Enamórate de mí, prometo amarte tan intensamente como jamás nadie te amó. ¡Hey! Escucha mi voz, mira mis ojos, siente mi corazón, toca mis manos y verás que mis sentimientos son evidentes.
Enamórate de mí, de mis ganas infinitas de hacerte feliz, de la alegría que irradia mi sonrisa cuando apareces frente a mí, de mis ojos tímidos ante tu intimidante mirada, de los momentos en los que pacientemente te observo para grabarme tu hermosa imagen.
Ámame, prometo serte fiel, prometo cuidarte, escucharte, ayudarte, jamás soltarte y quedarme siempre junto a tí. Solo ámame, necesito de tu amor, necesito tus brazos para agraciarme después de tanto dolor, abrígame del frío, dame calor, abrazame como si fuese la última vez y nunca me sueltes.
Ven, acompañame a caminar, a recorrer estos caminos llenos de incertidumbre, toma mi mano en esta travesía, estas manos que te ofrezco con antelación para no dejarte caer, solo ven a mí, solo mírame, desde mi intrepidez con libre albedrío te estoy gritando que te amo tanto y me estoy quedando sin voz, mis cuerdas vocales se están cansando de gritarte con afán y no quiero que eso suceda.
Ámame, no dejes que me rinda, no quiero dejarme vencer por tu indiferencia, no quiero renunciar a tu compañía, ni a la posibilidad de tenerte junto a mí para siempre. Sí, para siempre es el término con el que defino la eternidad de mi amor por tí, solo aceptame, solo toma mi mano y camina junto a mí.
Cariño, escúchame, abre tu corazón, déjame entrar, quiero amarte hasta que ya no pueda respirar, hasta que ya mis ojos no te miren más, hasta que mi voz se deje de escuchar y mi cuerpo ya no tenga fuerzas para correr hacia a tí.
Amor de mis amores, déjate abrazar, déjate querer, déjate besar, anhelo besarte, esos labios que ni un millón de labios pueden borrar de mis recuerdos ni del sabor en mi paladar, esos labios suaves, esos labios bonitos hechos a mi medida, hechos para mí, esos labios que me llaman y me incitan a devorarlos con fervor.
Deja que te abrace, prometo calmar tu frío, prometo abrigarte de la brisa nocturna, sólo quiero que me permitas abrazarte y besarte, que tu libre albedrío elija quererme y te lleve hasta mí, que tu corazón se acelere por mí y que tu sonrisa sea para mí.
Ámame y prometo darte esa seguridad sentimental que necesitas, ámame y prometo nunca fallarte y si en algún momento dudo en hacerlo, púes me estaría fallando a mí y a mis ideales, a mí y a mi amor propio, porque amarte es como amarme a mí misma, eres parte de mí y no estar junto a tí es sentir un vacío dentro de mí.
Ámame cómo amo a tu imagen desprevenida, esa imagen que observo desde lejos sin tu total conciencia, como admiro los lunares de tu rostro, como admiro tu hermosa sonrisa cuando sonríes y el sonido de tu risa cuando mis alocadas ideas tontas la provocan. Ámame como amo a tus mejillas sonrojadas y la seriedad de tu rostro cuando hablas.
Déjate amar como te amo, déjate tocar de estas manos fuertes y firmes que jamás te lastimarían, déjate besar por estos labios deseosos por sentir tu sabor una vez más, una y otra vez, una y un millón de veces, una y billones de veces, tantas veces como me lo permitas
Deseo que me permitas besarte porque también lo anhelas, que me dejes abrazarte porque quieres sentir mis brazos alrededor de tu cuerpo, anhelo tomarte de la mano sin temor a un rechazo, hablarte de mi amor sin temor a que me juzgues y dudes de mis palabras, deseo hablarte libremente sobre cuánto te amo, sin temor a que después de escucharme te marches.
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Ámame, solo un poco de lo mucho que te amo, cree en mí, quítame este miedo al dolor, ese miedo que me esta incitando a rendirme y no quiero hacerlo, pero siento mucho miedo de que tu indiferencia me termine de romper, no quiero que eso pase, no quiero romperme para siempre, no quiero resignarme a vivir sin amor, sin tu amor... Solo ámame y prometo hacerte feliz hoy, mañana y siempre.
