Capítulo trece.
-Yo comienzo -Axa aclaró su garganta-, bien me llamo Axa Mercury, vivía en Inglaterra pero me mudé a California hace seis años. Aún no sé cual es mi don pero intento encontrarlo, aunque me está costando demasiado. Descubrí que era un Diff cuando tenia diecisiete años por lo que comencé a tener náuseas, vomitaba, me mareaba y lloraba sangre, era todo muy asqueroso por lo que me llevaron al hospital después de cuatro años aguantándolo este dolor. Y ahí fue cuando desperté aquí, en este lugar sin saber que me estaba sucediendo en realidad. Yo pensaba que iba a despertar en un hospital con doctores, no en una prisión con soldados. Por suerte, cuando llegue estaban Eden y Johan, que me contaron la razón de todo esto -me parecía raro que aún no pudiera encontrar su don, ya era muy grande para no haberlo encontrado. Bueno eso es lo que creo.
-Okay yo soy Eden Kicyohrik...
-Espera ¡¿Eden qué?! -gritó Johan dramático.
-Kikyohrik, mis abuelos son asiáticos entiéndelo bro -por eso Eden me resultaba con una apariencia muy peculiar, tenía sus ojos un tanto achinados y sus pómulos levantados-, bueno nací en China, pero nos mudamos por el trabajo de mis padres a Estados Unidos, tampoco descubrí mi don, pero noté que es muy difícil encontrarlo se nota que hay que concentrarse. Me paso lo mismo que Axa a los diecisiete años me di cuenta, nada mas que no quería ir al hospital, y no lo hice. Investigué un poco sobre lo que me estaba pasando, y encontré un vídeo muy interesante sobre un chico, le dió respuestas a todas mis preguntas. Entonces decidí irme por mi cuenta a China con mis abuelos, supuse que allí estaría a salvo del gobierno de Estados Unidos. Por mi mala suerte, en el aeropuerto cuando quise cruzar por los rayos X para equipajes y personas, empezó a hacer muchos ruidos, tantos que sobrecalentó la máquina y explotó. Nadie entendía que pasaba, así que me llevaron preso, después de unos días se dieron cuenta que era un Diff y me mandaron aquí.-Mi nombre es Johan Melvin, viví en Texas. Aún no encuentro mi don, y descubrieron que era un Diff en el hospital de allí -nos miramos entre los tres después de su largo silencio.
-¿Es todo? -dijo Eden- ¿Fuiste al hospital por los dolores y eso? -Johan miró el suelo apenado, al parecer no nos quería contar algo.
-Johan, sabes que puedes confiar en nosotros -Axa lo miró sincera, al parecer sus dulces ojos suavizaron el duro ego de Johan.
-No, no fue por los síntomas de la enfermedad "Diff" , cuando tenía diez años me diagnosticaron leucemia, por lo que tenia que ir frecuente al hospital. Un día todo empeoró, fue donde paso, los vómitos, la sangre, los sueños, etc. Tenía diecisiete años cuando me llevaron de urgencia al hospital. Creí que moriría, pues pensé que todos esos síntomas raros era por mi leucemia, pero en realidad no era por eso.
Mi cáncer desaparecido como por arte de magia, se había ido de mi cuerpo, pero ahora tenía una nueva enfermedad. Creí que estaba castigado de por vida, me había librado de una cosa y después me encuentran algo aún peor. Nunca me querían decir que me pasaba o el por qué, así que me dispuse a investigar por mi cuenta, y vi el mismo vídeo que miró Edén.
Comprendí todo, pero al día siguiente la policía entró a mi casa, rompiendo todo lo que había en el lugar, y me llevaron. Entonces fue cuando aparecí aquí. Fui el primero de los cinco en llegar aquí, y no saben lo difícil que se me hizo organizar mi cabeza estando tan solo y alejado -me sorprendí al escuchar por primera vez a Johan expresando sus sentimientos hacia nosotros, después de todo, cada uno tiene una historia que contar.-Oh Johan no tenía idea -pronunció Axa sorprendida también.
-No es necesario que digan nada...
-Lamento mucho lo que te paso hermano también lamento haberte dicho cáncer de cerebro la semana pasada, ahora sé porque te enojaste tanto. No tenía idea de lo que habías vivido antes -después de eso nadie dijo nada, se formó un silencio realmente incómodo para mí gusto. Los tres me miraron al mismo tiempo y me dí cuenta que todos estaban pensando en una cosa. Supe que era mi momento de contar lo que me pasó en estos meses, una historia que me había cansado de pensar y contarle a los científicos.
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El Reino Hatlas -En edición #RedQueenAwards
Fantasy★~•~★ Maddie Rymondfield, es una persona común y corriente como cualquier otra chica de preparatoria. En su décimo año de estudios, comienza a experimentar una muy fea sensación en su cuerpo, como náuseas, pérdida de sangre en sus orificios nasale...