El chico del antifaz || Wigetta

QUINDICI: El plan decisivo

Narra Samuel

Cristhian esta jugando sucio, y yo tengo que hacer todo lo posible por que no le pase nada a Guillermo, nunca creí que el fuera capaz de esto. Esto es más intenso. Tengo una bomba de tiempo en mi vida, necesito pensar en un plan, un plan en el que nadie salga herido, a excepción de Cristhian.

El pensar me cuesta demasiado, el tiempo me presiona y no me deja pensar bien y claro. Pero sí necesito un plan para que todos estén a salvo, necesito revelar algo.

Revelar la verdad.

Decir la verdad ante todos los trabajadores del café.

Decir la verdad ante Guillermo.

Tengo miedo, mi mayor miedo se hará realidad, y después todo será negro y frío, como mi vida pasada. Un pasado que no puedo dejar atrás, por más que lo intento, no puedo apartarlo de mí.

¿Y si involucro a la policía?... No, no lo puedo hacer, terminaré en la cárcel, alejado de Willy, y eso es lo que menos quiero. ¿Y si les digo realmente quien soy a los amigos de willy?...no, me reportaran a la policía. El decirles que yo asesine a su compañero Frank lo tomarán mal, me querrán matar en ese mismo instante, y si no lo hacen, me entregaran a la policía. Las demás personas no me interesan, el único que me interesa es willy.

No importa. Arriesgaré mi vida con tal de que Willy este vivo.

Me levante de mi cama, salí corriendo hacia el comedor para ir trazando mapas e ir apuntando las ideas para el plan, el cual consistía en alejar a todos de las manos de Cristhian y matar a Cristhian.

Si deseo matar a Cristhian lo tengo que llevar a las afueras de la ciudad, donde no haya mucho contacto con la civilización.

El lugar. Ya tengo el lugar en donde ocurrirá todo.

Ahora tengo que pensar en un sin fin de cosas más, tengo que averiguar como hacerle creer a Cristhian que realmente los estoy asesinando. Quizás lo haga pasar que secuestro a todos y en un mismo día los mato a todos.

Tengo que estar preparado, pues Cristhian llevará a sus hombre por si algo no pinta bien, y no serán pocos.

Toda la tarde me la pase formulando un plan para acabar con Cristhian y sus fechorías, a pesar de tener la presión encima puedo decir que lo que he hecho será muy bueno para acabar de una vez por todas a Cristhian.

Ahora solo me queda contar todo a todos los involucrados en este lío. He ahí la parte más difícil de todo. Si diré la verdad sera un día en el que Guillermo no trabaje, a él le quiero contar mi vida pasada de otra manera, de una manera más personal, más intima, más profunda.

(...)

Eterno se me hacia que fuera sábado, hoy por fin podre decir el plan y la verdad ante las personas que trabajan en el café, algo que me tiene sumamente nervioso.

Salí de casa para poder enfrentar los problemas, vaya futuro me espera después de contar todo a todos. Salí con un suéter, pues en las calles de Barcelona hacia bastante frío. Al caminar por las calles una densa niebla se empezó a presenciar en el ambiente, a consecuencia de lo densa que se hacia era algo difícil poder mirar a los alrededores. Las calles se empezaron a llenar de automóviles por la neblina, y las calles colapsaron de ruidosos sonidos de claxon de los vehículos parados.

Al llegar al D'caffé Smolt me detuve en frente de la puerta. A mi mente le vinieron los buenos momentos que tuve en mi vida pasada, antes de que llegara Cristhian a destruirla. Los sonidos en mi cabeza eran agradables, un niño riendo felizmente, voces de un niño llamando a sus padres y por ultimo, en mi mente se escucho un te quiero... pero era dicho por tres personas, dos hombre y una mujer. Pero esas palabras se fueron haciendo mas débiles hasta desaparecer de mi cabeza.