- Tomé algo en mal estado y he vomitado, nada más mamá — dije débilmente, tenía que guardar reposo.
- ¿Qué has comido? — estaba bastante nerviosa — Ya me lo contarás por el camino, ahora vamos que mi primo y su esposa están esperando. Luke, gracias por traer a ____.
- No hay de qué, ahora me tengo que ir a ensayar, ya nos veremos. — dijo Luke dándome un abrazo.
- Adiós Luke, gracias.
Se veía como Calum se alejaba con el coche mientras mi madre pedía un taxi. Nada más pedir el taxi mi madre empezó a gritarme:
- ¿ME QUIERES DECIR QUE ES LO QUE TE HA PASADO? PARECES UNA MUÑECA FRÁGIL QUE SI LA TOCAN SE DESINTEGRA.
- Primero no me grites, y segundo, suele pasar cuando has vomitado todo lo que llevabas dentro.
- TE GRITO SI ME DA LA GANA, ¿QUÉ COMISTE?
- Unas cookies que compré a una niña exploradora.
- A saber qué contenían...
El taxi no tardó en llegar, nos montamos y fuimos hacia un restaurante. Fue lo típico, se sorprendían de lo mucho que he crecido. Toda la comida la pasaron hablando entre ellos mientras yo estaba pensando en mis cosas comiendo una ensalada.
- ¿Y qué tal vas de amores ____? — me preguntó la que sería una especie de tía.
- Amm... soltera — y solté una pequeña sonrisa.
- Di que sí, no necesitas novio, a saber si te obliga a mantener relaciones, tu primera vez tiene que ser especial. — se metió mi madre en la conversación.
Casi se me va por el otro lado la lechuga. Mi madre no sabía que ya no era virgen. Empecé a mirar hacia los lados nerviosa.
- ¿No eres virgen verdad? — dijo mi "tía" sonriendo.
Miré a mi madre que me estaba mirando con cara de pocos amigos.
- Eem... no... - apenas pude soltar.
- Ya hablaremos de esto en casa señorita. — soltó mi madre.
- Pobrecica, que tiene ya 17 años. — dijo su primo.
Mierda, con lo tiquis — miquis que es mi madre seguro que me echará un sermón... me castigará de por vida y me prohibirá salir con los chicos en los próximos 50 años. Mientras estaba comiendo, evitando cruzar miradas con mi madre recibí un mensaje, era de Luke.
"Me alegro de que hayas vuelto :) "
Se me escapó una sonrisa y le contesté:
"Me alegro de haberte encontrado :* "
Los verdaderos amigos nunca separarán su corazón a pesar de la distancia.
Después de comer querían dar una vuelta, yo recordé que tenía que guardar reposo durante 2 días a base de comidas muy ligeras, preferiblemente sopas. Le pedí a mi madre irme a casa porque me seguía encontrando mal. Al final cedió y me dio dinero para el taxi. Ya eran las 5:30 pm cuando llegué a casa. Al llegar me tumbé en mi cama y me puse música, quedándome enseguida dormida.
Me desperté a las 9 de la noche. Estaba muy frágil, el lavado de estómago me había dejado frágil... De repente llaman a mi puerta, se abrió dejando ver a mi abuela.