Capítulo 27: Cortas vacaciones, nuevo curso

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El día fue relajante, excepto por la parte en que cada vez que entraba a la cocina sentía la mirada punzante de Justin hacia mí en cada momento. Lo bueno era que la cocina no daba la vista del último extremo del salón y fue ahí en donde tomé mi pequeño descanso.

Sentada en la última mesa, junto a un pedazo pequeño de sándwich y un jugo fue la manera más relajante de pasar los diez minutos alejada de la mirada de Justin. Me gustaba cuando me miraba, pero sé que ahora es como cuando mira a un perro de que no se escape de casa y eso me tiene agobiada.

Le di un sorbo a mi jugo pero casi lo escupo al sentir como el collar que tenía en la muleca comenzó a vibrar. Asustada vi como emitía una pequeña lucecita constantemente.

—Si funciona —Dijo Nicolás mientras se reía al verme. Yo lo miré enojada.

—Casi escupo mi jugo —Le reclamé y volví a tomar un sorbo.

Él se acercó a la silla y se sentó enfrente de mí.

—Cada vez que la luz roja parpadee tendrás que apretar la letra L para contestar. —Me explicó mientras él tocaba la letra de su collar.

Dejé el jugo a un lado y miré mi collar; apreté la letra e inmediatamente el collar de Nicolás comenzó a brillar. Presionó la letra y me dijo un "Hola" el cual se escuchó claramente por el pequeño adorno.

—Esto parece de película —Le dije mientras miraba un poco asustada el collar. Con suerte había usado mi celular y ahora salto a la gran tecnología de hablar atreves de un collar. Y eso que yo ni uso accesorios.

—Pues solo de esta manera podré hablarte ya que tu hermanito no te deja en paz —Me dio una sonrisa irónica. Yo le devolví con una mueca. Tampoco me gustaba la idea de estar vigilada a todo momento. —Necesitamos planear que hacer para que recobres la memoria.

—Escóndete detrás de la pared y cuando salga de "Bu" y así se tomará como un evento traumático y recordaré todo —Hice señas con las manos tratando de sonar divertida, pero él con una sola mueca me dio a entender de que esto no era así.

—Comenzarás el colegio en breve —Dijo serio. —Después estarás rodeada de tus amigos, así no podremos hacer nada

Hablando de mis "amigos" aún no he hablado con Daniel, pero con Kim hablé el día después de que pasó la cosa de la pelea. Primero me lloró ya que pensaba que la había cambiado por Sandra, pero luego me retó ya que le conté que le estaba escondiendo algo a Justin y me dijo que eso no se hacía. Escuché toda su plática y liego le dije que ya le había dicho todo, y con eso se quedó tranquila. Lo último que supe de ella es sus padres se fueron de viaje con ella y por eso me dejó a cargo de que vigilara a Martín, lo cual no he hecho por razones obvias.

—No creo que eso sea un provena —Le dije mientras tomaba el pequeño pedazo de sándwich que me quedaba. —Justin dijo que no les diría

— ¿Y tú le crees?

—Claro —Fruncí el ceño. —Puede que Justin sea muchas cosas, pero mentiroso no es —Afirmé, pero en realidad eso es lo que quiero creer ya que nunca se sabe nada en momentos como estos.

—Confianza de pareja no funciona —Me sonrió burlonamente. Yo lo ignoré y giré mi cabeza hacia otra dirección. Miré el reloj de la pared y para mi mala suerte no pude disfrutar bien mis diez minutos de descanso ya que el tinto de Nicolás me distrajo.

Apurada me eché el resto del pan junto con el jugo y me puse de pie dejando solo a Nicolás en la mesa.

— ¡Se dice con permiso! —me gritó él acaparando la atención de todos, menos la mía; seguí caminando y lo ignoré. Solo me quedaba una hora de trabajo, así será mejor ponerse a trabajar, para eso me pagan...

El recuerdo de un amor olvidado ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora