bueno... que al parecer es homosexual, pero hasta ahora siempre ha sido activo. Pero su actual pareja también lo es, y quiere tener una vida sexual más plena. Me ha llamado porque al parecer hay algún problema o tiene dudas o quiere que lo revise. No me ha quedado muy claro. Hablaba muy rápido y parecía nervioso. Tu además de ginecologia también has hecho la residencia de Urología ¿verdad?

- Aja.

- Me podías hacer el favor de atenderle tu? Me voy a la zona salvaje y puede que tarde un par de horas hasta que vuelva y el paciente llegará en unos 30 minutos.

- Bueno. Pues vete tranquila que yo me ocupo de él.

- Gracias amiga. Eres la mejor- dijo Triccia ya marchando de la sala.

- Espera! Quien es el paciente?

-Tu lo conoces. Es uno de los guardias que estuvo protegiendo a Mary.

-Ouh. - dijo Mandy