Sé lo que digo, estoy seguro de que Ruy estaba ese día, es más, lo vi saliendo de esa camioneta. Pero estoy más seguro de que él es el psicópata que persigue a mi hermana por cómo me dejó.
Horas atrás~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Luego de cruzar una palabras en el pasillo con mi hermana, fui a mi habitación para descansar, no puede pegar un sólo ojo en toda la noche por la preocupación. Aún sigo pensando en lo que pasó con Sheldon, el pobrecito no debía pasar por eso. Todo fue mi culpa.Pasaron unos minutos y aún seguía sin poder dormir hasta que escucho unos pasos en mi cuarto, debe ser Lian con sus pastelillos, realmente no quiero verla ahora –Lárgate Lian. –hablo serio sin voltear, estoy de espaldas a la puerta. No recibo respuestas hasta que siento que una mano toma mi hombro y me obliga a girar.
¡¿Qué mierda hace él aquí?!
–No soy Lian. –niega con la cabeza lentamente. No me digas.
–Sal de aquí. Seguramente vienes a decirme que quieres ser mi amigo y esas idioteces pero no me engañas. Sé quién eres en realidad. –le aclaro mirando sus ojos. Son de un color extraño ahora que los observo bien.
Él suelta una risa –Si ya lo sabes no tengo que fingir. –sube y baja los hombros para luego tomar mi cabello con fuerza, duele mucho. Hasta me levanta por completo de la cama, mis manos van a mi cabeza para intentar aflojar su agarre –Todo este tiempo me he estado controlando para no romper los huesos que te sobran. Pero ahora lo haré. –murmura apretando los dientes.
Entonces toma uno de mis brazos con fuerza, el dolor es insoportable, hasta puedo escuchar como se rompe. El agarre de mi cabello desaparece y caigo al suelo golpeando parte de mi rostro.
–No gritaste. –Ruy rasca su barbilla pensativo –No importa, sólo es el comienzo. –suelta una risa burlona. Camina hacia mí pero algo lo detiene.
–¡No te me acerques! –escuchamos un grito desde la cocina, juro que es Lian.
–¡Li...! –trato de gritar para alertarla pero Ruy envuelve varias veces parte de la sábana por mi boca para que no pueda hablar. ¡No! ¡Esto no está pasando!–Tú te quedas aquí, iré a ver lo que sucede con mi novia. –dice lanzando una mirada amenazante –Debe ser Milo. –murmura pensativo.
¿Conoce a Milo? ¡Él lo conoce! Es su compañero, y estuvo con nosotros todo este tiempo.
Ahora~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
–Me arrastré como pude hasta la mesita de luz, en busca de mi celular, debía llama a la policía porque mi hermana estaba en peligro. Eso hice pero cuando la ayuda llegó, los hombres escaparon. –doy mi declaración al oficial mientras una enfermera se ocupa de ver mi brazo roto, me dijeron que me pondrán un yeso –¿Cómo está ella? –les pregunto rápidamente.–Ella estará bien, sólo perdió mucha sangre y la encontramos inconsciente, los médicos le hicieron una transfusión. –contesta el oficial –Fuiste un chico muy valiente. Y no te preocupes, encontraremos a los culpables. –él sale de la sala dejándome a solas con la enfermera.
–Ella murió, ¿Cierto? –le pregunto a la mujer. Deben decirme la verdad, ya no soy un niño.
–Oh no, el oficial ya te lo dijo. Ahora ya está fuera de peligro y ya llamamos a sus padres. –la mujer me da una sonrisa para tranquilizarme –Ahora el doctor vendrá a ponerte el yeso.
Ella acomoda un poco mi cabello y me deja solo en la habitación, debo esperar al doctor pero quiero estar con Lian, no es justo. En eso, la puerta se abre dejándome ver a Milo.
–Dante, yo...
–¿Qué haces aquí? Lian estuvo a punto de morir, es tu culpa y la de tu amigo Ruy. –hablo furioso, si pudiera, lo golpearia y lo entregaría a la policía justo ahora.
–No, no. Salvé a Lian. Mira, es de día y el sol no me hace daño, no soy un vampiro. –hace una pausa, no soy idiota, obviamente está mintiendo –Su verdadero nombre es Walter, no Ruy, no podía permitir que él la asesine porque fue mi primera amiga. Antes que llegara la policía yo escapé, Walter no acabo conmigo sólo porque ya era de día. No bebió suficiente sangre para ser inmune al sol de nuevo. –me explica con la cabeza agachada.
¿Sangre? Ruy, no, Walter... ¿Es un vampiro real? Eso explicaría por qué a Lian le faltaba mucha sangre cuando la encontraron –¿Es verdad todo eso? –pregunto arqueando una ceja a lo que Milo asiente con la cabeza.
–Yo... Ah, debo irme, sólo me arriesgué a entrar para saber si Lian estaba bien, estuve en su habitación. –habla nervioso rascando su nuca.
–¿Qué? –antes de que pueda hacerle más preguntas él sale del cuarto con prisa. No puedo seguirlo porque no tengo una silla de ruedas cerca, en segundos el doctor ingresa con todos su materiales.
–¿Ocurre algo? –me pregunta curioso al ver mi rostro.
–No, nada. –murmuro pensativo. Si entrego a Milo sería injusto si realmente salvó a Lian, debo preguntárselo a ella para estar seguro.
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El Dueño De Lobos
VampireTodavía no creo lo que ví, todos dicen que fue una alucinación por beber tanto, quiero aferrarme a esa idea pero él sabe que lo ví y vendrá por mí, me matará al igual que a esa chica en la fiesta.