MI SHUN |BlUE DREAM| HyogaxShun

XX

Sin bug

Muchas gracias por los 5k, los votos y comentarios, enserio gracias.♥

Después de lo ocurrido, Hyoga y Shun se adentraron a la mansión, observo como todos estaban encendido con velas y el cómo se encontraba en el gran comedor, comiendo aquel pavo que Shiryu había preparado para todos. Ellos dos no decidieron ir, pues había comido así que solo fueron a la habitación del rubio y fue ahí donde Shun se quedó dormido entre sus brazos a causa del cansancio de aquella cita.

En la mañana siguiente, en navidad todo estaba hecho un desastre, gente de aquí para alla que le gustaba festejar aquello que no era de su cultura se encontraba peleando por regalos de última hora.

—Dame eso, yo lo vi primero. La señora tiro de aquel juguete pero le fue sumamente imposible.

—No yo lo mire primero maldita, muérete ya.. Entonces fue cuando todo se descontrolo y se agarraron de los cabellos.

Ikki bufo ante eso, uno partiéndose el lomo para defenderlos de aquellos Dioses ambiciosos y ellos peleando por cosas insignificantes, claro a él no le gustaba aquello o trataba de gustarle por su hermano, su pequeño niño, siempre llegaba y le traía un pequeño obsequio porque sabía que este era muy fanático.

Suspiro triste, este año no le regalaría nada, no por falta de dinero simplemente no quería verlo a la cara, estaba furioso, no con él, eso nunca. Estaba furioso con aquella doble cara del cisne por razones existentes para él.

Si, aquél caballero de fénix se encontraba caminando por el centro de la ciudad mirando todas la peleas a su al rededor, eran aproximadamente las tres y media de la tarde.

Miro su reloj y notó que justamente las manecillas se detuvieron.

— Maldición. Bufo, ahora tenía que comprar otro porque este ya no servía pues unos días antes lo mojo en el lavabo.

Se quitó el reloj de su muñeca y lo guardó en el bolsillo de su pantalón azul.

Caminó unas cuadras más lejos del centro para detenerse al frente de un lujoso restaurante de comida china.

El viento se hizo presenté.

"Que clima" pensó Ikki con fastidió.

Últimamente en estos meses ha habido ráfagas de viento fuerte, frío y caliente, además de eso lluvias. Todo un caos.

Tomó una fuerte bocanada de aire y caminó hacía la parte trasera del restaurante, una vez que había llegado abrió la puerta cristalina y observó como todos los trabajadores andaban de aquí para allá en sus asuntos de cocina y limpieza, el sólo negó; había desorden y eso era de extrañarse porque cuando él estaba allí no ocurría, si, ya que él, Ikki, el caballero de fénix organizaba la cocina, además atendía, era un mesero. La razón por la que a veces no estaba en la mansión Kido, ni con los chicos era porque trabajaba casi toda la semana en un restaurante chino, se encontraba en la isla de la reina muerte o salía por las noches/Mañanas a tomar cursos de idiomas y la pasaba bien, era algo productivo y le encantaba.

— ¡Que bueno que has venido! ¡Nos hacías falta! Eres bueno. Alagó un joven bajito mientras cargaba cajas de soda y las colocaba debajo de una mesa.

Este sólo lo ignoró y comenzó a despojarse de su chaqueta para entrar al baño, ahí se despojó de las prendas y se puso un pantalón negro de vestir, una camisa blanca corta y el mandil rojo con el logotipo significativo del restaurante.

Salió y guardó su ropa en un estante con su nombre.

— Por favor podrías atender la mesa 10.