My little bitch ☆YoonMin☆

31. Recuentro.

Lo empujo con violencia a la cama sacándole un agudo grito ahogado. Rápidamente se colocó encima de él agarrándole de las muñecas para no dejarlo ir.

-¿Seguro que quieres esto?- rezongo demasiado grueso y enojado, no lo quería volver a lastimar.

-Mmm... Nnmhh~...- intentaba hablar entre el beso hambriento que el alfa le dio antes de responder, logrando solo gemidos obscenos.

Se separó un momento del caliente y húmedo beso, volviendo a sentir como si hubiera sido su primer besito que se dieron de niños, de nuevo esas tontas maripositas en sus panzas.

Con la mirada trasmitían el aprecio y el inmenso cariño que tenían, también mostrando lo tanto que se extrañaron esos años.

Al pequeño omega se le humedecieron los ojos al recordar todo el dolor que sintió sin él a su lado, todas las veces que rogaba para volverlo a ver y ahora lo tenía enfrente, lo podía tocar, besar y sentir su calor cercas de su piel.

-¿Por qué... me abandonaste Hy...hyung?- se echó a llorar hipeando y saliendo unas pocas lágrimas, tenía miedo de despertar y que todo fuera un sueño.

-Nunca te abandone bobo.- dijo molesto, sabía que le habían metido esa idea muchos años y tan inocente que era se la creyó fácilmente viviendo con eso. -Te separaron de mí, corrí todo lo que pude para llegar hacia ti, hacia ese auto en que te llevaron a un nuevo lugar lejos de mi.- se recargo en sus codos uno a cada lado de la cabeza de Jimin, soltando de sus muñecas y dejándolo extendido sobre el colchó y viéndose directo a los ojos.

-Te extrañe mucho y te llame para que fueras...- soltaba las lágrimas de una por una limpiándosela con su manga del suéter. -pero nunca volviste...- susurro apenas audible y hablo cuando se calmó un poco. -Mamá me dijo que los alfas iban por ti con tan solo si gritaras su nombre, o cuando estabas en problemas.... pero no llegaste nunca.- decía con nostalgia, quería que apareciera justo cuando lo golpeaban o le trataban mal. - Me rendí a volver a verte.

En todo ese tiempo no habían despegado sus miradas.

El rubio cortó la mirada y le dio un abrazo con ganas de que nunca se fuera otra vez de su lado.

En cambio Yoongi se sintió pésimo por no estar con él en todo esos momentos.

-Minnie...-le correspondió con un fuerte abrazo. -Te busque, te juro que busque en cada puto rincón con desesperación sin saber nada de ti. Me culpaban de que yo hice que te separaran, era mi culpa, dolía más no poder verte que los golpes que recibía, pero ¿qué podía hacer un niño de 13 años? Odiaba ser un alfa, si tan solo no te hubiera mordido.

Jimin se tensó, no se esperaba esa confesión.

-¿T...te arrepientes... haberme elegido... c...como tu pareja?- se le quebró la voz.

-No... Nunca. Me arrepiento no poder encontrarte y haberme rendido.

-No te vayas por favor.- suplico audible solo para el alfa. -Por favor Yoongi-Hyung.

-Pero Jimin... no me soportas.

-¡Eres un tonto!- separo al alfa del abrazo. -¡No te odio! nunca te odie.- dijo viéndole la cara pálida y lastimada de Suga, con su yemas de los dedos lo acaricio con sumo cuidado. -No sabes cuánto extrañe tu presencia.

-Yo te extrañe más Minnie.- tomo su pequeña mano y la beso con delicadeza.

-Yoonie~...- runruneo abriendo sus piernas e invitándolo a estar entre ellas. Daba lengüetadas en el cuello blanquecino. -Minnie quiere volver a ser marcado~...- canturreo suave ya más calmado, mirándolo con ese brillo pícaro en sus ojos, restregando sus nalgas y moviendo sus caderas para hacer fricción sobre el duro pene del alfa.