Anoche vi a los vecinos coger. No es la primera vez que los veo, de hecho es algo así como una rutina de dos veces por semana que inició recién me mudé a este edificio. Las primeras veces era muy excitante, ahora me quedo en la ventana porque me siento comprometida con ellos. Es una relación complicada, que inició con mucha intensidad, pero perdí el interés rápidamente. Jugamos a que ellos no saben que estoy en mi balcón y yo pretendo que no les veo. Al principio me la pasaba pendiente todo el tiempo de ellos, ahora los papeles han cambiado y son ellos quienes me esperan para iniciar sus caricias amorosas. Me asomo a la ventana y están viendo la TV tranquilamente pero en cuanto sienten mi presencia es como ponerle play a una película porno. Eso parece gustarles mucho y no quiero que se sientan rechazados. Me imagino el diálogo: "Ahí está la vecina. ¿En serio? ¿Nos está viendo? Sí, amor, nos está viendo. Que rico. Oh, espera... cerró su ventana. Se fue. Ya lo ves, te dije que te pusieras a dieta. ¿Yo? Pero si el gordo eres tú. ¿Sabes? Esta relación no funciona más, quiero el divorcio." En fin, que no me gustaría ser la causa de su separación, les he tomado cariño y quiero que sean felices. Además, pronto será nuestro segundo aniversario.
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La Desventura
Short StoryLa vida cotidiana, encuentros y desencuentros, drogas, amigos, sexo, fantasía, humor y amor en relatos cortos.