Kelsey. Part. III

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Capítulo nueve

Los días seguían pasando y lentamente íbamos aceptando lo ocurrido. Se había suspendido el baile este año y todos estaban muy enojados. A mi me daba igual que lo hagan o no lo hagan, pero yo creo que Maddie ubiera preferido que lo hagan, aún así con su respeto.

Logan y yo nos habíamos distanciado mucho, ya no nos veíamos como antes, pues yo estaba muy distante y me enojaba por cualquier similitud. Supongo que a él le molestaba mi actitud. Pero debía de aceptarme y tolerarme. Yo igual debería cambiar mi actitud, pero ya no podía, era parte de mi. No me gustaba estar así, solo... estaba muy desesperada. No sabíamos nada de Madison y eso me estrujaba el corazón.

Tracy me dijo lo había visto muy cariñoso con una chica y que más de una vez lo vio abrazándola. Ya no se que pensar, que haga lo que quiera con su vida. La verdad ya no me importaba.
Hasta cuando él me dijo;
  —Hola Kelsey... —rascó su nuca.
  —Hola ¿Qué quieres? —cerré mi taquilla y colgué mi bolso en mi hombro. Lo miré sin ninguna expresión.
  —Mira Kelsey, yo siempre te amé hasta cuando estabas con tu periodo, pero últimamente has estado muy...
  —Distante.
  —Si, por eso estás muy...
  —Aburrida y alejada.
  —Si estonces a mi me gustaría...
  —Cortar conmigo.
  —No, no... si... pero espero que lo entiendas, esto es muy difícil para mí.
  —Bien.
  —¿Bien? ¿Es todo?
  —Emh pues si.
  —Yo creí que saldrías llorando y me estarías golpeando o algo así.
  —No todas las chicas somos iguales Logan, aparte tú solo me querías para divertirte, por lo que me acabas de decir.
  —No, no era solo por eso —tomó mis manos.
  —Sueltame —ordené y las soltó rápido, él estaba asustado por mi comportamiento y se notaba en sus ojos— ¿Entonces por qué?
  —Porque yo te quiero y te acompañé con lo de Maddie —¿Eso era suficiente para él?
  —Diablos Logan, solo vete, no estoy de humor para hablar contigo, y creo que tener novio es una perdida de tiempo, y más si también sales con Cler —sus ojos se abrieron como plato al haber mensionado ese nombre.
  —¿Y tú?... ¿Y tú cómo sabes eso?
  —No soy estúpida, tengo mis contactos —puse los ojos en blanco y comencé a caminar.
  —Espera no te vallas.
  —Adiós.
  —Okay adiós —se quedo inmóvil y rascó nuevamente su nuca.

★~•~★

   Fue un día largo como siempre, repleto de tarea y trabajos prácticos. Mientras volvía a mi casa reflexioné sobre lo que había pasado con Logan y creo que era lo mejor. Logan era un buen chico, y me gustaba, pero él ya se estaba aburriendo de mi comportamiento de niña. Él quería un poco más de aventura, y yo con un corazón roto en tristeza, no éramos compatibles. Pobre Log era lo mejor para él también, tal vez solo tal vez, más adelante lo podría retomar. Depende como me sienta.

Siempre pienso en Maddie, es muy raro, esto de estar sin ella. Siento que una gran parte de mí me falta. Mad era un componente de mi corazón y al haberse ido, no funciona igual. Y lo detestaba.

En fin, estaba viendo una película de terror mientras comía palomitas bañadas en mantequilla, cuando escucho mi teléfono sonar, era Tracy. Le pongo pausa y atiendo.
  —¿Hola? —dije con la boca llena.
  —¡Kelsey! —gritó desesperadamente.
  —Ay ¿Qué sucede? No grites, mis oídos —por la linea solo escuché su respiración acelerada—, deja de hacer eso me asustas Tracy.
  —Maddie...
  —¿Maddie qué? —diablos está chica me está asustado en serio.
  —Ella me llamó —se escuchó un sollozo por el parlante.
  —¿A tu teléfono? —hablé alto y me levanté de mi cama de un brinco. Las palomitas salieron volando.
  —Si, y no deja de hacerlo, Kelsey estoy muy asustada y no entiendo nada, no quiero contestarle la llamada.
  —Okay, tranquila no llores -dije poniéndome un abrigo sobre mi la fina tela de mi -, voy en camino, si te llama no atiendas, esperamé -me puse unos jeans y los primeros zapatos que encontré.

-Mamá, iré a casa de Tracy a dormir, volveré mañana -dije en cuanto llegué a la sala.
-Pero hija ya es tarde, es media noche.
-Es urgente.
-¿Pasa algo con Tracy?
-No nada malo, solo está un poco enferma y quiere que la acompañe.
-Bien ¿Quieres que te lleve?
-No, iré en bicicleta.
-Recuerden que mañana tienen clases, nada de quedarse hasta tarde.

Anduve por veinte calles pedaleando, apurada por llegar a casa de Tracy y cuando llegué, ella no dudó en abrazarme como si hace millones de años que no nos hayamos visto.
-¿Cuántas veces ha llamado? -pregunté una vez ya dentro de su cuarto.
-Unas cuatro veces.
-Bueno, tranquila, cuando llame le atenderé ¿Entiendes?
-Bien, pero yo también quiero escuchar.

Esperamos por veinte minutos, aquel tiempo se nos había hecho eterno, creo que habían sido los veinte minutos más largos de mi vida.

Estábamos tan concertadas en el celular de Tracy que no nos dimos cuenta que ahora no era su celular el que sonaba, sí no el mío.

El nombre "Mad<3" en la pantalla se hizo presente. Me sobresalté al verlo, con mis dedos temblando deslicé la pantalla con mínima delicadeza y atendí la llamada.
-¿Ho-hola?
-Hola ¡Kelsey! Oh que bueno que me atiendes -escuchar su voz por el otro lado del parlante hizo que mi piel se estremeciera, llevé una mano a mi boca, no podía creerlo-, guau esto es muy raro y no se por donde comenzar, primero las quiero ver, a tí y a Tracy.
-¿Nos quieres ver? Pero tú estás...
-Si lo lamento, falté demasiado a clases pero es por una buena causa, supongo... -rió, era tan viva su risa que era obvio que ella no parecía muerta. Tal vez, solo tal vez lo que dijo el señor de la cafetería era verdad-, lamento mucho no haberles dado ninguna señal de vida antes, pero no podía, con tantos tubos y inyecciones no dejaban que tome mi celular.
-¿Tu dónde estás?
-En el laboratorio Synthon, no se donde queda exactamente pero pueden venir a visitarme cuando quieras, mientras mas rápido posible mejor, estoy muy aburrida aquí encerrada -¿En un laboratorio?
-¿Y qué haces ahí? ¿Por qué estás allí?
-Al parecer el Hospital George Canterlot no podían manejar mi enfermedad o eso me contaron mis padres. Por lo que sé, cuando esté laboratorio vio lo que me pasaba, se propuso a ayudarme ¿Ahora explícame lo que yo estaba qué? -las lágrimas de felicidad comenzaron a brotarme de mis ojos, y los de Tracy ya estaban empapados-, ¿Por qué escuchó llantos? ¿Estas con Tracy? Holaa Tracy ¿Por qué lloran chicas? Me asustan.
-Mañana te lo contaremos, solo estamos emocionadas.

~•~

-Y eso fue lo que pasó -dijo Kelsey después contarme todo lo que había sucedido. ¿Yo muerta? No creí que iban a llegar a ese punto, pero me emociona que ellas ubieran estado gastando su tiempo en buscarme.
-Es demasiado para un día, pero... guau.
-Deja de decir eso, es lo único que dijiste en todo este tiempo -rió Tracy.
-Lo lamento es que, es muy extraño, ahora en este mismo momento, en toda la escuela, y la cuidad, piensan que estoy muerta. Es difícil de procesar. Y por mi culpa, no van a poder festejar su baile de fin de año, diablos me siento muy culpable, debería hablar con el director.
-No creo que sea buena idea, sería muy extraño para toda la escuela saber que tú estás... viva.
-¿Y si después lo que tengo se va de mi cuerpo? Tal vez algún día salga de este laboratorio, y cuando lo haga no tendré vida, si todo piensan que soy un zombie. Es mejor aclarar.
-Bueno, es tu decisión -hablamos por horas, cielos las extrañaba demasiado pero los señores de traje blanco dijeron que ya era suficiente y debían irse. No más sin antes aclararles o más bien, amenazaslas con no contarle a nadie sobre esto, sí no tendrían graves problema. Pobres tendrán que vivir con una gran carga. Ellas me dijeron que este laboratorio estaba a kilómetros de California, y que se les había hecho difícil venir pero volverían pasado mañana.

Fui a mi habitación después de despedirme, y me encontré con un plato de comida. La mayoría eran verduras al vapor. Probé un poco y preferiría mil veces la sopa de la escuela. Pero tuve que comerlas si no quería morir de hambre.

~★.★.★~

Este capítulo es muy corto, ya sé pero no podía agregar más, ya el próximo capítulo será bastante extenso y entenderán★. Un beso.

TheIronHeartt.

El Reino Hatlas -En edición #RedQueenAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora